CUARTA ESFERA

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Quizás si nunca hubiese aparecido en su vida, nada de esto hubiera pasado, quizás ella estaría mejor, sin miedo, sin dolor, sin molestias...quizás ella sería feliz, estaría con alguien que si la merezca y no con alguien que lo único que sabe hacer es lastimarla, podría simplemente ir a su pasado y quitar todo ese miedo? Quitar eso que la mata por dentro...sería todo tan distinto si lo hiciera...quizás sea lo mejor para ella, lo único que he hecho yo es volver a abrir esa herida.

No tengo palabras para describir lo arrepentido que estoy y sé que ella no podría perdonarme, no la culpo...ni siquiera yo puedo perdonarme a mí mismo por todo lo que le he hecho, ella no merecía esto, ella merecía ser feliz y conmigo no lo es, solo tengo dos opciones.

Volver, quitar su dolor y alejarme sin más...o simplemente continuar y terminar lo que empecé hace mucho tiempo.

Me asusta que esto no resulte como esperaba, pero más me asusta el hecho de perderla, en pensar en la posibilidad de que se valla de mi lado hace que se me acelere el corazón, nunca tuve un miedo más grande en mi vida...que perderla.

Esa perdona importante, la que hace que tu corazón se acelere, que te sea imposible no sonreír, que sea imposible no tratar de que nadie la lastime, de alejar a todo aquel que la vea, de quieres abrazarla y no soltarla nunca...de querer pasar toda tu vida con ella.

Esa persona que con solo escuchar su nombre te alegra el día...que haría yo si esa persona? Estaría perdido otra vez, solo otra vez...haciéndome sentir peor que saber que fui olvidado por quien alguna vez tuvo mi corazón.

Solo tenía dos caminos...uno haría que ella no sufriera más y que sea feliz, que es lo único que deseo para ella, pero a cambio de no verla.

O podría seguir, arriesgándome a que alguien me gane, a perderla y hacerla sufrir, o ganaría esta batalla, estaría con ella y por fin quitaría todo ese dolor y miedo que le atormenta.

Sinceramente, no sabía qué hacer...

*Narradora*

Jack caminaba tranquilamente por los pasillos de la escuela, su relación con Elsa había crecido, pero aún seguían siendo "amigos" cosa que me frustraba un poco al rubio, él quería ser más que eso, pero todo a su tiempo.

Hacía casi un mes que no se iba de esta fase, se había quedado para asegurar que "eso" que lo estaba siguiendo se fuera, y al parecer había resultado, la historia estaba cambiando y no sólo lo decía por qué había empezado con el pie derecho, si no por qué "eso" que lo seguía, las arenas e incluso los miedos de Elsa, habían desaparecido.

Pero aún no era del todo seguro que nada había sucedido después, pero debía irse ahora para asegurarse de que no habrán problemas después.

Pero el no era consciente de que un nuevo miedo lo invadía poco a poco.

-Jack! -Llamo una voz, como no reconocer esa melodiosa voz?

-He?- El rubio volteo y observó con una sonrisa como Elsa venía hacia el

-Hola Jack -Sonrío tiernamente la rubia

-Hola Elsa - Dijo dándole un beso en la mejilla - Como estás? Pasa algo?

-Estoy bien, el brazo ya no me duele -Sonrío

-Lo lamento, no pensé que podría lastimarte con el skate

-No pasa nada, pero creo que deberías dejar de usar el skate en el cuarto - Mencionó la rubia

-Nah, no creo que pase otra vez

-Cuando Eugine esté en el hospital te diré que tenía razón

-Vamos, Eugine no irá el hospital...en todo caso sería Hiccup - Hablo en Rubio

JELSA: UN AMOR INMORTALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora