Secretos Ocultos.

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"Cada momento a su lado"

Un escalofrío de nerviosismo me recorre el cuerpo de pies a cabeza en el instante que la idea se cruza en mi cabeza.

Mi pecho se contrae, mis manos se sienten entumecidas y el pánico atenaza mis entrañas con violencia cruda.

Estoy consiente de que un nudo se estruje adentro de mi garganta. Los sentimientos encontrados consiguen que me sienta más vulnerable que nunca. He sido engañada por un largo tiempo, y eso hace que me sienta traicionada.

Decido que mis ojos y los de él puedan hablar por si solos. Su gesto esta frío.

Tiene los labios apretados en una línea recta, y se que espera alguna reacción mía, pero realmente ni yo se que hacer, ni decir.

Traga duro para poder abrir los labios:
Di algo, por favor.

Niego varias veces, sin saber que decir. Apenas puedo analizar la situación, se siente como un balde de agua fría.

— Por eso mismo nunca te lo confesé, tenía miedo de que te enojaras conmigo. — las manos de Truth intentan tocar mi rostro, pero me aparto con brusquedad.

Su ceño se relaja, parece haberle afectado mi comportamiento.

— ¿P-por qué no ayudaste a mi papá? — digo. Mi voz parece haberse roto, porque suena como tal.

Vuelve a tragar duro,y su torso se tensa.

— Yo quería, pero no puede ayudarlos a ambos. — inhalo aire para mantenerme estable, sigo estando herida.

— ¿Por qué?

Uno.

Dos.

Tres.

Y mi pregunta aún no tenía respuesta. Miro a Karan y a Eli, quienes comparten miradas.

— Genial... — con mi propia ayuda me levanto del suelo. Estaba harta de que me ocultaran cosas. — ¿Cómo quieres que confíe en ti? ¿Eh?

Ahora, él también se levanta para quedar cara a cara. Su respiración es pesada, sus ojos me observan con preocupación.

— No quiero mentirte. Ya no voy pienso ocultarte cosas. Y-yo ... estaba con una chica. 

La punzada de traición se hace más  grande. Al parecer la gente que me rodea es hipócrita conmigo. Sus palabras me paralizaron, pero no deje que ninguna lagrima se derramase enferme de él.

— Decidiste irte sabiendo lo que iba a suceder. Sabias sobre lo de Valentina, y ni por eso regresaste. ¡Eres un maldito enfermo! — sentía la furia recorrerme la  cara.

— Eso no es cierto. Yo no sabia lo que iba a pasar, no soy maldito cobarde. — encierra en puños sus manos.

— ¿Hablas enserio? — suelto una risa irónica. Y eso hace que ahora él también este enojado — pues demuestras lo contrario. Decidiste meterte entre las piernas de una tipeja, mientras mataban a Valentina.

— Si me metí entre las piernas de alguien es asunto mío y de nadie más. — jalo las puntas de su cabello. — no pienso pelear contigo. Voy a protegerte, no importándome si estas enojada conmigo.

— Se protegerme yo sola, lo hacia antes de que aparecieras para arruinar mi vida. — esas palabras fueron la gota que derramo el baso para que Truth pateara un mueble.