Miré nuevamente toda la ropa junta en el suelo. No tenía la más mínima idea de qué me pondría. Michael había puesto música y ésta se colaba por la puerta de la habitación, 23 de Miley Cyrus sonaba, y mientras tarareaba por lo bajo descartaba prendas. Encontré un short de jean que llamó mi atención, y me lo probé sentada en el suelo. Al ponerme de pie, noté que era algo corto y apretado, además de que revelaba mis piernas más de lo que estaba acostumbrada, pero para mi sorpresa me gustó.
Escuchaba el agua de la ducha caer y me preguntaba cuándo Maggie terminaría. Sin duda alguna la ropa que tenía puesta era de ella debido a que todas mis prendas eran totalmente distintas. Decidí no serle tan infiel a mi estilo, así que me saqué el short y me coloqué unas medias de red negras y rotas, para luego volver a vestirme. Arriba usé un simple top blanco que revelaba mi espalda y en mis pies llevaba mis infaltables doc martens.
–Si hoy no me follo a ese tal Calum creo que me arrepentiré toda mi vida –declaró casualmente mi prima entrando a mi habitación envuelta en una de mis batas negras.
–Ugh, en cualquier lado menos en mi cama –declaré viendo como ella comenzaba a secarse el pelo.
Maggie rodó los ojos. –Tranquila, ya sé que la ocuparán tú y Luke.
Solté una risa y cerré uno de mis ojos para comenzar a delinear mi párpado con negro.
Una hora después, ambas estábamos listas. Luke ya había intentado entrar un par de veces, pero había sido echado al instante por Maggie aludiendo que quería un tiempo a solas con su prima sin su insoportable novio.
–Mags quiere follar contigo –dije mientras entraba a la cocina dirigiéndome a Calum. Él y Luke se estaban comenzando a preparar algunos tragos.
–Dile que no soy una chica fácil –exclamó sin alejar la vista de su trabajo con las botellas y con una sonrisa en su rostro.
–Yo sí, –se metió Luke. –Arabella puede azotarme con un palo y gritarme baby girl si quiere.
El rubio hizo que largara tales carcajadas logrando que lágrimas salieran de mis ojos al imaginarme la situación. Se acercó a mi y me atrajo a él por la cintura comenzando a besarme haciendo que Calum bufara.
Sonreí sobre sus labios y el timbre nos interrumpió. –Yo voy –murmure resignada.
Al pasar por la sala me encontré a Michael y Ashton haciendo de DJ's improvisados detrás de una laptop. Habían corrido los muebles de lugar y la habitación estaba mucho más espaciosa de lo normal, las luces bajas y de colores le daban el toque necesario al ambiente. Quedé impresionada al ver que habían hecho todo eso sin ayuda.
No conocía a las personas que esperaban detrás de la puerta, pero mínimamente eran veinte, cada una trayendo dos o tres botellas de diverso alcohol en sus manos.
Volví a la cocina con Luke. Me sentía fuera de lugar entre todos esos adolescentes convencionales amigos de Mike. Prendí un cigarro y sonreí levemente al rubio cuando me lanzó un beso mientras exprimia el jugo de un limón en un vaso.
Es irónico decir que la fiesta era para mi y a mi incorporación en el edificio puesto a que solamente conocía a cinco de las, posiblemente, sesenta personas que había en mi departamento en ese momento, pero poco me importaba. Tenía a mi novio junto a mí y un cigarro en mi mano, no necesitaba nada más.
A decir verdad la estaba pasando bien, y al parecer no era la única. A eso de las cuatro de la mañana ya estaba algo mareada, y había perdido a Maggie de vista hace rato, al igual que a Calum.
Luke había desaparecido ya hace treinta minutos con la excusa de ir a preparar más tragos. Me quedé con Ashton hablando de estupideces, hasta que la ausencia del rubio comenzó a parecerme extraña.
–Un momento, ya vuelvo –avisé al castaño dándole el último trago a la cerveza que tenía en mi mano, llevándola conmigo.
Me abrí paso entre la gente con dificultad, tratando de llegar a mi cocina. Empujé la puerta de madera con la mano, y encendí la luz.
Efectivamente, Luke estaba allí. Pero no estaba solo.
Una silueta femenina lo abrazaba, escondiendo su rostro su cuello. Las manos de él estaban en los hombros de la desconocida, y sus azules ojos cerrados. No sé en qué momento solté la botella de vidrio que tenía en mis manos, causando que esta se estrellara en mil pedazos contra el suelo, pero gracias a eso Luke subió la vista encontrándome.
–Arabella –murmuró, apartando a la chica lejos de él. No me sentía capaz de murmurar palabra alguna, lo único que sentía eran las calientes lágrimas caer libremente por mis mejillas.
Sin pensarlo un momento, no dejé que se acercara un centímetro más a mí y reuní fuerzas para salir corriendo de allí.
n/a:
lloré escribiendo esto lo re mil juro
no saben lo q sufrí pero necesitaba drama acá perdón
sé que tardé mucho en esto, pero siéndoles sinceras no tenia inspiración ni ganas de escribir :-(
terminé la escuela¡¡¡¡¡¡ seeeee
supongo que voy a tener más tiempo para escribir, además de que voy a estar mucho menos estresada y con mejor humor :-)
quiero pedirles si pueden pasarse por mi fic que hace poco publiqué, se llama shyness y es de mike jeje, esta en mi perfil obvs
sooo, creo q nada más
muchas gracias por leer, las amo con todo mi cora♡
jaz xx
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nocturnal ☾ lrh
FanfictionNuestros encuentros eran nocturnos y accidentales. Nuestro amor era nocturno y accidental. idea original, tareafina_ (c) 2015-2017.