La noche llegó, Jade estaba en su casa arreglándose para aquella "cita" con Axel, si es que se le podía llamar cita. Ya se había maquillado y peinado, pero iba en sudadera y ropa interior cuando sonó el timbre. Aun quedaba una media hora para las 10 p.m que era la hora acordada. Jade bajó las escaleras extrañada a abrir la puerta. Abrió la puerta, era Sam, le dejó pasar.
-¿Se puede saber que haces aquí Sam?
-¿Es que ya no puede venir a visitarte tu gran amigo?
-Esto no puede ir enserio, con todo lo que está pasando, aún vienes como si no pasara nada...- Jade no miraba a la cara a Sam, que por su parte estaba muy nervioso.
-¿Lo podemos hablar con un cigarro?
-Veras Sam, yo ya no fumo, no quiero perjudicar mas mi salud, así que ni fumo ni bebo mucho, y por supuesto lo siguiente vas a ser tú. De momento, sal de mi casa, que tengo muchas cosas que hacer...así que por favor.- Jade le indico la puerta con la mano y subió las escaleras.
-Pero Jade
-No Sam, nada de peros. Estoy cansada de que parezca que solo queráis herirme, de pensar que el mundo es más importante que yo y que en el fondo nadie me quiere, harta de sentirme toxica y que mejor no existir, harta de ser yo, porque ser yo puede ser horrible, así que al menos ahora, por muy malo que sea lo que pueda pasarme luego, me siento bien, después de mucho tiempo, así que dejarme ser feliz, si sois mis amigos intentaríais que lo fuera si eso es lo que quiero, dejar de hacerme sentir mal Sam. Valoradme, porque odio sentirme que no soy nadie, yo también necesito que me entiendan y me quieran, ahora que estoy bien. Sam...estoy cansada de tener que alejarme de la gente porque doy asco.
-No das asco Jade, y qué más da si nos haces daño, para eso somos amigos.
-Solo dadme tiempo para que se me pase. ¿Para que habías venido por cierto?
-Solo era porque mañana es mi cumpleaños, lo celebrare con mi familia y sus amigos snobs en la mansión de la playa, eso será un muermo, así que quería que vinierais todos, sería muy especial para mí.
-Me pasare un rato si eso.
-Te he traído un vestido, necesito que vayáis medianamente arreglados. Por favor Jade, prométeme que vendrás.
-Si tan importante es para ti iré, aunque eso no significa que no esté enfadada, eso tenlo claro.
-Lo sé Jade, lo sé...
-Ahora por favor Sam, vete, Axel está a punto de llegar.
-Está bien, adiós Jade.
Sam cerró la puerta muy suavemente, y Jade subió a su habitación a acabar de vestirse. Jade se puso un vestido muy elegante negro y corto, con unos tacones negros con un estampado de encaje.
Le llegó un mensaje, era de Mae.
Mae 9:40 p.m: Jade estas enfadada? Es que necesito hablar
Jade 9:40 p.m: Estoy enfadada, pero puedes contarme lo que pasa, somos amigas igual.
Mae 9:41 p.m: Gracias Jade y perdón. El caso es que he hablado con Sam y ha ido muy mal.
Jade 9:41 p.m: ¿Qué ha pasado?
Mae 9:41 p.m: Antes he quedado con Sam y se me ha declarado.
Jade 9:42 p.m: ¿y cuál es el problema? ¿A ti te gusta no?
Mae 9:42 p.m: Si, sí que me gusta, pero el otro día hablé con Lane y está muy colgada por él, y el lo sabe, juega con sus sentimientos, y no tengo claro que quiere. Así que como tampoco quería hacerle daño a Lane, le he rechazado, y no se lo ha tomado muy bien que digamos...
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Terapia
RomanceJade Cooper es una chica de 16 años, la cual va a terapia cada jueves por sus problemas de depresión y cráter, no siente a penas aprecio por nada.Un día aparecerá Axel Miles y su historia dará un giro de 180º en todos los sentidos.