Autenticidad

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Caminando solo por esta noche, por esta densa noche eterna la cual no la alumbra nada más que una débil luz, una débil luz de linterna. Hoy se derrama un lagrima inundada de amor que nadie puede ver, se canta una canción que nadie escucha, se escribe un poema que nadie jamás va a leer y mientras tanto todos pelean sin saber en realidad porque luchan.

Algunos dicen que soy poeta, yo en realidad creo que solo estoy loco.


Autenticidad



No preguntes por mí,

Jamás en la vida me vas a encontrar.

Y aun así yo lo sé todo de ti,

Desde tu nombre, hasta en lo que piensas  al caminar.

De mi nombre hace mucho tiempo yo me olvidé,

Pues no tengo rostro ni tampoco tengo edad,

Tú de mí no quieres saber,

Pues después de todo te da miedo la verdad.

El poema que se murió en el olvido,

La canción que nadie jamás escucho,

El cuento que narra todo lo vivido,

Son en realidad lo que yo soy.

Camino por la tierra sin un lugar a donde ir,

Nadie me ve aunque yo sigo allí,

Y no sé si estoy vivo, pero sé bien que no voy a morir.

Constantemente me veo opacado por lo que piensan los demás,

La gente me sigue tratando de ocultar,

Si tú decides olvidarme, pues entonces tú sabrás,

Pero déjame decirte que te habrá vencido el "¿qué dirán?"

Sin saber nada del amor, se mas que todos ustedes,

Pues nadie más que el corazón,

Sabe bien de sus propios deberes.

Yo habito dentro de cada persona,

Y muy adentro de ti,

Y más que lo que has caminado,

Me preocupa tu porvenir.

Si tú me dices que la vida

Es un sueño que un idiota soñó,

No me quedará más que decirte

Que esa vida de amor poco conoció.

y Si tú me dices que la vida

La ves solo como un camino hacia la muerte,

No me quedará más que decirte

Que tu vida y tu amor, han de correr la misma suerte.

y Si tu bienes y me dices que la vida

Es muy corta para vivirla como se debe en realidad,

No me quedará más que decirte,

Que tu vida y tu amor conocen muy bien la verdad.

Al final yo lo soy todo, y nada en realidad,

Soy el ultimo pedazo tuyo que queda de admirar,

Pero te da miedo admitirlo, y miedo siempre te dará

Pues yo ya no existo, y no me sigas llamando autenticidad.


Humo, vida e historiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora