Capítulo 6

396 9 13
                                    

La única cosa que realmente me asustaba era que alguien. Alguien a quien ama le sucediera algo malo. Y ver cómo caía Katherine al suelo inconsciente me asustó bastante. Pude que sería un desmayo de nada. Pero intuía que pasaba algo malo...

(-Peeta)

Katherinne. Tú..... Katherinne...... Tienes un deber..... tienes que cumplirla....

Katherinne... tienes que hacerlo.... tú eres nuestra única salvación..

TÚ NOS SALVARÁS.

-Kath, cariño-dijo una voz muy dulce. Enseguida la reconoció. Su madre se encontraba junto a ella. Y a lo lejos escuchó la voz de su padre.

-Estará bien, siempre a sido fuerte en esta familia, sólo a sido un simple desmayo...

Katherine intentó abrir los ojos, pero su intento de hacerlo volvió esa voz de antes.

No lo olvides.... Tú eres nuestra salvación. La única en este mundo...

Y al terminar de escucharla, abrió los ojos.

-Hija mia...-dijo aliviada su madre-¿estás bien?

-Sí, mamá. Estoy perfectamente bien – sonrió para tranquilizar a su madre.

Y acto seguido entró Lucy corriendo.

-¡Estás bien!- y se tiró encima de Kath.

-Acaba de despertase Lucy, no le hagas...

Pero su hija la interrumpió.

-Anda mamá, Mi hermanita mayor es Katniss Everdeen. Es fuerte. Estas cosas es poca cosa par ella- sonríe Lucy.

Y todos ríen menos katherinne. Que está seria de repente.

Pero nadie se da cuenta de eso, y los padres salen del cuarto más aliviados al ver que su hija está bien.

-Te has desmayado y te has perdido lo mejor de lo mejor. ¡VAS A TENER UNA CITA CON JOS HUTCHERSON!

Pero Katherinne reacciona sonriendo. Y nada menos que una sonrisa forzada.

Y su hermana pequeña lo nota. Esta nunca sería su reacción, piensa Lucy preocupada.

-Hermanita... ¿Realmente estás bien?

-Sí, Lucy. Anda déjame sola un poco...

Su hermana asiente desorientada. Esta nunca sería la reacción que tendría Katherinne al enterarse de esta noticia. Vuelve a pensar. Pasaba algo y quería averiguarlo enseguida.

Pasadas unos treinta minutos. Kath seguía en su habitación y esta vez observaba el cielo desde su ventana. Hasta que Peeta volvió a aprecer.

-Me alegro de que....

-Qué haces aquí- dijo con una voz tan... tan.... ¿Cómo explicarlo? ¿desagradable? Sí, era eso.

-Yo... Venía a..

-Vete de aquí-le respondió con un gruñido.

-Katherinne...

Pero ella se limitó a observarle, sin moverse, sin tener ninguna expresión de su cara. Y ni se notaba que respiraba.

Un escalofrío le recorrió por todo el cuerpo a Peeta. Esta no era Katherinne. ¿Qué le pasaba realmente? ¿Estaba enfadada con él? ¿Qué había echo para que Kath estuviera así?

-¡VETE DE AQUÍ!-Y con todas sus fuerzas cogió a su peluche preferido y se lo tiró a la ventana. Donde chocó al cristal y cayó a suelo.

-Pero Katherinne... ¿Qué te pasa?

-¿¡QUE QUÉ ME PASA!?-gritó, pero un segundo después se calló. La verdad es que no sabía lo que le pasaba en realidad. Sólo sentía un enfado hacia Peeta y nada más. Ninguna emoción más. Ni alegría, ni tristeza, ni compasión... No sentía nada más que enfado con una mezcla de odio.

Y un repentino dolor de cabeza hizo que Katherinne en un segundo cogiera un objeto de su mesilla y se lo tirara hacia Peeta. Hacia su ventana...

-¡¿Pero qué haces?!-consiguió gritar.

Pero el objeto destrozó la ventana haciéndolo añicos y desapareció.

Al igual que Peeta....

Sus Juegos. Mis reglas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora