IV

293 18 6
                                    

Recomendación: Lean lo último del capitulo anterior para que le entiendan mejor

-Esa vez me asustaste mucho- dije riendo

-Creo que se noto un poco

Robin quien ya estaba manchado de guacamole en su oscico recargo su cabeza en mis piernas, acaricie su cabeza un poco y aquella chica hablo

-¿Como lo conseguiste?- pregunto viendo al canino

-Fue hace un año, caminaba por unos contenedores hasta que escuche un llanto, me acerque a la basura y ahí estaba el, dentro de un caja con una manta, sabía que no le daría la mejor vida pero prefería que estuviera conmigo a que se quedará ahí, sólo. El día que te vi por primera vez no lo llevaba conmigo, sólo vine para ver sí el parque ya estaba sólo, pero me equivoqué

-¿lo dejaste en el asilo?

-Sí, es correcto, siempre que estoy platicando con los viejitos me espera en los jardines

-Quizá deberíamos meternos en la casa de campaña, para ver que tan cálida está- la mire por un segundo, sus ojos eran lindos, muy lindos- tomare tú mochila para llevarla dentro

-Yo meto las cobijas y la comida- ella entró primero y una luz se encendió en la casa, cuando entre había una lámpara colgando de la casa de campaña y ella estaba sentada, está casita estaba amplia y acogedora, lágrimas empezaron a nublar mi visión y vi como su cara tenía algo de preocupación

-¿estas bi...-no la deje terminar, me abalance sobre ella, al principio note que se puso tensa pero en vez de retirarme la apreté más fuerte, ella se relajo y envolvió sus brazos en mi espalda. Robin entró a la casa y se sentó a un lado mío, yo seguía abrazando a la chica, lo hacia mientras las ganas de llorar se iban

-No sabes cuan agradecida estoy contigo- susurre aún pegada a su pecho

-Créeme que es mutuo

-¿tú también estas agradecida contigo?- dije levantándome un poco, reí por lo egocéntrico que sonó la pregunta

-Oh, no, yo estoy agradecida contigo- respondió ella con un tono de diversión por mi confusión

-Pero yo no eh hecho nada por ti

-Con conocerte es más que suficiente

Robin se acerco a la bolsa de papel tirada a un lado de nosotras y empezó a olfatearla

-Casi lo olvido, traje un poco de tiramisu

-Con las hamburguesas era más que suficiente

-Comida no es comida sin postre

-Yo y Robin lo aceptaremos sí comes con nosotros

-Pero acab...

-Robin y yo no aceptamos excusas

-Bueno, creo que no me queda de otra.

Comimos aquel postre entre platicas de como había sido su día, había perdido la noción del tiempo.

-Creo que es hora de irme

-¿ya es muy tarde?

-11:46 para ser exacta- dijo después de mirar la hora en su celular

-Creo que sí ya es algo tarde

-¿nos vemos mañana?- dijo saliendo de la casita, yo la imite

-Claro

-¿a la misma hora?

-¿A que hora sales de tú trabajo?

-5 de la tarde

Mi nombre es LaurenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora