Un Gran JakeMate

Esos celos que... Parte 1

En la Mansión Phantomhive se encontraba Ciel en su despacho arreglado el papeleo de un caso que había terminado recientemente, para su mala suerte debía reunirse con Alois Trancy quien por ordenes de su majestad había sido encomendado a trabajar junto al Joven Conde en el caso, verdaderamente para Ciel había sido un fastidio, no solo por su forma de ser, sino también porque durante todo el caso lo único que hacia era pasársela hablando de una chica que había conocido y no dejaba de jugar con un broche que siempre llevaba en el lado derecho de su saco.

Sebastian: (Entrando) Bocchan, el Conde Trancy ha llegado.

Ciel: Tsh, porque tengo que soportar a ese idiota.

Sebastian: Por que son ordenes de su majestadad, o (hace una pequeña pausa) acaso desobedecerá a la reina.

Ciel: Tsh (Se levanta de su silla y camina hacia la puerta) Vamos Sebastian

Sebastian sale atrás de su señorito quien seguía teniendo una cara de descontento, bajaron las escaleras para encontrarse con Alois y Claude, quienes tenían una sonrisa de oreja a oreja, su felicidad dañaba los globos oculares de cualquiera que los viera.

Alois: Cieeeel, (bailando) no crees que la vida esta llena de...

Ciel: (Interrumpiendo a Alois y con un tono molesto) Podrían dejar de perder el tiempo, aun tenemos trabajo que hacer.

Alois: (Haciendo puchero) Oh, pero no estaría mal divertirnos un poco, no crees que hemos trabajado excelentemente bien, un poco de descanso no daña a nadie.

Ciel: La reina a pedido el informe, así que hay que terminarlo para enviarlo lo más pronto posible, después podrás irte y descansar todo lo que quieras.

Alois: Siempre de aguafiestas, buen vamos a trabajar.

Ciel y Alois se fueron a trabajar al despacho, aunque Ciel se sentía un poco incomodo, nunca había escuchado a Alois decir la palabra aguafiestas hasta ahora solo las hermanas habían utilizado esa palabra, pero decidió ignorarlo y seguir trabajando.

El trabajo estaba a punto de ser terminado, pero la seriedad y ganas de trabajar de Alois se fueron, para continuar jugando con el broche que llevaba en su saco.

Ciel: (Molesto y alzando la voz) QUIERES DEJAR DE JUGA CON ESE BROCHE

Alois: Vamos Ciel calmate, solo es que no puedo dejar de verlo porque me recuerda a la linda de..

Ciel: Que tiene que ver ese broche con una chica

Alois: Oh, Conde se ve que no pone nada de atención, ya le había dicho que es un regalo de cumpleaños y que me lo dio la chica más linda. (enseña su broche a Ciel) No crees que es hermoso.

Ciel: Claro que no, a quien se le ocurre regalar un broche tan espantoso y simple, es demasiado...

Alois: GUARDA SILENCIO, ESTE ES UN BROCHE MUY LINDO POR QUE FUE UN REGALO DE ELLA, Y ES MAS ESPECIAL PORQUE LAS SAKURAS SON SUS FLORES FAVORITAS. (Volteando para quedar a espaldas de Ciel) Además si Kuro estuviera aquí si hubiera molestado por ese comentario y...

Al escuchas esas ultimas palabras Ciel quedo en choque, sería a caso que hablara de Kuro su Kuro Black, y si fuera así como se había encontrado con ella, acaso no se suponía que los únicos que las podían traer eran aquellos Shinigamis y lo más importante como es que ella le dio un regalo de cumpleaños.

Ciel: La chica de la que hablas se llama Kuro (Tratando de mostrar indiferencia)

Alois: (Volteando y mostrando una) Si, su nombre es Kuro Black, ella y su hermana Howaito White estuvieron en mi mansión celebrando mi cumpleaños, realmente la dos son divertidas. (haciendo pose de pensativo) Ahora que recuerdo creo que habían mencionado algo sobre conocerte, pero claro como eres un aguafiestas prefirieron quedarse conmigo.