Deseos de cosas imposibles..

El gran comienzo

La morena abrió la puerta y miró al Sr. DiLaurentis, dio un paso hacía atrás.

Kenneth entró y las miró.

-Ahora mismo me van a decir que está pasando aquí.

Alison se paralizó al ver a su padre parado justo frente a ella, tragó en secó y lo miró.

-Puedo explicártelo, no es lo que parece. -dijo mientras se acercaba a él-.

-Claro que lo harás, Alison. -miró a Emily-. Largo de aquí, Emily.

Kenneth, tomó a Emily del brazo y la sacó de la habitación de Ali.

-No quiero que vuelvas a está casa, ni te quiero cerca de Alison, ¿quedó claro? -soltó el brazo de Emily-.

La rubia rápidamente intervino a lo que su padre estaba haciendo, se acercó a Emily y la tomó fuertemente de la mano.

-No, papá. Emily no se irá. -dijo la rubia mientras miraba a su padre enfurecido-.

-No tienes porque hacer esto, Ali. -murmuró la morena-.

-Lo hará, porque está es mi casa, y no quiero a un par de.. -se quedó en silencio por unos segundos-.

-¿Un par de qué, papá? -dijo Jason mientras subía el último escalón-. Yo sólo veo a dos chicas que se quieren, ¿no es así, Ali? -se colocó a un lado de Alison-. Recuerdo que siempre decías que lo único que te importaba era la felicidad de tus hijos, y es lo que Ali está haciendo, papá... Déjala ser feliz

Kenneth sólo los observó y se quedó en silencio mientras miraba a Jason.

-No de esta manera, Jason. -observó como las chicas aún seguían tomadas de las manos-. Y necesito que arregles tus cosas, te vas está misma noche.

Alison, lo miró y renegó. -Dijiste que aún no sabías cuando me iría, ¿y qué hay de Jason?

-Bien, pues ahora lo sé. -bajo las escaleras y se detuvo en el penúltimo escalón-. Y no hay manera de que escapes, si es lo que está pasando por tu cabeza, Alison.

-¡Papá! -gritó la rubia enfurecida-.

-Ali, tranquila. -dijo la morena-.

-Hablaré con él, Ali. No te preocupes, ya lo entenderá. -dijo Jason mientras miraba a su hermana-.

-Gracias, Jason. -Lo abrazó e intentó sonreír-.

Minutos después, las dos se encontraban nuevamente a solas en el pasillo, el móvil de Em comenzó a sonar, había tanto silencio entre ellas que el sonido del móvil de la morena las asustó a ambas.

Emily tomó el móvil y contestó. -¿Hola? -dijo mientras miraba a la rubia entrar a su habitación-. Sara, estoy ocupada y no creo poder verte, dejémoslo para otra ocasión. -murmuró al teléfono y colgó-.

La morena se paró frente a la puerta de la habitación y miró a Alison, quién estaba sentada en la cama.

-Creo que te dejaré empacar a solas, Ali.

-Espera, Em. -la rubia alzó la mirada-. Hay muchas cosas que aún no te he dicho, y necesito que las sepas.

-¿A qué te refieres, Ali? -preguntó mientras caminaba hacia donde estaba Alison-.

-Jamás te demostré mis verdaderos sentimientos hacia ti, siempre te hice creer que esos sentimientos solo eran de tu parte, pero no es así, Em.

-Ali, tú.. -se acercó más a la rubia-. ¿Tú me amas? ¿Realmente lo haces? -preguntó mientras la miraba fijamente a los ojos-.

Alison colocó ambas manos en el rostro de la morena y se acercó tanto como pudo a sus labios. Las dos chicas estaban demasiado cerca, ambas podían sentir como su respiración aumentaba cada que estaban a centímetros, y como sus latidos se aceleraban de manera continúa. La rubia bajo la mirada hacia los labios de Emily y lentamente se fue acercando a ellos, cuando por fin sus labios tocaron los de la morena, la besó, y lentamente sus manos bajaron por la cintura de Emily, decidió romper el beso y regresó su mirada a la de la morena, pero sus manos seguían ahí, en la cintura de Emily.

