Capítulo 8

16 1 0
                                    


Me levanto. 006 horas. No me dirijire a la sala de comida. Debo investigar que es lo que esconde esa persona.

Camino por varios pasillos, todos blancos y estrechos. No sé el tiempo que he pasado haciendo esto, hasta que me encuentro en una puerta. La había visto antes, esta cellada. No hay forma de abrirla. Gilbert...

-Hey...

-Mmm

-Puedes abrirla ¿no es así?

-No debería...

-Hazlo quieres.... toda mi vida esta hecha de metiras... no quiero ninguna más.

Abre la puerta estrepitozamente.

-No puedes decir que lo he hecho.

-Promesa.

Entro al cuarto, fue demasiado fácil.

Es un pasillo. Totalmente cubierto de lo que pareciera ser cristal y algo más.

Camino a breves pasos, hasta encontrarme en una puerta. Una puerta de metal, está vez está abierta.

Está oscuro, al parecer dondé quiera que vaya lo está.

Hay un interruptor a mi derecha, lo presione, y la estancia se llena de luz azul.

No puede ser-susurro-.

Personas... personas. Llenas de tubos, y liquidos saliendo de su cuerpo y entrando. La sala está llena de ellos.

Al caminar, noto que se mueven. Algunos las manos, otros los pies. En cada uno hay nombres.

Reconozco dos cuerpos..."Padre de Jerem" "Madre de Jerem".

-No... no.-comienzo a gritar-.

Las personas que les solía llamar asi están ahí. Moviendose levemente. No entiendo nada.

-Qué gusto tenerte aquí Jerem, pero no recuerdo haberte solicitado.

Maldita sea la señora.

- ¿Qué es?

-Que es que-suena exausta-.

-Eso, las personas. Que hacen ahí, que les hacen y por que mis padres están también.

-Haces muchas preguntas. Si tanto tienes curiosidad Jerem... Esas personas que vez ahí son tus padres, tus verdaderos padres, los que te crearon hasta la edad de 1 año. Y después entraron en el sueño.

-No...no...mientes.

-Como decía esos son tus padres. Y las demás personas son la gente que solías ver en tu vida pasada. En tu sueño. En el suño que veiamos todos los dias hasta que despertaste. Todos ellos están aquí por una sola función. Y es, que ellos se encarguen de que los niños esten listos, para las pruebas. No creas que ellos no te querpian, lo hacían. Pero aveces debes cambiar, los cambios son buenos. Tuvieron que, modificarse un poco, y hacer que...

-Está diciendo que toda mi vida fue infeliz, solo por que usted quería que yo...superara unas estúpidas pruebas. Sabe...sufrí, ellos me hicieron sufrir.

-Debías de hacerlo, debías estar listo. Pero al ver que no podías soportar más creimos que ya estabas listo. Te desconectamos. Y lo estás, estás listo para las pruebas. No nos decepciones.

Sale de la habitación junto con un acompañante al cuál no reconozco. No he podido hacer ni decir nada, se ha ido.

Salgo de ahí, veo por última vez a mis padres, y me pregunto como fue antes de que los modificaran.

SueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora