Comenzó a besarme desesperadamente mientras buscaba el broche del sujetador. Cuando lo encontró, no esperó ni un segundo en quitármelo. Se separó de mi apenas para ver mi rostro, mi cabello enmarañado, mis labios hinchados, y mis mejillas rosadas. Los dos respirábamos pesadamente. Bajó a besar mis pechos, mientras él jugaba con ellos tiré abajo su bóxer, dejando ver su erección.
Me tomó la cintura para luego tumbarme en la cama. Mordió uno de mis pezones haciéndome gemir, bajo dejando un camino de besos húmedos hasta mi vientre y descendió a mi cadera, tomando con sus dientes mis bragas y comenzando a bajarlas por mis piernas.
-Hoy tendrás el orgasmo más grande de tu vida preciosa.- dijo viéndome a los ojos mientras se ponía el condón. Se puso encima haciendo rosar su pene con mi vagina.
-Hazlo de una vez.- termino de pronunciar la última letra cuando siento que penetra tan duro y repentino que hizo arquearme gimiendo.
Aumentó sus embestidas, cada vez iban más rápido y más profundo. Sentí un ardor en mi cuello, sabía que me había hecho un chupón, no sé como lo iba a esconder, pero de eso me encargo después. Sentía como el orgasmo se aproximaba. Como mis paredes vaginales se contraían alrededor de su pene haciéndolo gemir.
¿Qué pasaría si tus alocadas vacaciones se convierten en un desastre solo por toparse con los chicos equivocados? Ellas serán el claro ejemplo de la frase: Nunca hables con nadie por las calles de Las Vegas.
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Holidays with the Bad Boys
ActionLas vacaciones fueron hechas para la relajación de las personas; liberarse del estrés en el trabajo y los estudios. Ideales para viajar con familia o amigos a un lugar paradisíaco y no hace nada más que relajarse. Bueno, las nuestras se comparten en...