La conversación

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Era tarde en la casa de los Son, la familia de los Briefs, conformada por Bulma, Vegeta y sus ya jóvenes hijos, se encontraban ahí. Vegeta, esa mañana, se había negado a ir a la reunión de su archienemigo que más parecía su amienemigo de corazón, mas su esposa lo había obligado. Entonces ahí empezó el problema. Vegeta se encontraba en el comedor con rostro enfadado y los brazos cruzados, mientras observaba a los jóvenes caminar de aquí para haya, siempre mirado a la pareja de su hija, Goten.

-¡Vegeta!-exclamó la cabeza de los Son, acercándose al nombrado. Su rostro irradiaba felicidad y asombro al mismo tiempo.

-¿Ahora qué quieres Kakaroto?-respondió el príncipe de mala gana.

-¿Sabes?, la verdad pensé que no vendrías...-dijo entusiasmado Goku, sentándose en el asiento continuo-¿De nuevo necesitas mis consejos?-inmediatamente el príncipe se sonrojó de sobre manera.

-¡Cállate!-exclamó furioso-Te van a escuchar, idiota.

-Pero, ¿Qué tiene de malo?... De todas maneras Bulma es algo difícil.

-No, no necesito tus consejos...-dijo el de cabellos flama resignado-¿Cuándo se me ocurrió qué tu eras el indicado?-ahora miraba al piso fastidiado-¡Ah!, ¡Sí!, cuando estaba inconsciente por el alcohol.

-Que irónico, Vegeta. Pero sabes que te sirven más de lo que crees.

-Sí, claro, como tú digas...

-¡No!, ¡De verdad!, para que hallas decidido casarte con ella...

-¡Qué te calles!-exclamó furioso y una vez más sonrojado Vegeta, parándose de su asiento y llamando la atención de sus hija.

-¿Qué sucede, papá?-preguntó la peli-azul menor de la famiia.

-Nada-dijo sentándose de nuevo. Ahora miraba a un asustado Goku-Si vuelves a mencionar eso... ¡Juro que te mato!

-Eh... ¡Sí, sí!, ¡No te preocupes, Ve-vegeta!-dijo de manera entrecortada relajado sus músculos-... ¿Ella todavía no lo sabe?

-No, y no lo sabrá-dijo mirando sus uñas. El de cabellos enarca sus cejas-... por ahora.

-¡Ah!-su rostro cambia a uno infantil-¿Y cuándo se lo dirás?

-¡¿Qué parte de por ahora no entendiste?!

-Ups... es verdad, el "por ahora". Pero no creo que el "por ahora" dure mucho... tienes que decírcelo pronto.

-Lo sé-respondió el más bajo tornándose nervioso. Goku se encoje de hombros confundido por su repentino cambio de humor.

-...¿Necesitas un consejo?...-Vegeta lo mira furioso.

-Que, ¡NO!-gritó rojo de furia. Esta vez, su hija no se molestó en preguntar, últimamente el par estaba algo raro.

-Ok, ok-el de cabellos alborotados se deslizaba cada vez más en su asiento al ver que Vegeta se acercaba cada vez más a su cara.

-Más te vale que hallas entendido-lo amenazó el príncipe incorporándose, aún furioso.

Bulma, que se encontraba conversando con Milk, se exaltó por el grito de su esposo y se apresuro a "calmarlo".

-¿Ahora qué sucede, Vegeta?-preguntó ella acercándose al cuello de este y lo besó de manera fugaz, haciendo que Vegeta se volteara a mirarla.

-Nada-dijo, usando la misma excusa que con su hija, relajándose.

-Bien... Entonces no grites-su rostro cambio a una demandante, poniendo las palmas de sus manos en su cintura-Ahora, ve afuera y entrena con Goku. ¡No molestes, cariño!

Enamorándote en otro tiempo, FanFic de Vegeta y BulmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora