Justin
Ese cabrón de Mark tarde o temprano me las pagará y que mejor manera que meterse con su pequeña e inocente hija y que no sabe la clase de padre que tiene.
-Justin que tienes en mente?- pregunta Ryan mirándome.
-Quiero hacer sufrir a la pequeña perra- dije fríamente mientras terminaba mi cigarro.- Pero no de la manera que piensas- hable rápido ya que Ryan había cambiado su expresión.
-Directo al grano bro- dijo con un tono desesperado.
-La dejaremos ir ya se me ocurrirá algo.
-Estas loco si piensas en matarla sabes que prácticamente estas en libertad condicional y su papa no es cualquier persona.
-Se hace lo que yo digo y ya, la llevare de vuelta a su casa- me levante de el sofá y camine hasta la habitación donde estaba ella.
Al abrir la puerta no encontré a nadie hasta que visualice un pequeño bulto en la cama y allí estaba ella durmiendo y estaba acurrucada ya que el clima estaba frío, sentí una pizca de lastima por ella no sabia la vida que le vendría gracias al imbécil de su padre.
Deje mis pensamientos a un lado me acerque a ella y la moví con brusquedad hasta que abrió los ojos y de un salto estaba pegada a la pared mirándome con ojos que reflejaban miedo.
-Te llevare a tu casa- la mire.
-En serio?- pregunto casi llorando.
-Si, vamos.
Cuando me voltee para salir de allí ella se acerco a mi y me abrazo, me sentí extraño bajo su tacto era una sensación buena me dio una leve electricidad y la aleje.
-Ya suéltame- la empuje un tanto brusco.
-Lo... Lo siento- bajo su mirada y se abrazo asi misma.
Salí de la habitación junto a ella y nos dirigimos hasta mi camioneta espere que ella entrara para poder arrancar y llevarla a su casa.
Me tomo unos minutos hasta que por fin llegamos frene a una cuadra de su casa y espere a que ella saliera.
-Gracias por traerme y sacarme de ese lugar- hablo tímida.
Asentí y luego ella bajo espere a que entrara y salí de allí.
Llegue a casa y me tumbe en el sillón saque la cajita de cigarros de mi pantalón encendí uno y aspire profundamente y luego lo solté, estaba extremadamente obstinado con todo este tema y el cigarro ayudo un poco a relajarme pero necesitaba algo mas, tome las llaves de mi moto y salí directo a un bar.
Anna
Entre a casa cuidadosamente mi papa no se podía enterar de lo que había sucedido en la madrugada cuando iba subiendo una voz me interrumpió.
-Se puede saber donde estabas tu y de paso vestida así?- mi papa estaba sentado en un sillón mirándome fijamente con cara de pocos amigos.
No sabia que decirle, que responder no podía decirle que en la madrugada me secuestraron armaría un escándalo por buscar quien me había secuestrado y menos que se habían metido a la casa.
-Respondeme Anna no tengo todo el tiempo del mundo y no quiero mentira.
-Bueno yo.. me quede durmiendo en la casa de Brianna y me trajo ahorita- solté nerviosa, definitivamente no soy buena mintiendo.
-Y por que tu auto esta aquí?
-Matt lo trajo.
-Vamos a creerte, bueno sube a arreglarte que tenemos visita dentro de una hora quiero presentarte a alguien- ordeno.
-Esta bien- subí las escaleras y entre a mi habitación, lo primero que pensé al entrar es en lo sucedido en la madrugada.
No entendía en realidad porque ellos me habían secuestrado, quizás era por el cargo de mi papa pero igual no mucha gente sabe de mi no me gusta involucrarme en el trabajo de mi papa tenia mucha curiosidad de el porque ellos habían llegado aquí y como supieron de mi dirección tenia que averiguarlo.
Camine hasta el baño para darme una ducha y relajarme luego de 20 minutos salí, me enrolle en una toalla al igual que mi cabello camine otra vez a mi habitación y me senté en la silla al frente del espejo y comencé a secar mi cabello y luego plancharlo un poco, fui hasta mi closet y busque un vestido vino suelto y con encaje en los brazos con unos tacones beige punta fina, me coloque base corrector de ojeras rimel bronzer (rubor), polvo delineador en los ojos negro y por ultimo labial rojo mate.
-Anna ya están aquí- hablo Betty del otro lado de la puerta.
-Ya voy- termine de peinar mi cabello y baje.
Al llegar a la planta baja visualizo a mi papa con tres personas dos de ellas eran hombres uno de ellos le calculaba como mi edad y la otra era una mujer muy linda de cabello rubio por lo que pude ver mientras me acercaba.
-Anna te presento a Bryan un gran amigo, su hijo Andrew y su esposa Andrea- los señalo sonriendo.
Asentí. -Encantada- estreche mi mano con nada uno.
-Bueno ya que se conocen nosotros nos quedaremos aquí ustedes se pueden ir al jardín- me miro mi padre.
-Vamos?- me extendió la mano Andrew muy sonriente, la tome y salimos al patio trasero.
Justin
-Vístete y te vas- hable frío.
-Pero Jus...- la interrumpí.
-Bizzle para ti, ahora fuera de aquí.
-Eres un imbécil- Karina se levanto furiosa recogió su ropa y salio de mi habitación y antes de salir me dio una mirada asesina y salio lanzando la puerta con brusquedad.
Si así era yo un cabrón sin corazón que solo las utilizo para tener un buen polvo y luego adiós, me levante lentamente hasta el baño tome un buen baño luego salí me vestí y baje a la cocina para encontrarme con Ryan.
-Que tal bro- saludo Ryan tomando de su cerveza.
-Has sabido algo sobre Mark y su hija?- encendí un cigarro.
-Soy yo o esa niña te esta empezando a interesar- pregunto Ryan sonriendo, que le pasaba a este idiota.
-Claro que me interesa, su papa Ryan tiene que paga por lo que hizo- apreté mi puño enojado.
-Y lo haremos paga Justin solo debes calmarte y hacer bien las cosas este tipo no es cualquier persona si hacemos algo mal tenemos pase directo a prisión con cadena perpetua incluida y lo sabes-dijo serio y directo.
-Tengo que salir- tome mi chaqueta y mis llaves.
-A donde vas?- pregunto Ryan.
-Visitare a alguien.
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Bizzle
Teen FictionChicago, conocida como Second City (la segunda ciudad) o Windy City (la ciudad del viento), es la tercera ciudad con mayor número de habitantes en Estados Unidos, detrás de Nueva York y Los Ángeles. También con el gánster mas joven y peligroso de Es...