Capitulo Treinta y Cinco

175 3 0
                                    

Miré a mí alrededor fijándome si ella no estaba por ahí. No, no había ninguna señal de ella.

—¿Se puede saber que demonios haces? —me preguntó Ryan.

—Estoy mirando —le dije y volví a mirar para todos lados.

—Si, ya lo se. Pero ¿Qué miras? —me dijo él.

—Nada, nada. No me hagas caso —dije y dejé de mirar. Chaz me miró frunciendo el ceño.

—¿Hay algo que quieras contarnos? —me dijo Somers. Lo miré bien.

¡Oh, diablos! Emma, ya le fue con el cuento.

—¿Tu noviecita ya te fue con el chisme? —le dije con tono burlón.

—¿Qué? ¿Qué pasó? —preguntó Ryan.

—¿Sabes con quien se acostó ayer a la madrugada, Justin? —le dijo Chaz.

—No, ¿Con quien?

—Chaz —le dije para que se detuviera.

—Con _______ —le dijo. Ryan se giró a verme sin poder creerlo.

—No es cierto —me dijo.
—¡Maldita sea, Chaz! No tuviste que haberlo dicho —dije enojado.

—No, no puedo creer que lo hayas conseguido —me dijo Ryan aun sin poder creerlo.

—Bueno, ya esta no quiero hablar del tema —le dije y volví a mirar a mí alrededor.

Estábamos en la Universidad, ayer por la tarde me la pasé peleando con Ash y Emma y también riendo un poco.

Aquellas dos me acusaron de ser un cínico que necesita urgentemente la ayuda de un profesional. Y puede ser que tengan razón, pero yo ni iba a dejar que se salieran con la suya. Hoy era un día nuevo y yo tenía que estar muy alerta para vigilar a _______.

El auto que yo estaba esperando que llegara, llegó y se estacionó a unos cuantos metros de donde estábamos nosotros. Las tres bajaron al mismo tiempo. Mi mirada se posó en mi prima. Al instante Ash me miró fijamente. Sonrió triunfante y me sacó la lengua en forma de burla. Vi como las tres entraban a la Universidad y comencé a empujar a mis amigos para que caminaran.

—¿Qué sucede? —preguntó Ryan.

—Caminen, caminen. No podemos perder de vista a esas tres —les dije y los seguí empujando.

Las divisé caminando hacia uno de los salones, entonces apresuré nuestros pasos y sigilosamente nos acercamos más a ellas.

—Hoy tenemos que ir a la biblioteca antes del medio día, _______ —le dijo mi rubia prima.

—¿Para que? —preguntó la morena.

—Tienen que ayudarme a dar unos libros, ¿si? —dijo Emma.

Entrecerré los ojos, pequeñas manipuladoras. ¿Con que ese es su plan? Hacerlos cruzarse en la biblioteca, que ella le de sus libros. No lo van a lograr...

—Claro, no hay ningún problema —dijo _______.

—Claro que si hay un problema —susurré.

—¿Cuál es el problema? —me preguntó Ryan.

Detuvimos nuestros pasos justo antes de entrar al salón. Ellas ya habían entrado.

—Que la loca de mi prima y la pequeña diabólica, quieren hacer que _______ salga con un tipejo —les conté.

—¿Qué tipejo? —me preguntó Chaz.

Entrecerré los ojos y miré hacia la puerta del salón.

Dangerous Obsession { Justin Bieber }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora