Me vi deslizando mi bandeja por la barra a la hora del almuerzo, tenia una hambre tremendo -como siempre- pero no habia nada delicioso en esta cafetería, asi que termine eligiendo una hamburguesa y unas patatas fritas, una ensalada que tenia buena pinta y de postre un rico yogur de fresa.
Mis pies automáticamente caminaron hacia nuestra mesa habitual, en todo el medio de lugar. Ser la novia del capitan del fútbol tenia sus ventajas.
Vi que Emma ya estaba sentada con Lana y Katy, amigas de clase y porristas del Equipo de Fútbol. Me agradaban, eran bastante simpáticas y algo tontas, ya que son rubias. También vi a Damon con Chad, Tyler y Zack comiendo ensalda mientras charlaban.
-¡Preciosa!- me saludo Emma mientras me sentaba a lado de Katy, enfrente de Damon.
Inconscientemente dirigí mi mirada hacia Damon, que parecía tener sus lindos ojos mieles clavados en mi.
Deberia acostumbrarme ya a su mirada traviesa.
-Estabamos yo y las chicas hablando del Dios Griego- explico Emma mientras metia una patata en la boca.-Que, por cierto, ya se como se llama- sonrió con su típica sonrisa maligna.
-Enserio?- Saltaron Lana y Katy que parecian estar ciegas por el chico al igual que Emma.
Mire a los chicos que estaban riendose por no se que, y luego mire a Chad y recordé lo de esta mañana, él simplemente me dedico su mejor sonrisa.
-Se llama...- se quedo pensativa. - Dragos- susuro por lo bajo. Lana y Katy gritaron y Emma se unió.
-Locas, me vais a dejar sordo- Damon se quejo por el susto que le dieron.
Solté una carcajada.
-Hola preciosa, no tuve placer de conocerte, soy Alex- mire a quien me hablaba y me encontré con el chico que acompañaba a mi hermano horas antes en el baño.
Rechace su mano.- Yo... soy...- Antes de que acabara la frase me interrumpió Damon.
-Ella es mi novia y hermana de tu amigo.-
-Oh, ya entiendo. Tranquilo Man.- Se sentó a lado de Chad y comió de mis patatas.
¿Pero quien se cree?
Damon le fulminó con la mirada.
-Vamos Cleo, te llevo a casa- sin dejarme responder me cogio de la muñca y caminamos hacia el aparcamiento.
-Si iros, yo puedo volver sola!- escuche a Emma gritar. Intente formar un -lo siento- en mi boca pero parecio ignorarme.
-No habia terminado mi almuerzo- replique soltandome de su agarre. Estaba apretando fuerte. Malditos brazos que tiene el cabron.
-Si quieres vamos a comer a Little Italy, asi pasamos un rato juntos.
Amaba Little Italy, amaba la comida Italiana y Damon lo sabia.
Aparco el jeep a una cuadra de la entrada de restaurante y bajo a abrirme tan cabelleroso como siempre. Cogimos una mesa y empecé a mirar el menú. Yo ya sabia lo que queria pero me gustaba mirar el menú con sus deliciosos platos italianos y leerlo con ese acento.
Se que me comporto como una niña a pesar de mis 18 años. ¡No me juzguen! No quiero crecer.
-¿Ya saben que van a pedir?- Pregunto el camarero con su acento italiano.
-Yo quiero una pizza de barbacoa mediana- miré a Damon que asintió con la cabeza.
-Y usted, caballero?-
-Yo nada- el camarero asintio y volvio a la barra para traer el pedido.
-No quieres comer nada?- pregunte.
-Prefiero verte comer silenciosa- Apoyo sus brazos sobre la mesa mirandome con sus ojos abiertos.
-Estas diciendo que hablo mucho cuando como?- hize el mismo gesto que él, desafiendole.
-Estoy diciendo que me vuelves loco cuando estas callada- se acercó sus labios a los mios dejandome un largo y hermoso beso.
~•~
De momento he tenido pocos votos y tal y agradezco a lo que hayan votado, solo espero que aumente la cosa, a mi me gusta mucho y espero que a vosotros también. Opinar los que podéis por favor.
