Vivo con mi Ex-Novio "Jortini" Terminada

Parte 5

  Los días pasaban.
Ya no había confusiones, sabia lo que quería, quería ser feliz.

—¿Que se siente tener 18?.-preguntó Jorge sentándose conmigo.

—Nada.-encoji mis hombros.

—¿Nada? Solo así nada.-Dijo con haciendo una mueca.

—Si, o que, ¿Quieres que me ponga un cartel que diga "Hey Bitches, tengo 18"?.-Dije sarcástica.

—No, pero debes sentir algo, tienes 18, eres mayor de edad.-dijo frustrándose, enserio no lo entendía.

—Sigo siendo la misma Jorge, hace unos días tenía 17 hoy 18, no le veo algo especial.- dicho eso centre mi atención en la televisión, había vencido a Jorge en esta discusión, claro que si.

(***)

Martina me había mandado a sus habitación en busca de su cargador, pero no tenía ni idea donde lo tenía, esta chica era un desorden.
Sin darme cuenta tire un libro, dentro de ese libro había una nota, la tome para volverla a su lugar, pero tenía curiosidad por leer su contenido y ya saben ‹La curiosidad mato al gato›

«17 de noviembre del 2011, 10:45 am

La paciente Martina Stoessel con aprobación de la señora Lucia Muzlera, presente acepta sin presiones ni obligaciones la interrupción fértil con dos semanas de gestación»- Martina había abortado, Martina estuvo embarazada a los 14 años, estaba embarazada de mí, había abortado a nuestro hijo, por más que trate de contener las lágrimas no pude, sin previo aviso salieron.

—Jor....-Martina venia entrando a su habitación y al ver sólo se detuvo.-¿Q..que paso?.-dijo tartamudeando.

—¿Que paso? Esto paso.-le mostré el certificado de aborto, en su boca se formo una gran "O"

—Te lo puedo explicar Jorge.-dijo con lágrimas.

—¿Me vas a explicar?.-Me rei falsamente.-Eres una inhumana Martina, mataste a tu propio hijo, MI HIJO, creí que eras una mejor persona, pero...-trago pesado- me equivoque, eres una ASESINA Martina, una asesina.-Escupi sin miedo a herirla, estaba muy enojado, la odiaba.

  «Martina»

Habían pasado más o menos diez minutos desde que Jorge subió a mi habitación en busca de mi cargador, cómo tardaba tanto me decidí a subir a buscarlo por mi cuenta.
Entre a mi habitación, Jorge sujetaba algo, más específica sujetaba en sus manos mi certificación de aborto.
Lo que sucedió a continuación fue una serie de reclamos hechos por Jorge, ambos estábamos tan destruidos, sumergidos en lágrimas.
Jorge me atacaba con sus palabras y yo simplemente no podía responder, no sabía como hacerlo.

—Eres una inhumana Martina, mataste a tu propio hijo, MI HIJO, creí que eras una mejor persona, pero...-trago pesado- me equivoque, eres una ASESINA Martina, una asesina.-me dijo de una manera tan fría que daba miedo, de una manera tan dolorosa que podía romperte el corazón en segundos, mis lágrimas salieron a velocidad luz.

—Tienes razón Jorge, soy una inhumana pero ponte un momento en mi lugar, tú te habías ido ¿recuerdas?.- Jorge iba a hablar, pero proseguí.-Te fuiste, estuve enviando mensajes, llamando y nunca atendias Jorge, tan solo tenia 14 años Jorge ¡14! Mi mamá había muerto, Papá pasaba horas trabajando, ¿Como haría para cuidar de alguien más? Apenas podía conmigo misma, ¿crees que no me dolió matar a mi hijo?, ¿Crees que fue fácil?, ¿me odias? Odiame yo también lo hago, no sabes cómo me arrepiento de lo que hice, pero lo hice y no puedo volver el tiempo atrás, no sabes cuantas veces e soñado que él esta aquí conmigo, e llorado tantas noches que perdí la cuenta, hice lo que creía correcto Jorge y aunque esa no fue la decisión correcta en su momento lo era, tan sólo tenía 14 años, sería una niña jugando a ser mamá.-terminé, limpiando mis lágrimas Jorge se acerco a mi de manera peligrosa.

—perdoname, no te quise decir nada de eso.-susurro en mis labios, segundos después los junto.
Me besaba con tanta delicadeza como si tuviese miedo a lastimarme.
Sin parar de besarme me llevo hasta mi cama y prosiguió besandome, sabía lo que iba a pasar, esto estaba mal, pero ni fuerza de voluntad deseaba esto tanto como yo lo hacía.

Jorge quito mi blusa haciendo visible sólo mi sostén, con su respiración agitada despego sus labios de los míos.
Sus ojos recorrieron todo mi cuerpo, haciendo qué me ruborizara.

—Eres perfecta.-dijo con voz entre cortada mientras repartía besos en mi cuello.

Estaba tan ansiosa, quería qué Jorge estuviese dentro de mi ya.

—Jorge hazme tuya ya.-suplique con voz entrecortada.

—Como tu lo órdenes princesa.

Jorge estaba apunto de hacer su trabajo, cuándo paro de golpe.

—¿Qué pasa?.-pregunte confundida.

—No puedo hacerlo Martina, lo siento.-dijo parándose para vestirse.
Me sentía como una puta.