"Te amo incluso cuando Te odio" (Ross Lynch)

Capitulo 11: Sonrisas.

-Feliz cumpleaños...-Susurro en mi oído.

Inconscientemente sonreí y me di la vuelta.

Él me miraba con una sonrisa pícara y yo me lancé a sus brazos.

Me envolvió en un cálido y hermoso abrazo.

-Gracias!-Sonreí con la mayor felicidad.

Lucas me subió a su espalda y comenzó a contarme su día y lo que tenía planeado que hagamos.

-Se que no te gustan los parques de diversiones, tampoco el cine, ni el parque cuando hay mucha gente... Básicamente no te gusta nada, pero vamos a tomar cosas útiles, vamos a subirnos al auto de mamá y viajaremos sin rumbo alguno.-Me miro.-Se que eso te encanta.-Sonrió y yo lo imite.

-Lucas.-Lo mire y pensé en eso que tanto quería decirle.

-Si?-Dejó de caminar y me miro.

Me acobarde en ese instante.

-Yo...-Respire e intenté que las palabras salieran.-Yo.-Cerré los ojos y me castigue mentalmente porque nada salía.

-Respira.-Besó mi mejilla y ya no pude seguir diciendo nada.

-Luego te digo.-Afirme.

Caminamos hacia mi casa, cuando ya estábamos dentro tomamos todo lo necesario para pasar un día entero en un auto.

-Frutillas?-Pregunté en forma divertida sabiendo que lo vuelven loco.

-Como negarme.-Dijo con una sonrisa.

Él preparo todo lo que seria necesario y yo las cosas para divertirnos.

Luego de terminar de guardar la comida, lo llevamos hasta la parte trasera de su auto, lo acomodamos, cerramos la casa y empredemos un largo y hermoso viaje.

Saque uno de los tantos discos que había traído y lo puse.

-Quiero que este día sea como el vídeo de esta canción.-Dije dándole play a la canción.

Teenage Dream de Katy Perry.

-Sus deseos son órdenes, presiosa.

Ambos comenzamos a cantar y reírnos de lo que hacíamos.

Luego de cantar muchas canciones de Katy, mirar el maravilloso paisaje y sacar incontables fotos... Bajamos el volumen de la música y comenzamos a hablar.

-No quiero que sientas que te presionó, y mucho menos que te amargues en tu día, pero ya no estamos tanto tiempo a solas y realmente quiero saber sobre el tema.-Habló un tanto nervioso.

-Creo que también quería hablar de eso.-Susurre segura sin mirarlo.

-Le pediste tiempo a Ben.-Asentí.-¿Cómo seguirá todo esto?-Preguntó mirándome de reojo.

-Enserio no quiero romperle el corazón, que se sienta traicionado por un amigo, o que crea que soy una zorra.
Pero estas 2 semanas que estuve sola, aclare mis sentimientos y puedo decirte que realmente estoy enamorada de ti.-Dije mirandolo, su respiración se calmó.

Sonrió levemente sin mostrar los dientes y bajo la velocidad del auto.

Su mano busco a la mía y yo la tomé.

-Tu sabes que me gustas mucho... ¿Pero que tal sí esto no es lo correcto?-Acaricio mi mano.-Si arruinamos la hermosa amistad que tenemos? Somos jóvenes y estúpidos. No quiero que tomemos una decisión incorrecta.-Habló algo menos tranquilo.

Me quedé callada por unos segundos.

-No lo se...-Hable y fruncí los hombros.-Realmente no lo se, sólo quiero disfrutar el presente.-Sonreí por lo que dije y él también lo hizo.

-Luego veremos.-Beso mi mano.-¿Recuerdas que dentro de poco es el baile?-Dijo algo más serio.

-Yo enserio voy a tratar de...-Iba a decirle algo, pero él me interrumpió.

-Creo que deberías ir con Ben...-Yo quede algo confundida.-Es muy pronto para arruinar todo y que te odie durante la última semana de clases.-Suspiró.-Ve con él, cumplan esos 3 meses que llevan juntos y dile que ya no quieres seguir con esto, que es mejor que sean amigos porque ya no te sientes igual.-Habló seguro.

Es un buen plan.

Sólo que me sentiría muy culpable al besar a Lucas y enserio tengo ganas de hacerlo.

-Querida, deja de pensar en voz alta... Enserio es una mala costumbre la que tienes de niña.-Dijo riendo.

El auto frenó, y él bajo de el.

Lo mire confundida, abrió mi puerta, salí y mire el hermoso campo en el que estábamos.

Él se puso frente a mi, y miró mis labios. Me apoye en el auto, él tomó mi cintura y me beso de la mejor forma posible.

Comencé a jugar con su suave cabello y ambos reímos.

-Te quiero.-Susurro abriendo los ojos.

Le di un corto beso más y comenzamos a caminar hacia la nada en silencio.

Luego de unos pasos, largos y cortos besos, abrazos, risas y charlas sin sentido, volvimos al auto.

Eran las 7pm por lo que decidimos hacer una parada en la estación de servicio, seguir una hora más de viaje y dar la vuelta.

-¿Por qué alguien se cambiaría justo cuando estamos por terminar el año y graduarnos?-Pregunté con cierta confusión.

-Ella me dijo que tuvo muchos problemas este año y a sus tutores no les quedo otra opción que batallar porque la aceptarán en otro instituto.-Dijo con su vista hacia adelante.

-¿Cuando fue que hablaste con ella?-Pregunté cambiando de posición algo inquieta.

-El Miércoles de la semana pasada, ella estaba perdida y le tocaba conmigo así que la acompañe hasta el salón de biología y hablamos durante toda la clase.-Sonrió.-Es una buena chica.

-¿Cómo es ella?-Pregunté mirando como ya casi no quedaba rastro del sol.

-Tímida, apagada, indefensa, agradable, paciente, bonita...-Habló tranquilamente.

Lo mire.

La última palabra me hirió un poco.

-Es cierto, ojos marrones claros, pelirroja, con un buen físico, la tipica chica que las gafas le quedan bien.-Dije con cierto enojo.

Él se quedo en silencio.

Rodé los ojos y le di la espalda para mirar hacia afuera.

Luego de unos 15 minutos de estar así en silencio, comienzo a oír música que no provenía del estéreo del auto.

-¿También oyes eso?-Preguntó y yo asentí extrañada.

Mientras más íbamos para adelante más fuerte sonaba la música.

Ambos ponemos una sonrisa de oreja a oreja al ver un Festival de música en el medio de la nada.

Aparcó el auto en una zona donde había varios autos, y ambos bajamos.

Podemos escuchar música electrónica y ver mucha gente contenta bailando.

Ambos corremos hasta ahí y enseguida tomamos el ritmo de todo eso.

Luego de estar dos horas bailando, ya estaba algo cansada y decidí que seria mejor ir a casa.

Había gente que ya estaba volviendo a sus autos al igual que nosotros.

Antes de subir al auto lo abrazó y él me corresponde.

-Feliz cumpleaños a la chica más hermosa de todas...-Habló contento.

Tomé su cara entre mis manos y lo bese de una cálida forma.

Ambos volvimos al auto y disfrutamos el camino de regreso.

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