La Concha de Oro

Capítulo 8

Laura se despertó de un sobresalto, que sueño más extraño ese, ¿sueños reales, inventados, que significaban?.
Miró el reloj aún era pronto las once de la noche, bajaría a cenar, seguro que le podían hacer cualquier cosa.
No tenia ganas de quedarse en la habitación, empezaría a pegar vueltas al sueño y no quería darle mayor importancia.
Salió de la habitación, en el piso de arriba se oían muchas voces, como si hubiese una fiesta en una de las habitaciones. "Que raro", pensó Laura no se había comentado nada en el hotel, ni había ningún cartel que así lo indicase.
Decidió subir al piso de arriba, subió por las escaleras, total era un piso, cuando llego no vio a nadie en el pasillo, pero seguía oyendo las voces, conforme avanzaba por el pasillo se oían más cerca, llegó a la habitación 212, se oían muchas voces de hombres.
Laura pensó " menuda fiesta tienen montada los huéspedes de esta habitacion". Así no iban a poder conciliar el sueño los de esa planta. Pensó en tocar a la puerta, pero recordó los comentarios de las empleadas (camareras de las habitaciones) y no lo hizo.
Preguntaría en recepción o le preguntaría a Daniel si lo veía, si había oído hablar algo. De camino a la escalera, subía Daniel de camino a su habitación, al ver a Laura le preguntó, ¿Que haces tú por aquí?, ¿me buscabas?", con una sonrisa pícara. Ella le respondió, " ¿no oyes el griterío?", " Si lo oigo, ya les llame la atención en algún que otro momento, incluso me he quejado en recepción.
La respuesta fue no podemos hacer nada, le cambiaremos de habitación"
"¿Que no pueden hacer nada y hablar con los huéspedes?".Contestó Laura.
Laura bajo aprovechando que iba s tomar algo para cenar, paso por recepción y se quejó de la habitación 212.
Le contestaron con las mismas respuestas que a Daniel.
Daniel se reía porque por muy enfada y cabezona que pareciese no iba a sacar nada claro, deberían preguntar al personal si querían averiguar algo más.
Fueron a la cafetería, Laura pidió un sándwich, la cocina estaba cerrada, pero se lo hicieron. También preguntaron allí, pero no sacaban nada en claro.
Mañana preguntarían a las camareras de habitación, aquellas q cuchicheaban en el ascensor.