Llegamos a casa y como todos los días, quedamos en salir. Me despedí de el y camine directo al jardín. Entre por la puerta llena de grafitis. Fui directo hacia la puerta del comedor, la abrí sin hacer ruido y me fije si no había nadie. Una vez que confirme que nadie estaba cerca entre y cerré la puerta detrás de mi de la misma forma en la que la abrí. Subí las escaleras lo mas rápido que pude y me encerré en mi cuarto. Me puse una blusa manchada de cosas que la gente tiraba al suelo y pantalones rotos, se preguntaran porque esa ropa bueno porque simplemente mis padres dicen que no vale la pena comprarle cosas a alguien no deseado. Me arregle el cabello y salí de mi habitación. Baje en silencio pero cuando iba a abrir la puerta escuche una voz fuerte que me llamaba.
-¡Estorbo!, ven acá-me voltee y vi que era mi hermano Peter, el es el mayor de mis hermanos.
-¿Q-qué?-dije con vos temblorosa ya que yo se porque me ah llamado.
-Que vengas acá, papa no sabe que haz llegado y estoy seguro que le encantara saber que ya estas aquí.-dijo con una sonrisa torcida.
Papá es el que empieza todos los abusos, el siempre empieza a pegarme y luego le siguen mis hermanos y hasta terminar con mamá. "Tengo que salir de aquí" pienso y me giro hacia la puerta "Pero si corro me atrapara y será peor el castigo" dice una parte de mi "Pero esto dolerá mucho" dice otra parte.
-¡Papá!, estorbo llego-dijo Peter.
Se escucharon unos pasos desde arriba y el sonido hizo eco dentro de mi cabeza. Apareció mi padre bajando el ultimo escalón de las escaleras con el cinturón en la mano.
-¿Porque no dijiste que habías llegado? Acaso quieres retrasar lo inevitable?-dijo con tono de burla.
Me paralicé en mi lugar.
-¡Contesta!-grito haciendo que diera un salto en mi lugar.
-N-n-no-dije agachando la cabeza y escuche como mi hermano bufaba.
Sentí como me empujaban fuertemente para tirarme en el piso y el golpe de culo dolió mucho. Voltee hacia arriba y vi a Peter cruzado de brazos frente a mi, lo mire con cara de suplica de que hiciera algo pero yo perfectamente sabia que no serviría de nada. Me puso el dedo medio, sonrió y se hizo a un lado para dejar pasar a mi papá y una vez que el estuvo delante de mi, baje la cabeza y sentií como un liquido se esparcía por mi cabeza. Tenia un olor a... Vodka. "¿De donde saco la botella?" pensé pero luego una voz en mi cabeza respondió "¿De donde no? seria la pregunta correcta, hay botellas de casi todos los tipos de alcohol por toda tu casa, idiota" sentí una patada en mi pierna izquierda y escuche como Peter decía.
-Eres un pedazo de mierda viviente, no sirves para nada, ojala no hubieras nacido.-y mas cosas a las que ya estoy acostumbrada.
Voltee hacia arriba y vi como el cinturón de mi papá venia directo hacia mi pero...
En ese momento desperté, estaba sudada, sentía mis mejillas húmedas, mi respiración muy agitada, el cuello y la cabeza me dolían mucho, mis ojos luchaban por cerrarse otra vez pero no quería que lo hicieran. Voltee en todas direcciones y vi que estaba en un avión. Voltee a mi derecha y ahí estaba Damian dormido con la boca abierta y roncando. Respire hondo y solté el aire en mis pulmones unas 5 veces hasta que estuve un poco calmada. Me desabroche el cinturón y me levante pero casi caigo porque mis piernas no reaccionaron. Me puse de pie bien y sentí como mis piernas temblaban y como pude llegue hacia el baño del avión. Por suerte no había fila entonces pude entrar rápido y cerré la puerta con seguro. Me en la taza del baño y respire hondo 2 veces mas. Hice mis necesidades y me lave las manos en el lavabo que estaba a la derecha y me apoye en este, voltee hacia el espejo que estaba en frente mío y susurre.
-Fue solo otro sueño, otro sueño, otro sueño-lo repetí como 3 veces mas y salí del baño, fui hacia mi asiento, me abroche el cinturón y cerré los ojos tratando de recobrar el sueño.
...
Atentamente, Grecia.
holakdhfgadwqhjdfdkhbfjkSoyBarbaraYAcaboDeTerminarDeCorregirEsteCapituloPorqueGreciaYaSeDurmioogdyuikdertyujfjEnRealidadSiempreCorrigoSusCapitulosnvkmnbvcdyuknbvAdiohHijosMiosdiknbvkhdjsu
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¿Final feliz? ¿Final triste?
De TodoHay dos personas, dos historias Por un lado esta Heather. Una chica normal, común y corriente. Su madre, ya desesperada porque su hija tiene 18 años y no se ha independizado, la manda a un pequeño pueblo junto a un muelle a vivir sola. A ella no le...