happy faces ☹ ziam

cinco; liam☹

"No conozco a nadie aquí, Liam."

Él rodó los ojos.

"Carajo, Malik, si hubiese sabido que te ibas a andar quejando mejor no te hubiese invitado" Liam gruñó. "Y por supuesto que no conoces a nadie, eres nuevo en la ciudad, genio."

Zayn infló los cachetes y resopló.

"¿No te cansas de ser tan pensado?" Liam sólo sonrió de medio lado.

"Depende de con quién lo éste siendo."

Él vio como él moreno abrió la boca, seguramente paran replicarle, pero de inmediato la cerró al divisar una tercera persona junto a ellos.

"¡Payne! Que bueno que pudiste venir." Liam le sonrió al chico rubio y de rulos frente a él.

"Buena fiesta, Ashton."

"¿Está porquería?" Ashton señaló toda su fiesta y se río. "Nah. Pero hombre, estas más delgado, tienes que decirme que dieta estas haciendo, ya la estoy necesitando." Ashton volvió a reír tocando su marcado abdomen sobre su camisa.

Liam no dijo nada pero sintió mucha envidia, él sólo tenía llantas. Casi se parecía a ese personaje de llantas, Michelin. Él no entendía por que le mentían diciéndole que estaba delgado cuando obviamente era una bola de grasa.

Frunció los labios y antes de que pudiera decir que no estaba haciendo ninguna dieta, Zayn se adelantó.

"Él sólo está haciendo mucho ejercicio y comiendo saludable." Entonces Ashton observó al chico desconocido, intrigado porque ni siquiera se había dado cuenta de su presencia.

"Ashton, él es Zayn" Liam comentó. "Es nuevo en la ciudad."

El rubio asintió, le dio un "Bienvenido" y se volvió a desaparecer entre la multitud.

"Oye, Liam."

"¿Qué?"

"¿Qué tal si conseguimos algunas cervezas?"

A la una de la mañana Zayn y Liam ya habían tomado lo suficiente como para actuar como unos verdaderos tontos adolescentes irresponsables, pero no demasiado como para no recordar lo que hicieron en el auto del castaño.

Ellos estaban jugando a las veinte preguntas y ya para entonces Zayn sabía más de Liam que ninguna persona en su vida, y viceversa.

"Entonces, te toca a ti preguntar algo, Zayn."

El aludido asintió tomando la botella de vino que se habían robado de la vitrina de Ashton y tomó un sorbo, por cada pregunta se debía tomar uno.

Liam lo observaba de reojo, Zayn tenía los ojos entrecerrados y estaba recostado contra la ventanilla del asiento del copiloto.

Después de un pequeño silencio el moreno se dignó a preguntar.

"¿Tienes anorexia o no?"

Liam dirigió su mirada a la ventana, afuera había comenzado a llover y eran alrededor de las tres de la mañana. Se llevó su cigarrillo a sus labios y suspiró.

"No, no tengo anorexia."

Zayn sólo lo observó fijamente lo que se sintieron horas para Liam, luego asintió y le pasó la botella. Liam no lo sabía, pero una persona anorexica nunca se da cuenta de que la tiene hasta que ya puede ser demasiado tarde.

"Te toca." Zayn murmuró.

Liam tomó un sorbo y se recostó mejor en su asiento.

"¿Tú de verdad eres un suicida?"

Y Zayn pareció pensarse la respuesta, finalmente se encogió de hombros.

"Intenté suicidarme una vez porque mi madre murió y tengo depresión." Respondió lo más honesto posible.

"¿La enfermedad?"

"Sí."

"Ah."

El auto se quedó en completo silencio después de eso, no uno incómodo, ambos escuchaban el relajante ruido de la lluvia y se refugiaban en sus cigarrillos para darse calor.

Quien se dignó a hablar fue Liam.

"¿Y por qué me lo has contado?"

Zayn le dirigió una mirada confundida.

"Dijiste que no íbamos a ser amigos y me estas contando esto."

Es como si yo te contará que no he ingerido una comida normal en casi cuatro meses, pensó.

"Tú preguntaste y yo respondí." Zayn contestó.

Y de nuevo hubo un pequeño silencio, esta vez más corto que el anterior y fue roto por Zayn.

"Liam, ¿podrías besarme?"

Realmente la reacción de Liam no fue la normal, él apenas se giró lentamente aún recostado en su asiento para observar al chico, totalmente neutro, como si se estuviese esperado una pregunta así por parte de Zayn, el chico que apenas conoció el día antetior.

Él miró los labios del moreno y se dijo a sí mismo '¿por qué no?' No quería pensar de más.

Se sentó recto en el asiento, seguido por Zayn que se sentó apoyado en sus rodillas, y se fueron acercando hasta que sus labios hicieron contacto. El beso era lento, logrando recorrer la cavidad del otro, Zayn se aferraba con ambas manos de su camisa, y él ni siquiera trató de buscarle lógica a la situación.

"Hagamos un trato" escuchó a Zayn susurrar sobre sus labios, Liam tenía los ojos cerrados y sólo quería seguir besando al moreno.

"¿Mm?"

"No volvamos a comentar el tema de la depresión ni la comida."

"Ya, pero vuelve a besarme." Liam prácticamente gruñó, Zayn sonrió y nuevamente se besaron.

A los segundos Zayn se volvió a separar.

"Sólo recuerda, Liam, que yo no soy de nadie."

"Hablas mucho, Zayn" Liam se quejó. "Nadie es de nadie, sólo somos adolescentes." Dijo, para luego él encargarse de reanudar el beso con más intensidad que antes.