Hija de la Noche.

Prólogo.

-No recuerdo la última vez que estuve aquí, pero sé que yo eh estado aquí antes - Dijo Stephanie pensativa- y sé que ya estuve aquí, no una, sino varias veces en mi vida.

-¿Estás segura?- Pregunto Bladimir, sin mirarla- este lugar no ha sido visitado por nadie en mucho, "mucho tiempo", además yo lo sabría, puesto que prácticamente vivo contigo desde que naciste.

-Blad, vives conmigo desde que nací, porque somos hermanos- Habló sin dejar de observar la residencia, puesto que no era muy alta debía levantar su cabeza para mirar.- Y solo nos llevamos dos años, pero a pesar de eso parecemos mellizos- Dijo sonriendo- pero estoy segura de que si he venido ocasionalmente aquí, a propósito, ¿Cómo conoces este lugar?- Pregunto aun con la mirada en el edificio.

-No lo se, es raro, Fan, porque siento como si lo conociera desde siempre, desde antes de nacer- Respondió mirando al igual que su hermana al edificio- ¿Y qué, vamos a entrar o a quedarnos y congelarnos afuera?- Pregunto divertido.

-Vamos- Dijo mirando esta vez a su hermano y sonriendo.

*Bladimir avanzo primero empujando con ambas manos la pesada, vieja y oxidada reja de entrada- él era alto y delgado, pero la adolescencia le había ayudado a desarrollar músculos y fuerza y eso hizo posible que abriera la reja- e hizo una señal a Fan, -como le decía a su hermana- para que entrara. Así lo hizo, seguida de él, y en un momento ya estaban dirigiéndose a la casa. Pasando por un camino de adoquines, que con la luz brillante de la luna se iluminaron como esmeraldas de color verdes y rojas. Stephanie se sorprendió de que no tuviesen problema alguno para mirar por el lugar, pero pensó que podría ser gracias a la luna. Llegaron a la puerta principal, pero antes se detuvieron frente a las escaleras, en las cuales Bladimir pudo observar, había escritas en cada una frases en un idioma diferente- "Latín"- pensó él y comenzó a leerlas, una vez que entendió, llamó a su hermana quien había quedado detrás de él observando el suelo del camino de entrada y un letrero junto al mismo.

-Fan, ven. Mira esto-

-¿Qué pasa?- Se acerco junto a su hermano.

-Ves esas frases escritas en los escalones- Dijo en un tono serio.

-Sí, ¿Por qué?- Dijo ella sin entender.

-¿Sabes lo que significan?- Dijo sin dejar de verlos.

-"Adhuc Stantes" "Aequam memento rebus in arduis servare mentem" "Alea iacta est" "Alere Flammam Veritatis" "Amicus Plato, sed plus magis amica est veritas" "Amor Omnia Vincit"- Ella leyó sin saber exactamente el significado- ¿Qué Significan?- Pregunto mirando a su hermano.

-Es Latín y cada una habla sobre la Guerra, el valor, el amor, la verdad. Por ejemplo, esa de ahí,- señalo el segundo escalón desde el suelo hacia arriba- significa "Recuerda mantener la mente serena en los momentos difíciles".- Aún manteniendo la vista en los escalones, pero con la voz hacia su hermana.-No se exactamente, pero creo que habla sobre nunca perder la cordura y mantenerse tranquilo.

-Pero, un momento, ¿Tú de donde sabes latín?- Pregunto Fan Sorprendida.

-No lo se, No lo se- Dijo aun mirando a los escalones.

-Bueno creo que no importa, mejor ven a ver esto- Haciendo una seña hacia atrás de ella.

-¿Que cosa?- Miró por encima del hombro de ella.

-Esto, ven- Tomo la mano de su hermano y se dirigió hacia el letrero en la entrada de la residencia.

-Bien, que es lo que quieres que vea, ya que me trajiste hasta aquí-

-Esto, mira- Lo soltó frente al letrero.

¿Un letrero?- Dijo sin sorpresa- es lo que querías que viera, un letrero viejo- Señalo al letrero.

-No solo el letrero, tonto, sino lo que dice-

-"Residencia Fray. Construida en 1509" Prohibido el paso. No entrar".- Leyó el en voz alta. Su hermana quien estaba detrás, sintió como al leer esas palabras un escalofrió le recorría el cuerpo.

-Bien, ¿Qué tiene?- Pregunto sin entender cual era el motivo que perturbaba a su hermana.

-Esta es una mansión muy antigua y por alguna razón tiene una advertencia de "No Pasar". Por favor, Bladimir dime que le haremos caso- Habló un tanto preocupada.

-Fan, eres una chica muy valiente a pesar de ser mi hermanita, a pesar de tener 17 años, nunca has tenido miedo, en muchas ocasiones incluso eres más valiente que yo. no me vas a decir ahora, que un tonto letrero te da miedo.- Tomo los hombros de su hermana entre sus manos y la miro a los hijos- tu, Stephanie Blackthornder, eres las más de la familia, incluso que papá y mamá, y te detienes por una advertencia; hemos cruzado situaciones mayores. - Dijo aun con las manos aun sobre los hombros de Fan.

-Bueno, creo que tienes razón, Blad, pero es que hay algo que entre las frases en los escalones y este letrero- no me convence y me pone nerviosa.-Dijo apartando la vista de Bladimir y mirando alrededor.

-Tranquila, no pasa nada- La abrazo cariñosa y calmadamente para tranquilizarla y le susurro al oído- Nada te ha detenido y nada lo hará, eres fuerte, valiente y confió en ti, eres mi hermana y recuerda que eres una Blackthornder y todo lo que te propones lo logras.- Se aparto dando un suave rose en su espalda, y un beso en su frente.

-Esta bien, creo que si- Su voz sonó aun un poco preocupada.

-Entonces que dices, ¿Entramos?- Pregunto con un tono de anhelo y un brillo en los ojos.

Fan vacilo un poco, pero al final asintió y ambos se adentraron.

-Genial, vamos.- Extendió la mano para tomar la de ella.