Capítulo VII

282 24 4
                                    

¿Y sí todo se vuelve peor?...

(Narra Lorena)

Ahora que lo pienso más en frio... No sé si ha sido buena idea venir hasta aquí.

No me acordaba de lo fuerte que podía ser esa extraña conexión entre nosotros, sus ojos posados sobre los míos...

-¿Lorena?- Dijo incrédulo. ¡Vaya! la primera vez que le veo expresar una emoción.

-Sí, bueno soy yo.-Dije, parezco tonta me reproché mentalmente.

-¿Qué haces aquí?-Dijo y rápidamente añadió.-No es que no me agrade tu visita pero, no me la esperaba.-

-Bueno, encontré esto en mi chaqueta y pensé que se habría confundido o algo así.-Dije.

Grandiosa excusa Lorena, muy convincente me dijo mi subconsciente sarcásticamente.

Me acerqué para entregarle la nota, y al dársela nuestras manos se rozaron haciendo que todos mis sentidos se activaran. Levanté mi cabeza y vi que el también lo había notado, simplemente por la expresión de su cara.

Observó la nota y tardo unos minutos en responder.

(Narra Samuel)

Te has metido tu solito en esto, asi que arréglalo. Me dije a mí mismo. Pero qué podía decir, ¿qué quería que me llamara y quedáramos?

-Eee...Bueno... Pensé que... Como era un artículo para la Universidad, a lo mejor necesitaba alguna foto mía.-

Puff... Por los pelos. Supe que mi mentirijilla había colado ya que su expresión, para mi sorpresa, fue de decepción.

-Oh, claro, no pensé en eso lo siento... Lo siento mucho por presentarme aquí... En mitad de la noche, lo siento de verdad.-Dijo completamente roja y mirando hacia el suelo. Simplemente me parecía adorable.

-No tiene que disculparse de nada, fue error mío debí de habérselo dicho.-

En ese instante se hizo un silencio bastante incómodo que por suerte nuestra, lo rompió un sonido de móvil.

-Perdón-Dijo Lorena llevándose el aparato a la oreja.- ¿Qué?... Moni...

La observé como movía los labios al hablar, su pelo caer por sus hombros, su rostro sonrojado... Simplemente creí estar en el paraíso con solo verla.

(Narra Lorena)

Estúpida, estúpida y estúpida. No tengo otro nombre. ¿Cómo no se me había ocurrido esa idea? Y ahora encima me llama Mónica.

-¿Qué?-Respondo irritada.

-¿Cómo que qué? ¿Dónde estás? Cuando he llegado a casa tu portátil estaba encendido y había fotos de Samuel de Luque.

-¿Has cotilleado mi portátil?- Alcé la voz unos decibelios y recordé que enfrente de mí estaba el señor De Luque asi que bajé el tono.- ¿Quién te da derecho a mirar mi portátil?

-¡Ay chica! ¡Ni que tuvieras porno o algo sadomasoquista!- Dijo mientras se ría.

-Ja Ja me mondo, ahora me puedes decir qué quieres, estoy en una situación delicada.

-¿Cómo que situación... Dónde coño estás?

-Ya te lo contaré cuando vuelva. Tengo que colgar...

-¡No espera! Cuando te fuiste a resolver la misión ultra secreta del gobierno...-Dijo y mientras yo puse los ojos en blanco por sus paranoias.-Tu madre volvió a llamar. Oye chica que siempre que llama no estás.

-Bueno y qué te ha dicho. Ya sé que no va a venir a mi graduación.

-No es eso, es sobre tu hermana Amparo.-Dijo cambiando el tono de voz.-Ha tenido un accidente de moto con su novio. Lo siento.

En ese momento fue como si el mundo se paralizara, el móvil se cayó de mi mano y mis ojos estaban fijos en un punto en la profundidad del cristal del salón con las lágrimas surgiendo y derramándose por mis mejillas.

Las rodillas me fallaron y me desplomé en el suelo olvidándome de donde estaba y con quien estaba.

(Narra Samuel)

-¿Has cotilleado mi portátil?- Dijo cabreada y después dándose cuenta de que estaba, cambió el tono de voz.

La verdad, no pensé que tuviera la valentía de presentarse en mi casa porque la dejé mi teléfono. Mi plan era que lo viera y por alguna extraña razón del universo que me llamara. Pero está claro que las locuras son mi fuerte.

Tan abstracto estaba en mis pensamientos que cuando alcé la cabeza para ver a Lorena, vi que estaba de rodillas en el suelo, con las lágrimas saliendo sin control de sus ojos y con la mirada perdida en algún punto del salón

No sé de donde salió el impulso pero me arrodille ante ella para quedar a su altura.

-¿Lorena que ocurre?- Dije verdaderamente preocupado.

Poco a poco fue alzando su mirada hacia mí y pude ver sus ojos rojos y llorosos más de cerca.

-Mi... Mi hermana ha... Ha tenido un accidente de moto con su novio y... Y ya la pasó hace unos años y... Y los médicos dijeron que si volvía a tener otro accidente como ese podría no sobrevivir...- Dijo todo esto entre sollozos y convulsiones debidas al llanto.

No sabía que decir, ni que hacer pero antes de que me diera cuenta Lorena me estaba rodeando el cuello con los brazos apoyando su cabeza en mi hombro. Me estaba abrazando y lo que me pareció aún más raro... Yo la correspondí ese abrazo...

Matarme, sí, por fin capítulo pero el tiempo me faltaba y la falta de inspiración pero ya estoy de vuelta!!

Quiero daros las gracias por las más de mil lecturas, es increíble muchísimas gracias y por ello subiré algo especial.

También informaros de que tengo una novela de Cazadores de Sombras (por si ahí algún nephilim por aquí)

Y eso es todo muchas gracias por estar aquí conmigo y un besazo <3

Felices lecturas!




50 Sombras de LuqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora