Perfectamente imperfecta ©

Capítulo 4.

Desperté en un sofá. Mire a mi alrededor y entendí que me encontraba en la casa de Matt, mi cabeza dolía. Me levanté lentamente y fui al baño donde en un botiquín encontré un par de pastillas para el dolor. Las tomé rápidamente y me agaché para tomar un poco de agua. Entré sigilosamente al cuarto de Matt y agarré algo de ropa, después de todo éramos bastante parecidos físicamente. Me saqué toda mi ropa y comencé a ducharme, intentaba recordar algo de la noche anterior. Pero solo veía el rostro de una hermosa morocha y la misma mostrando su dedo corazón. No le di mucha importancia, y terminé de bañarme para salir en busca de mi auto. Más tarde les mandaría un mensaje a los chicos.

Tomé un taxi hacia la casa de Ashley, donde aún se encontraban cuerpos tirados durmiendo y un montón de basura alrededor. Pobre del que tenga que limpiar todo aquello pensé y reí en mi interior. Pague y fui a mi auto, con el cual conduje hasta mi casa.

Entré en ella y lave mi ropa del dia de ayer, sin embargo recordé que el sobre aún seguía ahí. Me senté y decidí abrirlo para encontrar una llave. Era raro no haberme dado cuenta del volumen del sobre, pero dentro había una llave y una carta.

Así como la vida te dio la posibilidad de soñar, también te está dando la posibilidad de hacer tus sueños realidad. Desde niño insistes con tu sueño y con tu padre creemos que eres lo suficiente mayor para hacer ese hermoso viaje junto con tus amigos, te amamos y queremos que nuestro único hijo sea feliz. Esta llave pertenece a un barco, creímos que era el mejor regalo que podíamos darte por Navidad, te ayudamos a cumplir tu sueño. Disfrutenlo, te amamos. Papá y Mamá.

Lloré, es raro ver a un hombre llorar. Pero en la soledad... ocurre. Lloré de emoción, sinceramente ni siquiera me importaba que en ese mismo momento alguien entre por esa puerta y me vea en este estado porque todo cambiaría ese día, cumpliría mi sueño y la buscaría a ella.