Tan Solo Una Nerd -Luke hemmings y tu-

Capitulo 7

-¿Puedes cuidar a Dusty? Gracias- dijo Luke sin dejarme hablar y salió de mi habitación de lo más rápido.

Miré al "Gatito" seriamente y él me respondió con un sonido raro, provocando que mis labios soltaran un "Awww" enternecido inconscientemente.

Genial. Me había enamorado de un gatito destructor de Amanda's. Qué día tan perfecto.

Me quedé acariciando a de Dusty mientras escuchaba cómo Amanda se vestía en la otra habitación y luego cómo se iba de la casa. Pobre Amanda, ahora de seguro estaba traumatizada de por vida, ya me la imaginaba en su vida futura siendo una loca con fobia a los Gatos.

Sentí los pasos de Luke subiendo las escaleras dirigiéndose nuevamente a su habitación y luego el ruido de una puerta cerrarse.

Pobre Lucas, no había podido terminar "la tarea".

Volví a ver a Dusty, quien descansaba relajadamente en mi regazo. Era tan tierno, no podía comprender por qué Luke no lo tenía a su lado todo el tiempo. Dios, qué dulzura, ¿cómo no amarlo?

-De verdad te llevas bien con Dusty, ¿eh?- preguntó una voz familiar enfrente mío.

Alcé la mirada y vi a Luke parado frente mí, apoyando su espalda contra el marco de mi puerta y sonriendo nostálgicamente mientras veía enternecido a su Gato.

Vaya, ¿tan concentrada había estado con Dusty que me distraje del mundo exterior? Ni siquiera había escuchado a Luke abrir la puerta.

-Síp. Es un amor, no entiendo por qué no lo quieres tener cerca todo el tiempo- le dije frunciendo el ceño extrañada y abrazando a Dusty suavemente,provocando que nuevamente el felino haga ese tierno pero raro ruido... Pff ni que Luke haga ese ruido!

Qué estúpida, me dijo mi cabeza, y mi "yo" exterior estuvo de acuerdo.

-Me encanta estar con él- repuso él mirándome con el ceño fruncido y los labios presionados entre sí.

-¿Y por qué nunca te veo con él?- cuestioné intentando demostrar lo obvio.

-Eso es lo que no entiendo- murmuró el simio más para sí mismo que para mí. Un signo de pregunta se plantó sobre mi cabeza. ¿Él no sabía por qué no pasaba tiempo con él...? Hay que ver, esto no tenía lógica.

-No entiendo...- dije volviéndome turbia, juntando lo que más podía mis ojitos.

Sí, era una expresión mía, cuando no entendía algo mis ojos hacían aquello inconscientemente. Estúpido, ¿no es así?

-No, no, nada... Olvídalo- dijo Luke y sacudió la cabeza negando torpemente.

Me encogí de hombros mentalmente y seguí acariciando a Dusty, sin tomarle importancia a Luke.

-Oye, yo te odio y todo eso, pero mamá me mandó a hacer las compras y...- empezó a decir el rizado un tanto incómodo.

Dejó incompleta la frase mientras rascaba su nuca un tanto nervioso.

¿Qué onda? ¿Luke Hemmings nervioso? Me aferré al pensamiento de que estaba así porque no sabía cómo continuar su frase y me limité a quedarme ahí sentada. Alcé una ceja en señal de que sinceramente no entendía ni gota de lo que estaba diciendo.

-Explícate- demandé torciendo un poco mi cuello hacia la derecha.

Luke suspiró pesadamente. Al parecer se le estaba haciendo difícil.

-Me acompañarás a hacer las compras. Vamos- me dijo sonando más como un mandato que como un comentario.

Me encogí de hombros y acepté. Salir no me iba a hacer daño, decía yo. Además, no tenía ganas de pelear, no con Dusty en mis brazos, él hacía que mi orgullo y escudo bajaran... Sí, ya, me había enamorado de un gato y andaba poéticamente dramática.

Dejé a Dusty sobre mi cama y me levanté, dando a explicar que saliéramos de mi habitación de una vez por todas. Sin embargo, Luke no se movió, lo único que hizo fue observarme con una ceja arqueada.

-¿Qué?- cuestioné sin entender. ¿Tenía algo pegado en la cara?

-¿Vas a ir vestida así?- preguntó mirándome de pies a cabeza. Yo asentí firme.

-¿Por qué no?- dije yo poniendo mi figura imponente frente a él.

-Porque me avergüenzas- respondió él cruzándose de brazos.

Y aquí íbamos otra vez.