-Te amo, como no tienes idea, Emily Fields. -sonrío-

Con una de sus manos echó hacía atrás el cabello de la morena y sonrío nuevamente. Se acercó a su cuello y colocó sus cálidos labios ahí, Emily se estremeció y se dejó llevar por el momento, la tomó de la mano y le dio una pequeña vuelta, Emily sonrío y tomó  a Alison por la cintura mientras le plantaba un tierno y dulce beso.

-Te voy a extrañar tanto, ¿lo sabes? -dijo mientras se separaba para mirar los hermosos ojos azules de la rubia-.

-Yo también lo haré, Em. -colocó su frente con la de la morena-. Y no habrá ni un sólo segundo en que deje de pensar en ti, lo prometo.

***Esa misma noche***

-¡Alison! ¿Podrías no tardarte tanto? -dijo Kenneth-. No quiero que pierdas el vuelo. 

La rubia terminaba de ponerse un poco de rubor en sus mejillas, tomó su bolso y salió de la habitación, bajó las escaleras y miró a su padre y a Jason.

-Vamos, Ali. Ya es un poco tarde. -Jason tomó las maletas que estaban un lado- ¿Te estás llevando toda la casa? -preguntó- ¿o sólo lo básico?

La rubia río y subió al auto.

Cuando llegaron al aeropuerto aún faltaban 15 minutos para que el vuelo saliera, se despidió de su padre y se sentó a esperar a que nombraran su vuelo, no dejaba de mirar el reloj que estaba justo frente a ella, esperaba que antes de subir a aquel avión Emily apareciera y al menos se despidiera de ella, como en esas películas románticas, miró por última vez el reloj y sólo faltaban 9 minutos.

-¡Alison! -escuchó la voz de Emily y volteó, vio a Emily correr hacia donde estaba ella-.

-Em.. -La rubia alcanzó a Emily y la abrazó fuertemente- Pensé que no vendrías. ¿Te has encontrado a mi padre? -preguntó-

-Si, fue él quién me dijo dónde estabas exactamente. -dijo con una sonrisa en el rostro-.

La rubia volteo y vio a su padre en uno de los pasillos.

Kenneth le regaló una sonrisa mientras ella lo miraba a lo lejos, sonrío y regresó su mirada a Emily.

-Jason, tenía razón.. -dijo mientras sonreía-.

-Ali, algunas personas quieren despedirse de ti.. -La morena la miró-. Chicas, pueden salir..

Aria, Spencer y Hanna, salieron de un pequeño pasillo que estaba en donde se encontraban ambas chicas.

-Oh, Dios mío. -la rubia sonrío y colocó una de sus manos en su boca-. Me harán llorar..

Alison, no dudó en abrazar a las chicas, a pesar de todo lo que había ocurrido hace tiempo, ella no le guardaba rencor a ninguna, al contrario, siempre las ha querido y las ha considerado como hermanas a cada una de ellas. Se perdieron entre tantos abrazos y tantas palabras que era hora de que Alison se marchará.

-Bien, creo que es hora, Ali.. -dijo Spencer con lágrimas en los ojos-.

-No saben cuando les echaré de menos, chicas. -dijo mientras tomaba su maleta-.

-Y nosotras a ti, Ali. -Aria colocó su mano en el hombro de Alison-. No dudes en contactarnos, y manda muchísimas fotografías. -se limpió las lagrimas y sonrío-.

Emily tomó a Ali de las manos, y las chicas la miraron, todas sonrieron ante ese acto de ternura.

-Te amo, Ali. -sonrío y le dio un pequeño beso en los labios-.

-Te amo, Em. -La abrazó y algunas lagrimas cayeron, se separó y la miró-. Recuerda que tenemos un viaje a París.

La rubia se dio la vuelta y caminó para abordar ese avión que la alejaría de Emily, pero sólo temporalmente, la historia no termina aquí, estás chicas están destinadas a estar juntas, y a pesar de muchos obstáculos, y la distancia, ambas lucharán para estar juntas, porque el amor no es fácil, y mucho menos cuando es real y verdadero como el de éstas chicas.

*NOTA*
No se cuando vuelva a actualizar el capítulo 8, ya que en unos días entrare al colegio, chicas estoy muy feliz de que les haya gustado la historia, espero que la sigan disfrutando. ¡Muchas gracias! 🙆🏼✨❤️