Ed abrió los ojos lentamente, había sido una noche dura, después de tanto años había experimentado la tristeza de perder a alguien cercano, se quedó mirando el techo de su cuarto un buen rato, era una calma extraña, la había anhelado hace tanto tiempo pero ahora que la tenía ahí, se sentía raro, incómodo, encerrado, no entendía lo que estaba pasando.
- esa pena te va a consumir poco a poco y será un gran obstáculo para tu increíble poder, no debiste alejar a esa chica de ti .- ed se revolvió en la cama buscando el origen de la voz disimuladamente. - ya cállate y déjame dormir - para que? Para soñar con que la chica regresa?, por favor ed no seas imbécil, elige aquí y ahora, puedes ir por la chica y luego de eso te entrenare o puedes negarte al único vestigio que te quedará de humanidad en una semana, tu entrenamiento será más rápido si, pero si fallas una sola vez morirás, que prefieres? - ed se levantó con una calma exagerada, camino hacia la puerta y antes de salir dijo. - si vuelves a ver dentro de mi algo tan privado como mis sueños, te despojo de mi, sea como sea, ahora toma una forma tangible, me siento un total idiota hablando solo.- bajo las escaleras con tranquilidad, aunque estaba ansioso por ver con que comenzaría a entrenarlo su extraña maestra, itzal estaba parada en medio del living con los brazos cruzados, sus ojos estaban cerrados y su cara denotaba una increíble concentración, sin dejar de mirarla ed se acercó lentamente cuando estuvo a una distancia bastante corta sintio el ambiente más pesado, los ojos le pesaban, no sabía que sucedía pero estaba seguro que itzal lo estaba provocando, antes de que pudiera preguntar, esta abrió los ojos de golpe y murmuró algo, apenas término, la luz comenzó a disminuir con rapidez, en menos de diez segundos todo estaba completamente oscuro, ed no podía ver nada, la oscuridad era increíblemente espesa, era diferente a la que todos conocen, esta te instaba temer, un escalofrío recorrió su espalda y escucho un susurró a sus espaldas.- sobrevive. - sintio un fuerte hormigueo en su estómago seguido de un silbido a sus espaldas, antes de que pudiera reaccionar algo con la forma de un palo lo golpeó en los omóplatos y lo dejo en el piso conmocionado y sin respiración. - ese era de practica, los demás serán espadas reales, no intentes bloquearlas porque no hay nada en tu mundo que no puedan cortar. - esta Vez no fue un susurró, era la voz de itzal, ed sabía que el entrenamiento sería difícil pero eso era ridículo, un segundo silbido interrumpió sus pensamientos, rodó con rapidez confiando en su instinto y a su lado sintio un golpe suave, ese golpe no era el de una espada que choca con el ladrillo, parecía madera, sabía que su maestra nos sería tan vil, pero prefirió evitar todos los golpes como pudo, salto, se agachó y esquivo, durante un tiempo se preguntó donde estaba, pues por más que había corrido, saltado y esquivado golpes no había chocado con ninguno de sus muebles, estuvo así mismo durante una hora, las piernas le pesaban y los brazos se demoraban mucho en responderle, sabía que el próximo golpe le daría de lleno y no podría evitarlo de ninguna manera, escucho el silbido y cerró con fuerza los ojos pero el golpe jamás llego, luego de unos minutos la oscuridad ya no estaba, durante un largo minuto analizó su alrededor con detenimiento, sintió como se le helaba la sangre al ver más de diez oscuras espadas clavadas en el piso y las paredes. - eres una maldita loca.- itzal apareció frente a el con una sonrisa de suficiencia .- es mi talento natural, tengo que... Explotarlo .- ed puso los ojos en blanco y se desplomó en el sillón, observó fijamente una de las espadas que había quedado clavada a su lado y la tomó, era tan liviana como una pluma pero había hecho un corte perfecto en la pared, no eran de acero eso lo supo con solo verla, le provocó una intriga enorme pero antes de poder preguntar algo esta se esfumó de su mano como si fuese polvo y fue directamente al vestido de itzal .- es una magia muy útil que invento el primer crosser, llevo aproximadamente 2 milenios vagando y aún no encuentro algún material que le de frente a su filo, cabe destacar que cuando hago chocar dos iguales se esfuman, ese maldito era muy inteligente así se aseguraba de que jamás pudiéramos utilizarlas entre nosotros.... algo así como una paz obligatoria . - entonces ¿si alguna de ellas me tocaba se iba a esfumar? - no, te habrían matado, aun no tienes el aura de sombras que te hace inmune a ellas, ya te dije que te volvería el mejor crosser en una semana pero si fallabas te mataría, no permitiré que taedum se quede con tu esencia, ahora levántate viene la siguiente lección .- apenas se levantó itzal desapareció y todo se volvió distinto, veía todo a su alrededor más claro y no percibía lugares oscuros podía verlo todo, avanzó hacia la puerta, quería ver el exterior pero no llego a ella, algo lo retuvo confundido intento avanzar nuevamente hacia la puerta pero esta vez salió disparado hacia atrás, se levantó rápidamente y pudo verlo, un hombre de dos metros de alto y una masa corporal exagerada, su cara no se veía, estaba envuelta en sombras y ed no podía ver a través de ellas, el sujeto se movió a una velocidad inhumana y asestó un puñetazo limpio en las costillas de ed, la fuerza del golpe lo azotó contra la pared y lo dejo sin aire, antes de que este pudiera reaccionar la mole lo tomo de un pie, levantándolo y golpeándolo como si fuese un saco de boxeo.
Sentía el sabor de la sangre en su boca y los demoledores golpes del gigante, no podía moverse, no podía reaccionar y apenas pensaba con claridad, comenzaba a perder el conocimiento poco a poco, y los golpes no cesaban en ningún momento, "voy a morir" pensó, vio en su mente todo lo que había hecho últimamente y sintió que merecía la muerte, solo lamentó no poder disculparse con su fiel amiga, resignado cerro los ojos y se entrego a la muerte pero antes de que esto pasara algo sucedió, los golpes se detuvieron aunque aún sentía que estaba en el aire, abrió los ojos de a poco y a medida que volvía la claridad se dio cuenta que su mano había detenido el siguiente golpe, no supo de donde saco la fuerza para detener tal mano, pero antes de que se hiciera otra pregunta, el gigante lo lanzó con violencia contra la puerta, ed cayó al piso aturdido pero se levantó rápidamente, a puro instinto detuvo una vez más la mano de su atacante y con una fuerza descomunal le asestó un codazo en el estómago, sin esperar alguna reacción salto y le dio un rodillazo en el mentón, el enorme sujeto cayó de espaldas y las sombras de su cabeza comenzaron a desaparecer, una vez que hubieron desaparecido por completo ed pudo ver una cara completamente vendada, no tenía agujeros para ver o para respirar, pero lo que realmente le dio pánico es que no tenía silueta de nariz u orejas bajo la vendas, se sintió atemorizado y perdido, los golpes que el hombre le he había dado comenzaban a surtir efecto, intento hablar pero no pudo y antes de que pudiera hacer cualquier cosa, la oscuridad se apoderó de el.Nota del autor.- Este sería el séptimo capítulo (aunque creo que ya lo saben) había pensado en no seguir con esto y hace un tiempo alguien me pidió que la siguiera, en base a que esa persona hoy ya no esta quise recordarla (u olvidarla, es complicado) de la mejor Manera