Enamorada De Un Chico Malo<3

Capitulo 5

Narra Fernanda:

Vimos que el horario decía que entrabamos a tres lecciones de ciencias... Ohh no... Llegamos a la hora justa, el profesor cerró fuertemente la puerta a nuestras espaldas. Ambos nos sobresaltamos y nos miramos. El profesor nos dice que tomemos asiento. Él se sienta en el típico lugar de la izquierda, y yo en la derecha. El profesor aplaude para llamar nuestra atención.

-Les vengo a comentar que a partir de éste momento los colocaré en campos fijos, no hay discusión.

Y lo siguiente era algo de esperarse. Adrián fue colocado en la esquina inferior izquierda de la clase, y a mí me colocó en la esquina superior derecha. Totalmente lejos entre nosotros, me mira y pone los ojos en blanco.

La materia normalmente conocida es ciencias, pero realmente es Física Matemática. Vemos las notaciones científicas, algo muy sencillo que desde el séptimo grado lo hemos visto. Aunque el tema de los vectores es realmente terrible.

-¿Necesitas ayuda?

Me volteé rápidamente, aunque reconocí su voz. Adrián.

-Sinceramente sí –Respondo haciendo pucheros.

Él ríe y se queda mirando mis labios. Al paso de cinco segundos siento que es muy incómodo. Él me pregunta en qué necesito ayuda sobre los ejercicios.

-No entiendo el ejercicio cinco ni el tres –Los señalo.

-Yo sí los entiendo, mira cuando están en el cuadrante II... -Fue interrumpido por el profesor.

- Disculpe, Adrián... Haga el favor de no molestar a su compañera.

-¿Cómo sabe usted que la distraigo? –Replicó Adrián-. Le estoy ayudando a entender la materia que por lo visto no enseñó bien.

- ¿Explicando? –El profesor rió- Es una broma.

Las manos de Adrián se tensaron, por un momento pensé que iría junto a él y le daría un puñetazo en la cara, pero preferí hablar antes de que hiciera algún movimiento.

-Si usted no lo cree posible, lo lamento, pero le informo que él si me estaba ayudando a entender.

El profesor me dedicó una mirada asesina, pero no le tuve miedo. Él se había equivocado y nosotros teníamos la razón.

-En ese caso, usted debe de presentar sus dudas hacia mi persona, no con su compañero.

-Lo tomaré en cuenta, gracias –Respondí Fría.

Adrián me miró y guiñó un ojo. Se fue a su asiento y siguió trabajando, yo hice lo mismo pero sentí la gran mirada del profesor. Él me había advertido pero no le haré caso... Entre más grande sea el túnel, más son las ganas de conocer el final.

Al terminar la clase salí con Melany y Melissa al receso, eran pocos minutos que pasaban volando. Pero aun así tratábamos de disfrutar lo poco que nos dan. Hoy no fuimos a la cafetería, debíamos ahorrar el dinero para el almuerzo. Sentí mi teléfono sonar, pero no era un número registrado.

-¿Hola? –Pregunté.

-Soy Adrián, ¿Dónde estás?

- Estoy en la soda, ¿Por qué?

-Quédate ahí, en cinco minutos llegaré.

Esperé los cinco minutos hasta que lo vi acercarse, junto a él venía un chico... Cuya cara me parece demasiado familiar. Ambos venían conversando animadamente.

-Hola –Le dije mientras sonreía un poco.

-Hola –Me sonrió de igual manera.

-Bueno, dime en qué puedo ayudarte.

-No pienses que se trata de nada malo, sólo quería decirte que fue muy valiente la manera de enfrentarte al profesor.

-No fue sencillo –Dije-, pensé que me iba a expulsar por eso.

-No lo hará, ambos sabemos que sólo quería fastidiarme, contigo no lo haría.

- Eso espero, Adrián.

Adrián sonrió. Se volteó un poco y llamó a su amigo.

-Te quiero presentar a mi amigo Tony, Tony ella es Fernanda.

-Un placer –Sonreí nerviosa.

-Adiós, Fernanda, nos tenemos que ir. Te veré luego –Guiñó un ojo.

Los vi alejarse y regresé con mis amigas, pero lo peor de ese momento fue reconocer los ojos de su amigo Tony... Son los mismos del asaltante que ayer ordenó que me dejaran en paz. Puedo jurar que si fue él. Me pregunto si Adrián lo sabría, ¿Le había hablado de mí?

Fuimos a lecciones de español, pero Adrián no llegó. Si fue verdad cuando dijo que se tenía que ir. La clase fue aburrida, ya que sólo nos presentamos. Ella es una profesora nueva así que tiene que conocernos de nuevo.

Al terminar las tres lecciones nos fuimos al almuerzo, tomamos el picadillo de papa con queso, arroz y frijoles.

Nos sentamos en una mesa circular vacía. Jake estaba contando sobre una chica nueva, es rubia y de ojos marrones claro. Jake es bien parecido y las chicas se fijan mucho en él, aunque él nunca lo nota.

-Escucha Fernanda –Me habló Melany-. Tu eres mi amiga y siempre he querido lo mejor para ti, por eso tengo que decirte que Adrián no es alguien para ti, ni siquiera como amigo. Él te meterá en problemas, no es ni bueno como persona...

No pude contenerme, la tenía que interrumpir.

-Mira, Melany... Sé que me quieres y eres mi amiga, pero eso es mi problema, lo he conocido y pude notar que todos lo hacen ver como si fuera peor que el diablo, pero no es así.

- Si tú lo dices...

En ese momento sonó la campana.