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Harry deposita en la mesa un vaso lleno de agua delante de mis ojos y lo miro fijamente. 

-Es agua, no planeo matarte.

Lo miro y bebo. Mi cabeza no deja de palpitar y mis ojos arden.
-¿Tienes algo para el dolor de cabeza?

Va de nuevo a la cocina y vuelve con unas pastillas, seguramente para mi cabeza.

-Toma esto.-me entrega una y la trago sin pensar.

Subimos a su habitación con cuidado de no despertar a su madre.

Una vez en su cuarto, cierra la puerta y se sienta en la cama al lado mio.

-¿Tu hermana no esta?

-No, seguro esta con su estúpido noviecito.

-¿Estúpido eh?

-Si, es un estúpido.

Decido no tocar mas el tema, por si acaso. Paso mi vista por su habitación y me detengo viendo sus fotos en el escritorio. Él lo nota y suspira, entonces me dedico a mirar otra cosa.

-Puedes quedarte si quieres.

-No no, tengo que ir con Maggie.-me paro y un mareo repentino hace que me siente una vez mas.

-No puedes ni pararte, quédate.

Las náuseas se hacen presente en mi garganta nuevamente y corro hacia el baño. Una vez alli, lanzo todo y me quedo sentada en el piso.

La frustración viene en forma de llanto, por lo que escondo mi cara en medio de mis manos y lloro todo lo necesario para liberar este sentimiento de mi cuerpo.

Siento como Harry se sienta a mi lado mientras acaricia mi espalda.  Me acerco a él y lo abrazo, necesito sentir un poco de compasión.

-Soy un desastre.-digo sacándome la cara.

-No. No lo eres.

-Si lo soy. Dejé a mis amigas solas en ese lugar horrible. Nunca mas volveré. Que decepción sentiría mi madre.

-Shh.-dice mientras pasa sus brazos al rededor de mi cintura para abrazarme.

*****
Me despierto en una cama ajena a la mia y tardo unos minutos en comprender donde estoy.

Veo a Harry sentado durmiendo en el piso, que idiota fue por no querer dormir en su cama conmigo. Mejor ni recordar las veces que le había insistido anoche.

Me paro para ir al baño donde hago todas mis necesidades. Cuando salgo observo detenidamente el rostro tranquilo de Harry.

Su seño esta ligeramente fruncido y su boca en un fina raya. Las largas pestañas le acarician las mejillas. Pestañas de hombres, pienso. Esta sentado con sus piernas estiradas y sus brazos cruzados. Vaya forma de dormir.

Harry es todo un dilema. Por momentos es lo único que quiero tener cerca, pero hay momentos en donde hace sacar la peor parte de mi. Se que no hemos tenido demasiadas peleas, pero me saca de mis casilla el Harry testarudo y orgulloso.

Al principio fue alguien que prefería tener lo mas lejos posible. Pero cuando lo conocí mas profundamente, descubrí que en realidad es una persona maravillosa, con sus cosas buenas y con sus cosas malas. Con sus defectos y sus virtudes. Como cada cosa buena que tiene algo malo, y cada cosa mala que tiene algo bueno.

No puedo creer como una persona de despampanantes ojos esmeraldas y rulos chocolates pueda causar todas estas dudas en tan poco tiempo.

Lo sigo mirando mientras recuerdo nuestra conversación a altas horas de la madrugada.

-¿Cuándo tendremos una cita oficial?

-Te pegó el alcohol.

-Hablo en serio Harry.

-¿Quieres tener una cita?

-Si, siempre salimos pero nunca es planeado. Quiero arreglarme y hacer esas cosas que hacen las chicas antes de la primera cita.

-Y...¿Dónde te gustaría ir? No al McDonald's.

-No al McDonald's. -repito riendo-Podríamos ir a cenar y luego a algún lugar divertido.

-¿Que te parece una cena y luego pista de patinaje?

-No, definitivamente soy pésima para eso.

-Entonces asi será. Yo te enseñaré, soy un experto.

-Si claro, como digas.

-En serio.

-Entonces...¿Quedamos?

-Trato hecho. 

Visualizo un anotador junto a una lapicera en su escritorio y una idea aparece en mi mente. 

"Diciembre, 13"  Escribo apurada y luego le agrego unos corazones en la parte inferior de la hoja junto a la inicial de mi nombre. 

Antes de salir de la habitación compruebo que no me este olvidando de nada y me extraña no encontrar a nadie en la sala. Miro el moderno reloj que colgaba en la pared, 8.17. Si que no habia dormido nada,pero afortunadamente no me sentía tan mal.  

*****

Luego de llamar unas diez veces a la puerta, se abrio mostrando una destrozada Maggie. 

-¡Apareciste al fin! ¡Pensamos que te habian raptado.

-Estoy bien,estoy bien...

-Le dije a Maggie que no entre en pánico,era obvio que Harry te habia llevado a casa despues de tus incontables tragos. ¿Qué diablo te pasó?-Aparecio Gadea.

-Solo necesitaba un poco de alcohol.-me enconji de hombros.-Tengo mucho que contarles. 

Subimos al tercer piso donde se encontraba el cuarto de Maggie y cada una busco un lugar cómodo mientras me escuchaban hablar. Les conté todo el asunto de Harry sin muchos detalles. Opinaban,hacían caras y hasta aplaudían y gritaban a medida que las palabras salían de mi boca. 

-¡Se morirá cuando vea tu nota!

-¡Eres una genia Claire! Los chicos aman cuando las chicas dan el primer paso. 

-Ayer estaba media ebria,no me arrepiento igualmente. 

-¿Arrepentirte? ¡Por dios! Tendrás una cita con tu enamorado.

-¡Que no estoy enamorada Gadea! Deja de decirlo.

-Como digas campeona...-Acota Maggie y se rieron,obviamente,sin mi. 

-¿Tienes que ponerte? 

-Definitivamente no se que usar. Necesito su ayuda.

-Amiga,tengo un vestido rojo... Se infartará...

-Luego de cenar iremos a una pista de patinaje, no creo que me convenga usar vestido.

.Tienes razón. Aparte creo saber del vestido que habla Gadea y estoy segura que no te pondrías eso ni aunque te pagaran. 

-Calla Maggie,ese vestido es una locura.

-Vestido no.

-Entonces buscaremos otro atuendo ideal. 

-Podría ser una calza y un lindo top...-Propone Gadea.

-Creo que me gusta esa idea. 

-Estarás diosisima Claire. Harry va estar muy celoso esa noche. 

Y esta vez no pude impedir reirme con ellas. 

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⏰ Última actualización: Jan 06, 2016 ⏰

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Diciembre | Harry StylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora