Vegeta sentía que se desmoronaba mientras se dirigía a corporación capsula, ¿Su esposa moriría?, ¿La volvería a ver?... Tal vez no había sido lo mejor para ella, él era el culpable, o por lo menos eso pensaba... Se sentía fatal. Realmente lo lamento, Vegeta, fueron las palabras de su rival, mientras se echaba a llorar. Jamás lo había visto así.
Sí, Vegeta sabía que Bulma estaba trabajando en un proyecto nuevo, ¿Esa era la causa de que ella estuviera así?, todavía no lo sabía.
Bulma, ese día se había conectado a una maquina... pero, ¿Qué había sucedido?... Esa era la pregunta. Un error, un problema, un mal funcionamiento de las computadoras... Eso la estaba asesinando. Mas nadie sabía nada al respecto, el motivo de la maquina, por qué la hizo, cual era su objetivo. Ni siquiera sabían cuando había terminado el artefacto.
Ahora era Vegeta el que sufría mientras corría por los pasillos de el lugar, del cual se podría decir que era su hogar... Hasta que la vio. Con tubos, jeringas y una mascarilla sobre ella.
-Bulma-dijo acercándose-, Bulma-repitió mientras sus ojos se cristalizaban, pero no lloró. El no era de los que lloran por cualquier cosa, con la diferencia que eso no era cualquier cosa y no podía soportarlo. Por suerte se contuvo y se limitó a arrodillarse al pie de la cama.
-¿Vegeta?-preguntó el Dr. Briefs acercándose a su yerno.
El de cabellos flama se voltea para que no lo vea destrozado, como estaba. El Dr. suspira.
-Mira Vegeta, sé que esto es difícil para ti. Para mí también lo es-posa su mano sobre el hombro del Saiyajin-... Pero es diferente. Yo ya soy viejo. Para ti, sólo soy un pobre diablo, un anciano sin utilidad-Vegeta voltea sorprendido-... Pero, no me molesta, porque es verdad. Además, tengo más experiencia con la muerte y... aunque es mi hija... cuando es la hora de alguien, es necesario dejarlo ir...
Bulma se estremece, tomando por sorpresa al par. Ella estaba en un sueño...
Y ahí es cuando empieza la historia.
-¡Vegeta!-exclamó el alto de cabellos hasta las rodillas algo enfadado. Este despertó de golpe en guardia, mientras cargaba una esfera de energía.
-¿Ahora que quieres, Raditz?-preguntó el nombrado, de mala gana, relajándose y algo indiferente mientras se recostaba una vez más.
-Dirás, ¿Ahora que quiere Freezer?... Te llama, te quiere ahí en este mismo momento. Más te vale ir-con esto se retiro dejando a Vegeta solo.
-Joder. Esa lagartija mutante ya me está llegando, ¿Ahora que querrá?-inmediatamente se levanto dejando al descubierto su semi-desnudo cuerpo vestido con un boxer. Se vistió con su elegante armadura y se dirigió a la sala donde lo esperaba Freezer.
-¡Vegeta! Que bueno que hallas venido tan rápido-dijo la criatura aproximándose a él. Este se percató del nerviosismo en el rostro de su soldado cuando se acercó-. No me digas que aún te sientes mal...
-¿Mal?-preguntó incrédulo-, ¿Desde cuándo te importa si me siento mal?
-Desde que pensaste que era un sinvergüenza que pasaba sus días coqueteando con sus soldados... ¡No! Con su mano derecha, ¡Zarbon!... ¿O me equivoco?-esto dejó atónito al príncipe-. Acuérdate que yo no tengo género, ¡Baka!, y para tu información, si es que cave en tu pequeña e inútil cabeza de insecto, ¡No-ando-desperdiciando-mi tiempo-como tú!-la lagartija bufó fastidiado mientras se alejaba-. Me preocupas, ¡No!, me preocupa el hecho de que andes esparciendo mentirillas, ¡Como el chismoso que eres!
-¡Ja!, ¡Pues no cuentes con ello!-sonrío de medio lado-. La gente ahora piensa que eres una nena-esto lo dijo casi en un susurro.
-¡Maldito!-gritó abalanzándose contra él rápidamente, pero la puerta, al abrirse fuertemente, lo interrumpió.
-¡Mi Lord!-era Zarbon que llegaba con una mujer en brazos. Una gota de sudor se deslizó por la frente de un avergonzado Freezer por la imprudencia de sus soldado, "Su mano derecha". Vergüenza ajena, pensaba Vegeta burlón.
Se acomodó en su asiento flotante con una mano en sus cara fastidiado, minutos después le sonríe a Zarbon falsamente.
-¡¿Qué?!-interrogó furioso-¡¿Qué quieres?!, ¡Maldición!, ¡¿Cuántas veces te he dicho que no me interrumpas cuando hablo con el soldado Vegeta?!-el de cabellos en forma de flama se estremeció. ¿Por qué justo cuando habla conmigo?.
-Eh... Perdón mi Lord-dijo sin una muestra de miedo-. Encontramos a esta mujer rondando por lo alrededores con una extraña nave.
-¡Déjame, maldito infeliz!-gritó la mujer tratando de zafarse pateando a Zarbon en el pecho, sin lograr hacerle daño alguno. Ella no recordaba cuando había llegado a esa nave; la de Freezer, ni siquiera recordaba su rapto, solo había sentido que despertaba de un largo sueño, y por eso estaba muy confundida con lo que sucedía. Vegeta la miro con interés.
-¡¿Y qué quieres que haga?!-exclamó exaltado "El emperador del mal", o como él solía decirse, del universo-¡Métela al calabozo y luego veo que hago con ella!
-Pues... yo no lo pensaría mucho-mencionó Vegeta descolocando a la criatura-, ¿O acaso eres...?, ¡¿Una nena?!-sonríe victorioso para luego soltar unas cuantas carcajadas.
-¡CÁLLATE, GUSANO!-gritó Freezer muy enojado con su soldado estrella.
Hola! Espero que ya se estén dando cuenta de lo que se va a tratar el Fic, ¿Quién será esa chica?, ¿Qué pasará con el Vegeta del presente?... Sin más que decir, ¡Espero que les halla gustado, bye!
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Enamorándote en otro tiempo, FanFic de Vegeta y Bulma
FanficCuando te casas, tu vida cambia completamente, pero si el amor de tu vida te traiciona ésta se desmorona. Bulma creyó descubrir algo intimo de su esposo, dudando de él... Vegeta no tendrá más opción que dejar que piense, pero se arrepentirá al saber...