Visita inesperada (parte 2)

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-Tal vez en este momento te estés preguntando el porque pedí verte antes de la cena. -dijo mientras se posesionaba frente a Emily, quien parecía estar muy atenta a lo que Alison decía-.

-Sí. ¿Está todo bien? -cruzó los brazos y arqueó una ceja-.

-Todo está marchando muy bien. -sonrío y se frotó sus manos-. Quería estar a solas.. contigo. -termino de decir-.

-¿A solas? -se preguntó la morena a sí misma-. ¿Quieres hablar de algo, Ali? -preguntó mientras miraba el nerviosismo que Alison traía con si, se podía notar en cuestión de segundos-.

-No.. es decir, si quiero hablar contigo. Me interesa saber algo, ¿puedo preguntar si aún.. -hizo una pequeña pausa mientras analizaba lo que había dicho-. Si aún me quieres..

El silencio las invadió por varios segundos, Emily la miraba fijamente mientras que Alison solo miraba al suelo como si estuviera decepcionada de si misma, ¡y es que lo estaba! ¿Cómo es que pudo haber desperdiciado la oportunidad de ser feliz hace mucho tiempo? Se lo preguntaba cada vez que miraba a Emily.

-Perdón, Emily. -agregó nuevamente-. Fue una tontería haberlo dicho, será mejor que te vea más tarde en casa de Spencer. -se dio la vuelta y caminó hasta la puerta-.

-No, Alison. -la detuvo tomándola del brazo-. No te irás de aquí hasta que escuches lo que tengo que decir, no puedo seguir así. -sus miradas chocaron por segundos, había una intensidad en ellas, se podía notar-.

-Emily, por favor.. -intento soltarse, pero lo único que consiguió fue acercarse más al cuerpo de Emily, ahora solo estaban a centímetros sin decir una palabra, las miradas lo decían todo-.

-Sé a lo que has venido, Alison. -dijo con mucha seriedad sin soltar a la rubia-. Y créeme que yo también lo necesito, lo necesito mucho. -soltó por un momento a Alison y llevó sus manos hasta la cintura de la rubia, pego su cuerpo con el de ella y comenzó a dejar pequeños besos en el cuello de Alison-.

-¿Qué.. haces? -llevo su cabeza hacia atrás-. Espera, no.. ¡Esto no está bien! -termino de decir y se alejó con desesperación-.

-¿Qué no está bien? ¡Ya no somos unas adolescentes! -exclamó la morena y rodó los ojos-.

-Lo sé, pero tú tienes pareja, Emily. No quiero ser tu segunda opción. -dio un gran suspiro-.

-¿Mi segunda opción? ¡Por favor! -la tomo del brazo y la acercó a ella-. Eso jamás sucederá. -murmuró-.

-Tal vez tengas razón, ¿vale? Pero no puede pasar nada entre tú y yo, absolutamente nada.

-Bien. Si no quieres que pase nada entre nosotras, ¿qué estás haciendo aquí? ¿A qué viniste? -dijo soltando a la rubia-.

-Te dije que quería estar a solas contigo, eso no significa que me acostaré contigo, Emily. No soy una cualquiera, y no soy nadie de una noche.

-Alison, yo jamás dije que quería acostarme contigo. -arqueó una ceja. Su tono cambio a uno más burlón, como si se estuviese burlando de lo que la rubia había dicho hace unos segundos-. Si no tienes nada que decir creo que volveré arriba, te veo en la cena de Spencer. -termino de decir y abandonó la sala de estar, subiendo las escaleras-.

-¡Qué te pasa! No puedes dejarme hablando sola, ¿me entiendes? -bufo de lo furiosa que estaba, se sentó en uno de los sofás y cruzó las piernas-.

Deseos de cosas imposibles..Donde viven las historias. Descúbrelo ahora