Sus Juegos. Mis reglas.

Capítulo 9

Pasaron unos minutos y Kath empezó a explicarle a Peeta que todo saldría bien. Que daba igual si ella estaba dentro de los juegos o no. Katniss ganaría con él.Pero parecía no creerse nada.

-Y.. ¿Cómo sabes todo eso eh?-preguntó intrigado de que le hablara como si ya supiera de todos modos que iban a ganar seguro.

Pero Kath estuvo pensativa, no sabía si decirles la verdad o no... se lo pensó mejor y por fin le dio una repuesta:

-Ganareis, créeme...

Dicho eso Peete asintió y no volvió a hablar durante el viaje. A veces se quedaba observando a Kath, como si fuera una extraña. Pero al rato se le pasaba y le miraba con ese cariño y esa sonrisa que tanto enamoraba a la gente, incluso a Kath. Caminaron un buen rato y se detuvieron al oír un cañonazo.

-Uno menos-dijo Kath susurrando, mientras se sentaba al suelo buscando algo.

-Vaya... ¿Ahora cuantos quedamos? -Dijo mientras se sentaba junto a Kath de frente, volviendo a observarla.

-No lo sé-se limitó a encogerse de hombros.

-¿Kath? ¿Qué eres?

Esa pregunta la desorientó unos segundos. “¿A qué se refería?¿Un bicho raro o qué?” se preguntó Kath

-¿Qué quieres decir?

-No me mires así-sintió ganas de reír por la cara que ponía en esos instantes- no me refiero a que seas una cosa rara o algo parecido. Me refiero a...cómo eres de persona. Si eres valiente, miedosa, adorable, dulce, sensible...

Con cada adjetivo que salía de su boca hacía que Kath se derritiera por dentro..

y cuando al fin terminó su interminable lista de perfecciones, la cara de Kath estaba llena de lágrimas. Peeta al darse cuenta de eso se le acercó y la abrazó con fuerza.

-¿He dicho algo malo? Lo siento...

Ésta negó con la cabeza y empezó a reírse con ganas.

-Es que.. me has conmovido con los ejemplos que has dicho..

Peeta se unió a sus risas de lo contagiosas que eran.. pero entre risa y risa. Los dos no se dieron cuenta de que entre la maleza estaba alguien vigilándoles, acechándoles y observando cada movimiento que hacían, para luego matar a los dos sigilosamente.

-Cuéntame algo sobre tu vida-inquirió Peeta animado.

-Vale...haber, aparte de leer libros sin parar y todo eso. Mm..-se qué unos momentos pensativa y sonrió- Creo que toda mi vida se vasa en eso. Leer, leer y solamente leer.

-Vaya, qué vida más sosa ¿no?-bromeó

-Sí, muy sosa...

-Y.. ¿Tu color favorito?

-El naranja.

-¡IGUAL QUE EL MÍO! ¡ EL NARANJA ATARDECER, Y NO EL NARANJA ESE DE EFFIE!

Kath se echó a reir.

-Es broma, ya sabía que te gustaba ese color, mi color favorito es el azul celeste.

Atónito, preguntó con intriga:

-¿Cómo lo sabias? Ah , ese color también está bien, pero es mejor el naranja atardecer

-Misterios de la vida. No, es mejor el azul celeste.

-NO

-SÍ

-NO

-SÍ

-NO

-NO

-Sí... no, espera.. ¿Qué ha pasado?

-Que he ganado yo-dijo Kath contenta.

Peeta empezó a reírse, pero de repente dejó de hacerlo, recordandose así mismo por primera vez que estaba en los juegos del hambre,un sitio donde solo podía salir vivo un ganador... ahora que lo pensaba, Kath le dijo que Katniss y él ganarían.. “¿Qué estaba pasando aquí?” Pero decidió preguntárselo más tarde.

-Está anocheciendo Kath, vamos a dormir ¿te parece bien? Y esta vez no hagamos ruido..

-Me parece bien, creo que nos hemos descuidado un poco.

Dicho esto, cada uno se tumbaron lejos del otro aunque no demasiado por si sucedía algo y que tuvieran que huir juntos.

Enseguida los dos se quedaron dormidos.

Y Kath, la pobre Kath, volvía a tener pesadillas

Ktherine, cariño... tienes que ayudarnos.

Tú eres nuestra única oportunidad de vencer...

Eres nuestra salvación.

Por favor...

sólo tú …

De repente esas veces tan reconfortarles desaparecieron y a lo lejos divisó que unas tierras empezaban a arder sin control. Corrió para ver qué pasaba , pero nunca llegaba a su destino. Oía gritos, súplicas, gente que pedía ayuda.

Desesperada intentó correr más rápido, pero tropezó con algo y cayó al suelo.

Miró a la zona donde se había tropezado y vio a una persona muerta en el suelo..

Y la voz volvió...

Esto es lo que harán a nuestro hogar...

mata a la gente que harán esto..

mátalos a todos o acabarán contigo

hija mía...

¡PUUUUUUM!

Kath se levantó de golpe sudorosa y con el corazón a cien por hora. Buscó a Peeta, pero no lo encontró por ninguna parte.

-Buenos días Katherine

Se dió la vuelta y se encontró con Peeta sonriéndole.

Ella le devolvió la sonrisa, no una sonrisa normal, una siniestra.

Y en un abrir y cerrar de ojos, Kath se le echó encima dispuesta a...

Pensé que éste era mi fin. Iba a morir en manos de alguien que más quería en este mundo. Katherine... y nunca pensé que fuese ella la que me matase en los juegos. No podía imaginarme una cosa así... Kath era la viva imagen de Katniss... mi Katniss...

No quería luchar contra ella. Sería como luchar contra mi mismo. Y si yo ganaba, una parte de mí moriría con ella...

No quería que eso sucediese...

NUNCA...

(-PEETA)