Capítulo 18

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~Casamentera~

Los observaba a lo lejos, ambos hablando; ¿De que podrían hablar Rochelle y Ethan?

Al fin ella se despidió y con aire despreocupado camino hacia mi

—Buenos días Pelirroja —me sonrió

¿A caso podía ser más sínica?

—¿Qué te pasa? —frunció el ceño

—¿Porque hablabas con Ethan?

—¿Celosa? —preguntó divertida

Cruce mis brazos sobre mi pecho

—Okay vale vale, tranquila. Él estaba preguntándome algunas cosas

—Rochelle...

—Vale, me estaba preguntando sobre ti

Sentí dar a mi corazón un vuelco 

—¿Por mí?

Tomo mi brazo y comenzamos a caminar juntas

—Han pasado 3 meses Savannah, y cada semana pregunta por ti. Aun te quiere

Y yo a él... pensé

—¿Cuándo vas a afrontarlo linda?

—¿De qué hablas?

—Tú, yo y el mundo sabe que aún lo quieres, no demores lo inevitable

—No se dé que hablas —negué con la cabeza— estoy perfectamente

—¿Mal?

Sonreí débilmente

—Te conozco y se cuanto lo extrañas, pero también sé que mientras tu no quieras aceptarlo, será una pérdida de tiempo tratar de hacerte cambiar de parecer

No dije nada

—Así que está en tus manos, ir corriendo con ese bombón ahora mismo —lo señalo con un movimiento de cabeza— lanzarte a sus brazos y hacer una escena tontamente cursi de película o ir a clase de Historia. Es tu elección

Me quede ahí, estática, observando mis dos opciones. Ethan estaba de espaldas, charlando con algunos chicos de su clase. Lo extrañaba y mucho —suspire— pero así era como tenía que ser.

—Vamos, tenemos clase

Escuche soltar un suspiro a Rochelle y de reojo la vi negar con la cabeza, pero no dijo nada, simplemente camino conmigo al salón.

***

Unos momentos antes...

—¿Como esta?

—Está bien, no habla mucho de eso

Cada semana era lo mismo, Ethan me preguntaba sobre Savannah, y parecía que cada vez le era más difícil escuchar ese "bien"

—Te extraña, solo que no lo acepta

Una débil y fugaz sonrisa apareció en su rostro 

—Es obstinada

Sonreí de igual manera-

—Lo es

—Ayúdame Rochelle

Fruncí el ceño

—En serio quiero recuperarla

Tal vez fuese una persona a la que no le gustaran mucho las relaciones formales, y podría decirse que mi corazón era un tanto frio, pero demonios... este chico podía hacer que ese frio corazón se movieran.

—No lo se Ethan...

—Solo necesito una oportunidad, solo una más

Me lo pensé por un momento, esto era una mala idea —lo mire— pero demonios soy una magnifica casamentera

—Vale, te ayudare

Pareció que esas tres simples palabras le hubiesen  regresado la esperanza.

—Tenemos solo una oportunidad Ethan, no la echemos a perder

Me sonrió

***

Iba tarde, iba demasiado tarde, odiaba llegar tarde...

El baile de graduación estaba cerca y yo estaba en el comité. Organizar siempre se me había dado bien, la pregunta era... ¿Por qué no podía organizar mi vida aun?

—Ahora tenemos que decidir el tema del baile...

—Lo siento, lo siento —entre corriendo a la sala— se me hizo algo tarde

—Diría yo que mucho...

Un año atrás había tenido la magnífica idea de entrar al comité, solo que no lo había hecho sola...

—Hola Liz —le sonreí, deje mi mochila sobre una de las grandes mesas y me deje caer en uno de los sillones

—Bien como decíamos, tenemos que elegir el tema de este año —Natalia nos interrumpió

—¿Qué tal "Bajo las estrellas"? —Liz dio la primera sugerencia

Natalia negó con la cabeza

—Me parece que ya está demasiado usada

—Como tú —masculle, no lo suficientemente bajo, ya que todas comenzaron a reír... oops

Aclare mis garganta al terminar de reír

—¿Qué tal La alfombra roja?

—Explícate —todas me miraron

—Podemos hacerlo como una gala de Hollywood, con una alfombra roja en la entrada, carteles y pancartas al estilo de posters de películas, en las paredes podemos reproducir películas antiguas de romance, servir el ponche en copas de cristal, seria todo muy elegante

—Me gusta la idea —Natalia me sonrió— ¿Que opinan?

Todas asintieron sonrientes y emocionadas

—Bien, pues hay que ver el presupuesto y los costos

Asentí, frente a mí, Liz me lanzaba una mirada asesina. Sin apartar la vista cruce mi pierna y sonreí radiantemente.

Ese gesto pareció molestarle de sobremanera puesto que se levantó y sin decir ni una palabra salió de la sala.

—¡Adiós! —me despedí inocentemente.

Los modales son muy importantes. Mi madre estaría orgullosa.


¿Cómo ser una perra? Changes #1 (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora