Igualita a ella

Cap 19

NARRA CARINA

Estaba sola en casa, mis hijos, porque eso eran ambos, mis hijos, salieron después de cenar y mi mamá y Grabriel se fueron antes. Me puse él pijama y me sente en el sillón mirar una pelicula, pero cuando estaba muy concentrada tocan el timbre, me pare dudosa y abrí, era Sebastian..

-Hola..Seba, ¿que haces acá?.-

-Aproveche que estabas sola y vine a verte..-

-Y como sabes que estaba sola?...No me digas nada, Gabriel?-

-Es un capo Gabrielito.-

-Si,un capo..-

-Puedo pasar?-

-Si claro..-

Pasó y camino hasta el sillón y yo detrás de el. Nos paramos frente a frente, el tomó mis manos, yo me ruborice, el sonrió para después hablar.

-Cari,yo.. Quería decirte que..- Y se vió interrumpido por el ruido de la puerta y rápidamente solté mis manos de las suyas.-

-Hijo, por que volviste tan temprano?- Subiendo mi mirada para mirar alrededor- Y Julieta?

-Se fue, no se, no la encuentro-

-Como que se fue? A donde se fue?-

-No se, salió corriendo, yo salí atrás de ella pero ya no estaba, y un señor que estaba por ahí me dijo que vio que una chica se tomaba un colectivo, pero no sabía cual era, pero paso algo adentro del boliche porque salió muy nerviosa, pero no se, no se..

Manu me contó como paso todo exactamente, agarre mi campera y junto a el y a Sebastian salimos a buscarla...

NARRA JULIETA

Sentía como alguien me llamaba y después tocó mi hombro, era el chofer del colectivo al parecer me había quedado dormida. El colectivo ya había llegado a la terminal, entonces el chofer me indico que tenía que bajar, y eso hice, baje del colectivo para después sentarme en un banco. No sabía donde estaba, no sabía que hora era, tampoco tenía batería en el celular, estaba con frío y totalmente dolida por lo de Logan. Este no era mi lugar, estaba perdida, no conocía calles, personas, nada.. Empecé a caminar.. Caminaba sin rumbo, solo seguí derecho, no había ni un alma en la calle, me sentía sola, Estaba sola mejor dicho. Me rendí, me senté en el cordón de una vereda y allí sentada me alcanzó el día, me sentía mal, me puse a llorar,tome mis rodillas, y llore, me descargue sentada en la vereda de esa calle desconocida, Llore desconsoladamente.

Al rato, cuando ya no me quedaban muchas lágrimas apareció una señora.

-Nena,que haces acá a está hora y sola? Estás bien?-Preguntó muy amable.

-No se, me perdí, no se donde estoy.-

-De donde sos amor?

-De Uruguay.

-y que haces acá sola?-

-Estoy de viaje, salí con un amigo pero salí enojada y me tome un colectivo y me quede dormida, y camine desde la terminal hasta acá,no se donde estoy.-

-Pero donde te estás quedando?

En es momento no podía recordar en donde me estaba quedando, no recordaba en donde se ubicaba el hotel, mucho menos el nombre, sólo me acorde de la casa de Carina..

-En Haedo..-

-No queda muy lejos de acá, si queres vamos a buscar mi auto que está a dos cuadras de acá y yo te llevo hasta allá, Como es tu nombre.

-Julieta.-

-Julieta,que lindo nombre, yo me llamo Marie, bueno, aceptas mi ayuda o no?.Dijo estirando la mano.-

Se que no debía hablar con extraños y mucho menos dirigirme a sus casas, pero no me quedaba otra opción, ¿Que iba a hacer? ¿Quedarme sentada en esa vereda? No- Asentí con la cabeza tome su mano y camine con ella. Llegamos a la casa, me ofreció agua y algo para comer, después salimos por el garage subimos al auto de Marie y emprendimos viaje a Haedo, a medida que nos acercábamos iba reconociendo las calles.

-Si me dejas en la plaza, esta, como es que se llama, para, empezaba con L.-

-Libertador y..?

-Si esa!!.

-Ya se cual esa!, segura que queres que te lleve ahí, no queres que te arrime hasta tu casa?-

-si segura, desde ahí yo me arreglo.-

Llegamos a la plaza, yo ya no llevaba buena cara, no me sentía muy bien, le agradecí muchisimo a la señora Marie, y ella me dejó su numero en un papel, pero antes de que bajara del auto me preguntó:

-Te sentís bien?

-Si,solo estoy un poco cansada, pero estoy bien, cuando llegue a mi casa,te aviso, y nuevamente gracias, y otra cosa, ¿Que hora es?-

-De nada, y son las..- Se fijo en el reloj de su muñeca- Las 9 am...

-Gracias de nuevo, chau.-

Baje del auto intentando caminar derecha pero no podía caminar mucho, me sentía muy mal, cada ves más, aguante hasta que Marie se fuera, y cuando lo hizo, me moví hasta un banco de la plaza y me senté, puse la mano en mi frente, estaba caliente, sudaba, y mis ojos se cerraban, pero antes de que pudieran hacerla escuche que me llamaban

-¿JULIETA?!.

Levante mi cabeza, era Logan.