20. Nos volvemos a encontrar

30.3K 2.6K 788
                                    

Natalia P.d.V.

Desde aquel día, an sido años de sufrimiento.

Mi hermano menor, Kevin, se quito la vida el día en el cual su amado fue asesinado.

Aun recuerdo como si ubiese sido ayer.

En ese entonces, Kevin pudo completar su misión con éxito y decidí visitarlo para darle las felicidades.

Cuando llegue a su apartamento, su vecina me comento de que Kevin no avia llegado a casa desde hace días.

No pende que esto fuera algo de lo normal, es mas, era de esperarse ya que Andrew salio de el hospital hace poco tiempo. Para mi era bastante obvio ir a la casa de mi futuro cuñado para celebrar con los dos.

Solo que al llegar, nunca me hubiese  imaginado de que los encontraría a los dos, abrazados, y sin vida.

Al principio, no pude reaccionar. Solo estaba parada frente a ellos. Mirándolos. Lo que me hizo regresar a la realidad fue el llanto de un animal. Era Luna.

La busque por la casa, y la encontré con una pata lastimada. Pronto me encontré con ella envuelta en una toalla en mi brazo y mi mano derecha llamando a la policía.

Cuando llegaron, les conté mi lado de los echos, al mismo tiempo de que contaba mi testimonio, una muchacha nos trajo la atención.

-¡Jefe! ¿Podría usted venir para ver esto?-

Mientras ella tomaba fotos, nos acercamos y vimos claramente una palabra escrito con sangre.

Alexander.

En ese momento lo entendí todo.

Me disculpe con el policía, ya que tenia que llevar a Luna al veterinario.

Mientras manejaba, estuve pensando en las miles de maneras en las que podría torturar a ese maldito mal parido.

Contrate a varias personas de mi confianza para poder encontrar a Alexander.

Cuando por fin lo pudieron localizar, me lo presentaron en bandeja de oro.

Lo torture asta que ya no pudiera levantarse. Asta que aunque estuviera con vida físicamente, por dentro estuviera muerto.

Lo despedace. Literalmente. Las autoridades lo encontraron unos dias después mutilado debajo de un puente en la ciudad de al lado. Sólo lo consideraron un ataque de pandilla, por lo cual estoy agradecida. Ya era un convicto, así que si muerte no era lo mas importante que tenían en su lista.

Ya an pasado seis años desde entonces, pero duele como el primer día.

Hoy me encuentro sola. Sentada en una banca, en el parque que tanto le gustaba a Kevin. Viendo mis alrededores no puedo dejar de preguntarme; ¿Y si hubiese sido una mejor hermana? ¿Y si tan solo lo hubiera escuchado más?

No puedo dejar de pensar en los "y si tan solo", me parten el alma, pero no puedo evitarlo.

Pude sentir que mis lágrimas querian ser libres, pero no. Nadia me ah visto llorar. Y mucho menos lo aran personas que no conozco en este maldito parque sin nada em especial.

-¿Estas llorando? ¿que tienes?

Niño entrometido, parece que nunca le dijeron que no hablará con extraños.

Levante mi rostro para decirle al mocoso que se fuera a jugar a otra parte, pero no pude.

Su rostro. Es Kevin.

-¿Ke-Kevin...?

El niño agitó su cabeza hacia los lados.

-No, mi nombre no es Kevin, ¡es Félix! Quieres conocer a mi mejor amigo? Se llama Martín!- Sólo entonces noté la presencia de el otro niño, ambos se veían jóvenes, como por la edad de seis. Mis ojos no podían creer lo que estaba presenciando, el otro pequeño es una réplica exacta de Andrew. Tampoco pude evitar notar que los dos tenían sus dedos entrelazados.

-O-oye, ¿Kevin es tu hijo?

Podía sentir como el nudo en mi garganta se hacia hacía más apretado al tener que hablar de Kevin.

-No... él era mi hermano...

Los niños sólo se miraron el uno al otro, obviamente confundidos con mi reacción, son algo pequeños para entender completamente.

-Y donde esta?

Martín pregunto con tanta inocencia que no supe que contestar. Solo solté una risita

-Pues... él ya no está con nosotros... es un espíritu que se fue al cielo, o tal vez sólo vigila a las personas que quiere....

Una lágrima rebelde que amenazaba en salir, cumplió con su cometido. Rápidamente talle mi rostro para que los niños no se dieran cuenta, pero al parecer mi plan no dio frutos.

Los dos chicos se acercaron hacía mi, ambos rodeando los pequeños brazos al rededor de mi cuello, después Félix me comenzó a consolar.

-No llores, todo está bien, yo se que tu hermano te quiere, y tu a él, no?

Lo único que pude hacer fue asentir y pensar lo patético que era ser consolada por un pequeño. Martín también se acercó a mi lado y me dio palmaditas en la cabeza.

Cuando se alejaron, me levanté y limpie las lágrimas que lograron escaparse sin mi permiso.

-Gracias, chicos. ¡Me siento mucho mejor! Ahora les debo algo, solo pisando y se los daré.- Tengo bastante dinero para gastar después de todo.

-Am, entonces, podrías venir a jugar con nosotros?- De todas las cosas que me pudo pedir Martín, ¿me pidió eso? ¿No dulces? ¿o tal ves juguetes? Además, se que soy chaparra, ¡pero tampoco me parezco a una niña!

-Claro, me encantaría, pero primero, ¿tu que quisieras, Félix?

-¡NIEVE!

No pude evitar soltar una risita al ver el entusiasmo de Félix.


-Está bien, está bien, sólo que vamos a avisarle a sus madres para que no piensen que los estoy secuestrando o algo parecido.

Los dos dijeron que sí y nos dirijimas hacía ellas.

-¡Ah! Casi se me olvida, ¿y como te llamas?

Martín me miró fijamente después de la pregunta que me hizo Félix.

-Me llamo Natalia.

-¡Oooh! ¡Tu nombre es bien lindo! Si tengo una hermanita, ¡le voy a decir a mi mamá que le ponga tu nombre!


Pude sentir como me sonrojaba. Al menos parece que ya no estaré sola, ahora tengo a mis dos pequeños amiguitos.

Y espero que está vez, las almas de Andrew y Kevin se queden juntas por un largo, largo tiempo.

El Fín
*****************************

¡¡Hola mis amoressss!!

Lo seeee, tardó miles de años en terminar, ¡¡pero lo hice!!

Um, este, no me odien?? XD?

Ah! Y también les quisiera preguntar, les gustaría que hiciera un final alternativo?

Ó tal vez tienen alguna idea para otra historia? Es que como que yo ya me queme el coco xD

Pero sí, los amo <3
(Plisnomeodien!)

Mi cuerpo en venta?! (ChicoxChico)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora