Caigo pesadamente al suelo
Con un sonido seco y quebrado
En un cuerpo muerto y sin movimiento
Cuando mi vida aún no ha terminado
Pasan los días y me encuentran
Y me ponen dentro de un coche
E intento no pensar en el frío
Mientras fuera cae la noche
Veo como lentamente me pudro
Y gusanos mi piel perforan
Mientras mi alma se va
Donde los ángeles moran