NUNCA OLVIDARÁS ESTONIA

Viaje a Narva

- Cassie despierta el avión está por despegar y quiero que veas por la ventana la ciudad de Santiago.

- Padre, ¡Esas son tonterías! ¡Yo no quería salir de acá y perder todo!

- Cassie, te enamorarás de Narva, y saldrás a caminar por sus paisajes todos los días, disfruta estas experiencias hija. (Cassie observa por la ventana las esponjosas nubes....Silencio.)

Realmente mi padre siempre creerá que es lo mejor en la existencia planetaria, Su nombre es Andrés Errázuriz, pues él es "el súper hombre" , el más inteligente del planeta, pero estaba bastante enojada, ya que he tenido que dejar a mi barrio y mis grandes amigos de toda la vida. Ya no podré ir a la plaza donde acostumbraba a esperar a Robert, el chico de mis sueños; lástima que se enamoró de una de las peores enemigas mías: Coty. Y resta decir que es una de las razones por la cual odio mi nombre, pues Coty y Cassie son bastante parecidos. Creo que no vale la pena contar que pasó con ella para catalogarla de poca cosa, ni menos porque todo el colegio la apunta con sus dedos en son de vergüenza. Pero lo importante es que estoy rumbo a Narva, una ciudad desconocida y que además mi padre conseguirá el mejor trabajo de su vida: Empresario en el proyecto Kattie's. Una empresa que ni el perro de mi próxima vecina conoce; aun ello como mi padre adora a su amigo empresario, él se siente orgulloso de trabajar allí.

No puedo dejar de contar sobre mi madre. Su nombre es Mary y su apellido Hood. Mi madre nació en una familia adinerada, por ello mi padre aceptó casarse con ella, esa es mi hipótesis familiar aunque ambos dicen que no es así. Es una mujer moderna, es sofisticada pero contemporánea, ama el arte y es una buena madre. Siempre está durante horas en la noche logrando escribir proyectos de cultura para centros de intervención, pero eso ya cambió, ya que será asistente en la nueva empresa de mi padre. Veremos que es mejor.

"Cada día es un sueño, es un camino, una idea que lograr, estamos llenos de objetivos, siempre debemos elegir."

Estoy bastante entusiasmada aunque triste a la vez. Solo yo comprendo mis estados de ánimo y me ha hecho pensar que soy un tanto egoísta. El avión está un poco cálido, algo que me molesta, aunque nuestro destino está en época de verano al parecer. Dicen que Narva se llama así por un río y bueno mi padre me contó que fue destruida en la segunda guerra mundial, me pareció muy interesante pero el nombre de esta ciudad me suena más a larva que Narva. Lo peor es que tendré que estudiar allá y aprender su idioma. Pensándolo bien es bastante complicado. Me imagino yo hablando con extraterrestres en otro planeta. Este es un mundo de locos. Que ciudad más complicada.

Mi padre sentado con mi madre en los asientos delanteros, yo atrás escuchando música. Observo a la joven azafata, muy fina, bella, rubia, ojos azules, por supuesto que alta. Al lado mío un señor extremadamente alto, me fijé en su estatura, ya que sus piernas se doblan con un esf uerzo inhumano por estar sentado. Una señora de reojo me observa puesto que yo soy más sapa que ella. Siempre he sido una persona que mira el alrededor atentamente sin que se vaya ningún detalle. Antes de subir al avión practique más de tres veces el ejercicio de emergencia ante un accidente. Tanta serie en la televisión sobre caídas en islas me ha dejado mal. Me imagino yo, infeliz buscando rescate. Ni siquiera sé cómo trepar un árbol. Simplemente moriría en el primer día de naufraga. Bueno además no sé na dar. ¡Uff! Todo mal.

Me acomodo en el asiento, mi padre conversan sobre dinero, nuevos proyectos e ideas. Mientras tanto yo escuchando la sinfonía de Beethoven me anunciaba que era momento de cerrar los ojos y descansar.

Narva

Ya estoy en Estonia, me parece todo emocionante. Cuando arribamos al aeropuerto, luego
de los cuatro golpes en la cabeza que mi padre me dio porque no despertaba, pude apreciar a lo lejos , dos señores que no sé qué decían pero que por las señales que hacían con sus manos me
decían que caminara rápido, entonces así lo hice. Tomaríamos un taxi que nos llevaría a destino.