Capítulo 3

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El sonreía recargado en su ventana mirándome fijamente yo hice una pequeña reverencia como saludo y me enderece, me comento que había pasado las cosas a esa su nueva casa desde hace un mes pero que apenas ayer por la noche había llegado el con su padre, yo me limitaba a verlo y después de unos minutos me recargue en mi ventana, parecía que ese era su cuarto pues era de un color verde muy brillante con blanco, podía ver su cama y su escritorio que se encontraba al mismo nivel mas o menos del mío, pero lo que mas atrapo mi atención fue ver que tenia una guitarra de madera, una guitarra española, la señale y el volteo enseguida a donde apuntaba mi dedo, me pregunto si sabia tocarla y negué con la cabeza, luego me dijo que si quería aprender y yo negué nuevamente, el me miro serio y sin expresión alguna haciéndome la misma pregunta que todos cuando me conocen "¿Eres sorda?" es lógico, jamás hablo y cuando lo hago son cosas pequeñas, volví a negar con la cabeza sonriente y el rio bajo diciendo que estaba nervioso por mi respuesta, escuche un grito de parte de un hombre, al parecer su padre, para que lo ayudara con las cajas a acomodar las cosas, el se disculpo conmigo juntando ambas manos en frente y sonriendo de lado, realmente es lindo y esos hoyuelos que se forman en sus mejillas son tiernos, escuche como bajaba las escaleras y decía que debían visitarnos como buenos vecinos, yo reí ante ese comentario y me dirigí nuevamente a mi escritorio, saque de nuevo mi bloc y comencé a escribir mientras tomaba agua de mi botella.

" Todo sucede por una razón. Las tragedias y desgracias cotidianas son acontecimientos significativos, lo que lleva a una conclusión ideal. Teniendo esto en mente, probablemente nunca fue una desgracia sin sentido. Todo sucede por una razón, algún día esto también tendrá un resultado muy hermoso " escuche el timbre de mi casa sonar asique baje las escaleras tranquilamente después de guardar mi escrito en el cajón del escritorio, abrí la puerta y vi a un señor con cabello castaño y ojos azules, bastante alto pero delgado con una canasta de fruta en sus manos, detrás de el apareció Dylan con una sonrisa de oreja a oreja, volví mi vista al señor y este se presento como Charles Schneider, me tendió la mano y la tome respetuosamente, me presente solamente con mi nombre y este sonrió diciéndome que ese arreglo frutal que traía era para presentarse como nuevo vecino, según yo debería ser al revés... me pregunto por mi madre y yo negué con la cabeza haciéndole saber que no estaba, dijo que en un rato pasaría a saludarla y con eso dio paso a su casa, Dylan me miro riendo un poco diciendo que me había escuchado hablar dos veces y decir lo mismo, mi nombre, no soy una chica mal educada, al menos me presento, el se fue de nuevo a su casa y yo cerré dando pie a subir las escaleras, cuando pase por delante del cuarto de mi madre vi que el plato estaba vacío y sonreí recogiéndolo para llevarlo abajo, cuando estaba a medias escaleras mi mamá salió de nuevo arreglada con una sonrisa diciéndome que iría con sus amigas a tomar un café para distraerse yo asentí y ella bajo rápidamente las escaleras para salir azotando la puerta, su problemas es que se encariña rápido y realmente es malo, solo espero que cuando llegue no traiga consigo a otro hombre que acaba de conocer, subí a mi habitación y me senté en mi escritorio a leer un libro, Bloom llego restregándose contra mi pierna y luego brinco a mis piernas, lo acaricie suavemente mientras leía y este ronroneaba, antes tenia un perrito que duro doce años a mi lado pero llego un momento donde no quería que sufriera y bueno... el resto se volvió doloroso, a lo lejos escuche una canción muy linda en guitarra asique me levante y me asome a la ventana, siempre pierdo la noción del tiempo y lo noto cuando ya es de noche, vi hacia el cuarto de Dylan pero sus cortinas estaban cerradas asique me limite a sentarme en el marco de mi ventana y cerrando los ojos para apreciar la música, después de un rato el silencio domino el aire y al abrir los ojos y dirigir mi vista hacia su habitación me di cuenta que el estaba mirándome, me quede sorprendida puesto que no hice ruido alguno para molestarlo, hice una pequeña reverencia con mi cabeza en forma de disculpa y el rio diciéndome que se dio cuenta de mi presencia debido a una silueta a través de su cortina y vino a ver que era, escuche nuevamente el timbre de mi casa asique ambos bajamos la mirada para encontrarnos con su padre en la puerta.

Baje de mi ventana y las escaleras y abrí tranquilamente pero esa tranquilidad se esfumo al ver a mi mamá y el señor Charles mirándose el uno al otro, el señor se presento y mi madre lo hizo de igual manera invitándolo a tomar una taza de café que el acepto gustoso, subí las escaleras dejándoles solos y mirando con tristeza a mi madre, espero que no se enamore de el, una vez en mi cuarto vi a Dylan sentado en mi silla leyendo mi libro a lo cual apresure el paso quitándole el libro y golpeándolo en la cabeza "¿Que haces aquí?" Dije un poco enojada, no me molesto del todo digo... no es que estuviera leyendo pornografía o algo parecido el me miro sorprendido y me comento sobándose la cabeza que por fin había escuchado mi voz con otra frase "Es suave y dulce" esas palabras me tomaron de sorpresa pero sonreí y me senté en mi cama, al parecer tengo un vecino ladrón, entro sin que lo notara, abrí mi libro para seguir leyendo mientras el le hacia mimitos a Bloom, ese gato se va con todos, comenzó a ver todos mis libros hasta que se detuvo en uno sacándolo de su lugar y mostrándomelo, me pregunto si sabia el lenguaje de señas de los sordos a lo que asentí, tenia una amiga con sordera por ese motivo lo aprendí, Dylan me pregunto si se lo podía prestar y yo asentí sin entender hasta que me explico que como no hablo porque no me gusta aprendería ese lenguaje para platicar mas, me dijo que leía mucho y que debería ser interesante hablar conmigo, escuche la puerta de la entrada y ambos nos asomamos viendo como nuestros padres se despedían y el señor Charles se adentraba en su casa, el salió por mi ventana saltando a su cuarto mientras reía, giro sobre sus talones diciéndome que nos veríamos mañana, mi voz salió sin mi permiso preguntándole por su madre a lo cual el se fue, creí haber preguntado un tema tabú para el pero al rato volvió con una foto y me explico que había muerto hace ya unos tres años, yo coloque un semblante triste y puse mi mano en mi pecho del lado del corazón y luego en el pecho de el, dándole a entender que lo sentía, el me miro sorprendido, su padre lo llamo para cenar asique se fue acomodando la foto de su madre en un mueble, yo baje a la cocina a preparar la cena, subí las escaleras tocando la puerta de mi madre y esta me contesto con un "Ya voy" baje de nuevo y comencé a servir la comida en los platos y sentándome en la barra, mi madre bajo y me comento que el Señor Charles era muy divertido y que se había mudado aquí por su trabajo el cual era ingeniero de diseño de mecatrónicas y robótica, lo que mas me sorprendió fue que podría ser un gran amigo con el cual hablar, sonreí ante lo que dijo mi mamá y después de una larga platica por su parte se subió a dormir, subí las escaleras cansada y al llegar a mi cuarto me deje caer de espaldas sobre mi cama, al otro lado de mi ventana escuche decir a Dylan un hasta mañana adormilado yo simplemente me limite cerrar los ojos y descansar.

¿Conoces El Amor Verdadero? [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora