Pov Candy
Después de estar una hora en la pileta decidí salir, ya que me dolían los ojos por el cloro.- Hola. Escucho que me dice un chico. Me doy vuelta y veo al idiota.
- ¿Qué haces acá?
- Vine a divertirme.
- Divertite sin hablarme.
- Sólo quise hablarte un poco.
- ¿Porque me buscas todo el tiempo?
- Siempre te veo sola y me gustaría conocerte. Pareces ser muy interesante.
- Sos un pesado.
- Ian.
- ¿Ian? Le pregunté confundida.
- Me llamo Ian.
- Yo...
- Candelaria.
- ¿Como sabías?
- Pregunté.
El chico era bueno después de todo. Pero ¿Porque de un día a otro me trata bien?
Tengo que admitir que Tina tenía razón es muy lindo. Ese pelo negro con sus ojos celestes lo hace resaltar mucho.
- Bueno Candelaria, me tengo que ir. Nos vemos en el colegio.
Cuando se estaba yendo miró para atrás. Me miro fijamente a mi, sólo a mi. Me puse un poco colorada. En cuanto noto esto dio media vuelta y se subió a su auto.
Sin darle mucha importancia a Ian me fui a buscar a mis amigas nuevamente para contarles lo que había pasado.
- Zack, no sabía que seguía acá. No pude evitar mirarlo ya que no tenía remera.
- ¿Queres que me vaya?
- No. Sólo estoy buscando a tu hermana.
- Creo que estaba con Anita en el baño.
- Esta bien, gracias.
Me fui pensando en Zack. No Candela no podes pensar en el hermano de tu amiga.
Cuando llege al baño abrí la puerta y vi a Tina tirando del pelo a Anita.
- Chicas, no se peleen. Les dije mientras las separaba.
- No nos peliabamos tonta. Estaba sacándole un chicle del pelo que le pego una chica porque Anita se chapó a su novio. Me dijo Tina mientras Anita ponía una cara picarona.
- Por Dios Anita. No podes hacer eso. Le digo mientras la ayudó con el chicle.
- En mi defensa no sabía que tenía novia.
- Chicas les tengo que contar algo. Las miró a mis amigas mientras que ellas ponían una cara de decímelo ya. - Hablé con el chico que siempre me miraba y me dijo que se llamaba Ian.
- Lindo nombre para un lindo chicos. Dijo Tina acordándose de lo lindo que era Ian. - Igual tranquila, no te lo voy a sacar.
- Yo no lo quiero.
- Bueno pero el si te quiere a vos. Me dice Tina mientras Anita se seguía sacando el chicle del pelo.
- Te digo que Anita. No sería mejor si te cortamos el pelo. Al decile esto Anita se agarra el pelo y logra sacarse el chicle.
- Sabía que iba a funcionar.
- Tonta me asustarse. Pensé que enserio me querías cortar el pelo.
- Bueno chicas yo me vuelvo con mi amigo...vio. Dice Tina con cara rara.
- ¿Es serio? ¿amigovio? Le digo burlandome de ella.
- Bueno no quería decir amigo. Me dice mientras sale del baño.
- Anita me quiero ir. Me acompañas.
- Perdón amiga pero me quiero vengar de la chica que me puso este chicle. Me dio un beso en el cachete y se fue con cara de venganza.
- Bueno, no pasa nada, me vuelvo sola. Grito desde el baño pero ninguna me escucho.
Fui a agarrar mi ropa. En cuanto me la puse salí de la casa y me dirigí a la casa de Margaret.
No sabía muy bien el camino así que le pregunté a la gente que pasaba. Cuando vi la casa pude notar que había un auto estacionado.
Lo pude distinguir perfectamente, era el auto de Ian. ¿Pero que hacia en la casa de Margaret? Al entrar vi a Ian y a Margaret hablando mientras tomaban una tasa de café.
- ¿Qué haces vos acá? Le pregunto confundida a Ian.
- Te estaba esperando. ¿Nos vamos?
- ¿A donde?
- A un lugar.
- Esta bien. Pero un rato. Digo sin saber por que acepté irme con el.
Ian salió de la casa y se subió a su auto mientras que yo lo seguía. En el camino no hablamos nada, el miraba a la calle mientras que yo miraba a los árboles que pasaban.
- ¿Para que me trajiste? Me animé a hablar.
- No se, sólo quería estar con vos.
- Sos raro, y me das miedo.
- ¿Entonces por que viniste?
- Realmente ni yo se. Prefiero estar con vos antes de estar sola en mi casa. ¿A donde vamos?
- A tomar un helado.
- Esta bien. Dije un poco temblorosa. No entendía nada. Un día me trataba mal y al otro me iba a comprar un helado.
En cuanto llegamos a la heladería cada uno se pidió su helado y nos fuimos a sentar. El comía su helado muy concentrado mientras que yo lo miraba. Era lindo, pero raro.
El resto de la tarde no cruzamos mirada. El no me hablaba y yo no le hablaba. En cuanto terminamos nuestros helados nos subimos al auto y nos dirigimos a mi casa nuevamente.
- Chau. Le digo despidiéndose de Ian. El me sonríe, se vuelve a subir a su auto y se va. Al entrar a mi casa vi que esta estas vacía.
- ¿Margaret? Grite, pero nadie respondió.
Sin darle mucha importancia subí a mi cuarto y me tire en la cama. Eran las 9:00 PM así que me puse mi pijama y me fui a dormir.
De la nada escucho un ruido. Al despertar veo mi celular. Eran las 2:00 AM. Baje las escaleras y vi a Margaret levantando unos platos del piso.
- Margaret!! ¿estas bien?
- Si, perdón por despertarte. Intenté de no hacer ruido pero me empecé a chocar con todo.
- No te hagas problema. Le digo mientras la ayude a levantar los platos. Me voy a dormir. Le digo en cuanto termine de limpiar todo. Subí las escaleras y me metí en la cama para volverme a dormir.
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Infiltrado
SonstigesUno siempre toma malas desiciones, y mucho más cuando pierdes a algún padre. Esa es mi historia y por eso termine en el reformatorio. Pero ya no voy a estar acá más. Tengo un plan, me voy a escapar a un pueblo. Y empezaré mi vida de nuevo, sin nad...