II temp. Capítulo 16

1.6K 29 3
                                    

Conforme enciendo el auto, todo en mí da vueltas. Agradezco que sea el último día de clases para niños. Lo que no quiero imaginar es la cara de Daniel, él me quiere mucho y la verdad yo a él también.

Mi madre no estaba de acuerdo con que manejara en mi estado, pero se me hizo tarde y era la única opción.

Al llegar me encuentro con Adrián, él se estaba montando rápido en su bicicleta. Me mira y suspira, pero se baja de ella y camina hacia mí.

Antes de que él llegue salgo de mi auto e ingreso al área de piscinas. Pero noto como una mano me toma y me jala con fuerza.

Yo: ¡maldito Adrián, suéltame!

Pero cuando me doy vuelta me encuentro con Raúl, él me mira extrañado.

Raúl: ¿Adrián? ¿Un nuevo novio?

Yo: No es tu problema, ¿Qué quieres?

Sólo sonríe maliciosamente, me lleva del brazo hacia un auto, le grito que me suelte pero no me hace caso.

Cuando estoy casi en la puerta algo golpea la cabeza de Raúl, es Adrián.

Adrián: ¡Suéltala imbécil de miérda!

Y así fué como empezaron a pelear, Adrián le pagaba bastante duro en la cabeza. Raúl sólo lo esquivaba. Adrián seguía pegándole mientras Raúl intentaba escapar. Adrián le gritaba cosas como: ¡Nunca te metas con ella gran idiota! ¡¿Aprendiste bien?!

Raúl le dio una patada en la cara de Adrián, y eso fué suficiente para poder subirse al auto y salir huyendo como un verdadero cobarde...

Adrián: ¿Estás bien?

Yo: Creo que sí... ¿Tú?

Él levantó la cabeza, no esperaba que le fuera a preguntar por su estado físico.

Adrián: Creo... Creo que bien. Sólo me golpeo un momento.

Pero cuando levantó su rostro noté que tenía sangre en la nariz y en su boca. La escupió pero aún así tenía bastante.

Yo: Vamos dentro, ahí te ayudarán a recuperarte.

Adrián: ¿Y quién me ayudará a recuperarte a tí?

Esa es una de las 1000 razones para odiarlo, sabe como hacerme sonrojar con una simple pregunta.

Trato de no mirarlo a los ojos mientras llegamos a la entrada. Todos están esperándome, pero cuando Daniel ve a su hermano sangrando se vino de inmediato junto a mí.

Daniel: ¿Que le pasó a mi hermano?

Miré a Adrián en busca de que manera decirle como sucedió, pero ninguno de los dos le contestamos. Yo lo conduzco a la parte donde está el botiquín de emergencias.

Lo hago sentarse en una silla mientras busco un trapo y algo de hielo. Me acerco y empiezo a limpiar su rostro. Parece ponerse muy tenso a mi toque, pero a la vez noto como disfruta el momento.

Adrián: Si para tí es una molestia, si quieres lo hago yo.

Yo: Tranquilo, me defendiste... Es lo menos que puedo hacer.

Adrián: No sabes cuánto anhelaba esa respuesta.

Ambos sonreímos... Fué como volver hace un año atrás, como si todo fuera lo mismo y no hubiera sucedido absolutamente nada.

Cuando termino de retirar su sangre del rostro y no hay más rastro de más, me aparto y vuelvo a mi silla a relajarme.

Adrián: ¿Puedo saber algo?

Yo: ¿Qué?

Adrián: ¿Quién era ese imbécil?

Yo: Ex novio... NO quiero hablar de él.

Adrián: ¿Aún te quiere?

Yo: Lo que quiere es venganza, fin de las preguntas.

Adrián: Bueno.

Asiente con la cabeza tratando de buscar una explicación, pero no creo que la encuentre.

Adrián: ¿Y és muy peligroso? 

Yo: No lo creo, yo puedo con él.

Adrián: -me mira sarcásticamente- ¿Qué hubiera sucedido si yo no estuviera ahí?

Yo: Le hubiera pegado y salir corriendo.

Adrián: Creo que un gracias es más que suficiente.

Me sentí mal por no darle las gracias, es verdad, él me salvó... Si no fuera por él no estaría ni siquiera en condición de pensar.

Yo: De verdad, te lo agradezco -Dije sonriéndole-

Adrián: Por más lejos que me quieras, siempre estaré ahí para tí.

Estaba a punto de contestarle, cuando apareció Roberto.

Roberto: ¿Vas a dar la clase de hoy?

Yo: No...

Roberto: Bueno, puedes venir mañana a eso de las 11:30a.m. para tu dinero.

Dicho esto salió a dar la noticia.

Cuando Adrián y yo salimos, Daniel llegó corriendo, le explicamos que no daré la clase. Se puso triste pero feliz de que me podía despedir. Al salir de ahí Adrián no quería que llegara sola a mi casa. Pero le aclaré que eso no haría que lo quisiera cerca.

Adrián: ¡No vas a regresar sola a tu casa! Tu madre seguramente piensa que aún debes de estar dando la clase.

Yo: ¿Y qué pretendes? ¿Que me valla a tu casa? -Dije sarcástica.

Adrián: ¡Sí! Y luego yo te acompaño hasta la tuya... No lo pienses por mí... Sino por Daniel.

Miré a Daniel que ya estaba colocando su casco para irse en la motocicleta.

Yo: Esta bien... Pero sólo por Daniel, no quiero que mal interpretes las cosas.

Adrián: Esta bien -Dijo sonriendo muy ampliamente.

Adrián se montó en la moto con Daniel, ellos salieron primero y yo en el auto los seguí después. Trataba de no perderlos de vista, ya que la moto pasa junto a los carros.

Cuando llegamos sentí un aire horrible... Recordar esa llamada que tuvo hace un año aproximadamente.

Enamorada De Un Chico Malo<3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora