Sentados en círculo
Entra en juego la sesión de poesía
Y la intención se desvía
A los que gritan versículos
Oh Dios amado
Tú que reinas por los sábados
Me proteges al cerrar los párpados
Cuando el día no es azulado
Oh Dios amado
Tú que reinas en la vida
Cierras cuanta herida
Eres dueño del futuro y del pasado
Oh Dios amado
Haz que baile este pandero
Qué bella me dejó el peluquero
Hoy levanté otro zapato
Oh Dios amado
No cumplo con tu palabra
Hay tanto perro que ladra
De seguro come en el mercado
Oh Dios amado
Todos me parecen imbéciles
Siguen tan dóciles
Perdóname he pecado.
Oh Dios amado
Tú que los vistes con harapos
Vístelos de seda y no con trapos
Para que estemos homologados
Oh Dios amado
Cuando esté la autoridad presente
Voy a ser inconsecuente
Pero primero los saludo
Oh Dios amado
Creo que necesita mi consejo
De cómo vestirse de conejo
Cuando uno es babuino y malvado.
Oh Dios amado
Perdóname de nuevo
Mejor hablemos luego
Qué vergüenza el de al lado.
Oh Dios amado
Siento que soy tan buena
Cuando ellos dan pena
Con los rotos he tratado
Oh Dios amado
Todavía me pregunto
Cuando mi estrato esté difunto
¿Me habrás abandonado?