One-Shots Gaamatsu

Dudas

Aviso: segunda parte de esquimales

Llamó a la puerta del cuarto de su hermana, impaciente por consultarle.

Tras haber estado durante bastante tiempo investigando sobre ello no había logrado sacar nada en claro, no era un tema que el entendiera, y no era capaz de sacar sus propias conclusiones al no tener la mínima experiencia en ello. Nunca le había ocurrido nada parecido, normalmente cualquier problema que surgía era capaz de sacar una o dos soluciones al mismo, y sin tardar tanto, pero por el contrario, no había sido capaz esta vez.

Escuchó a su hermana invitándolo a entrar y no esperó más, esperaba que ella supiera más del tema.

Asomó la cabeza por la puerta y su hermana al verlo sonrió y lo invitó a sentarse con ella en la cama, algo extrañada ya que él no solía frecuentar su habitación.

—¿Qué ocurre? Te veo algo nervioso —comentó ella intentando tranquilizarlo con su sonrisa, cosa que realmente lo relajó un poco.

—Bueno, yo... tenía una pequeña duda, esperaba que pudieras ayudarme —esquivó su mirada, sin saber realmente que hacer, se debatía entre irse y quedarse con la incógnita o quedarse y dar de una vez con la respuesta.

—Claro, pregunta lo que quieras, te ayudaré en lo que sea posible —afirmó ella.

Dudó un momento en que hacer.

  —Vamos, no tienes que avergonzarte ni nada, soy tu hermana, puedes contarme lo que quieras, no saldrá de aquí —reafirmó ella, logrando infundirle un poco de confianza.

—Bueno, verás —comenzó—, tú estás ahora mismo con Shikamaru y, bueno, me preguntaba... —se detuvo un segundo, pensando en las palabras que podía utilizar—, ¿cómo fue vuestro primer beso? — terminó diciendo.

Su hermana parpadeó unos segundos, algo incrédula.

  —Eh, bueno, no sé que responderte a eso, es... vergonzoso —sonrió levemente, avergonzada, riendo de manera nerviosa.

—Bueno, pero... ¿como sabes cuando es un beso? Es decir... —paró de hablar, sin saber como explicarse, esa pregunta había sonado demasiado extraña.

—Ah... Pues... un beso... pensé que lo sabías, ya sabes, cuando dos personas juntan sus... —fue interrumpida por su hermano, que no sabía aún como explicarse con claridad para que ella lo entendiera.

—Ya, ya, lo sé, no me refería a eso —suspiró pesádamente, aún algo avergonzado.

No sabía como formular la pregunta para que ella no malinterpretara nada, ni para darle demasiadas pistas de lo que a él reálmente le ocurría, ni por qué estaba de esa manera, no pretendía decírselo, pues eso sería realmente vergonzoso, el hecho de que ella supiera por quién estaba así.

 —Lo que quiero decir es, ¿esa es la únca manera de dar un beso? Un... un beso de esquimal, por ejemplo, ¿no tiene el mismo significado? —se explicó al fin como pudo.

Su hermana volvió a parpadear un par de veces, ¿qué pretendía sacar con aquello?

 —Bueno, no quería decir eso, tienes razón, hay muchas más maneras de dar un beso, no tiene por qué ser con los labios y, si te digo la verdad, no sé con exactitud el significado, o si tiene uno específico, a parte de por qué no se besan con los labios, pero a pesar de todo, es un acto muy tierno, y creo que independientemente del significado que pueda darle la persona que de el beso, es lo mismo que uno normal —explicó ella como pudo, intentando transmitirle a su hermano que no tenía por qué estar tan tenso, e intentando que este la entendiera.

Él asimiló unos segundos las palabras, y asintió con la cabeza, dándole a entender que la había comprendido.

 —¿Por qué me lo has preguntado? — dijo ella de pronto—. ¿A caso alguien... te ha dado uno? —Gaara notó como en sus ojos se implantaba un pequeño brillito de emoción que lo puso algo nervioso.

—No es eso, gracias por todo —intentó responder lo más serio que pudo y se levantó de la orilla de la cama, dispuesto a retirarse de la habitación de su hermana, ahora que ya podía intentar sacar sus propias conclusiones.

—De acuerdo... quiero que sepas que no te creo, pero cualquier cosa que necesites estoy aquí, si te surge otra duda, no tardes en preguntarme y... dale recuerdos a Matsuri de mi parte —dijo ella, con malicia en la última frase, aunque en realidad estuviera más que feliz de que su hermano le consultara sobre ello y sobre todo de ver que, aunque mínimamente, había avances en la relación de Gaara y Matsuri.

Él no se giró a verla, salió del cuarto sabiendo que su hermana se había dado cuenta de todo, a pesar de que él no fuera a confirmarle nada. Entró en su cuarto tumbándose en la cama, observando el techo. Aún tenía sus dudas, pero ahora tenía algo con lo que poder lidiar con ellas.

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Han pasado 82 años...

Ok no, ya dejo el titanic.

Como dije en mi otro fic de "No iré detrás de ti", lamento mucho haberme tardado tanto, sobretodo en estos one-shot. Realmente no tenía pensado tardar tanto, en un principio subiría uno en San Valentín, cuando al final no fue, iba a subir uno en marzo, y cuando menos me he dado cuenta ya estamos en mayo...

Dios, no parece que haya pasado tanto, pero por desgracia, así es.

En fin, solo espero que me perdoneis y os haya gustado, y que si es así me dejeis algún comentario, que realmente ayudan mucho.

Me comprometo a subir el próximo dentro de no mucho, quiero compensaros de algún modo, además de que un one-shot a parte de estos está casi terminado y estoy por subirlo también.

Y, Persae, si sigues viva por algún lugar, espero que te estén gustando :'c.

En fin, creo que eso es todo, ¡xau!