EMPEZANDO A VIVIR [EDITANDO]

CAPÍTULO 14

Estoy corriendo, casi no tengo aliento....estoy a punto de desmayarme...el panorama en el que me encuentro no es el mejor.
  Estoy en el Distrito 12...todo está en ruinas, estoy perdiendo la conciencia, todo me da vueltas y de pronto veo a Rue con la lanza clavada en su pecho.
-Pudiste salvarme- dice-¡Pudiste salvarme y no lo hiciste! ¡eres una asesina!-continuó.
-¡No! ¡No es real!.
  De repente cambio todo, ahora me encuentro en la puerta de mi antigua casa... voy hacia ella despacio, la empujo y entro, todo se ve igual... Buttercup está al lado de la puerta.
  Cuando paso al maldito gato escucho un llanto en la parte de la cocina, que creo saber de quién proviene.
  Una cabellera rubio entra en mi vista, se me llenan los ojos de lágrimas.
-Pa..tito- logro decir entrecortadamente.
  El levanta la vista.
-Katniss...-me contesta con una lleve sonrisa.
-Lo siento...- ya no puedo más y me deje caer al suelo, Prim se arrodilla frente a mi.
-Katniss.. no fue tu culpa, no dejes que tus pesadilla te influencien.... Rue, Finnick....yo no hemos muerto por tu culpa- toma aire- la vida es dura pero tu lograste que Panem se libere...Rue, apuesto que ella piensa la mismo...debes recuperarte y ayudar a Peeta.... ahora más que nunca.
  Despues unos Agentes de La Paz entran y agarran a mi hermana llevándosela, yo grito y grito.
-¡Katniss! ¡Katniss!.
  Mi impotencia crece y crece al saber que yo no puedo hacer nada.
-¡Prim! ¡Déjenla!.
   Y todo de volvió negro.
  Grito a más no poder, todo está oscuro me doy cuenta que estoy en mi habitación y que entra Haymitch.  No puedo parar de llorar.
-Katniss, shhhh- dice abrazandome- solo fue una pesadilla- continúa.
-No pude salvarla- digo entre sollozos.
-Ven conmigo.
  Toma mi mano y me lleva a la cocina, mi sirve café mientras estamos en silencio.
-¿Y Peeta?.
   El me mira.
-No ha salido todavía, Aurelius lo vera al mediodía, es mejor que no estés en ese momento.

 Estoy por replicar pero antes me manda una mirada severa. En estos momentos no estoy para discutir así que me callo.

 Al mediodía...

Cuando el doctor viene a la casa Haymitch y yo salimos a dar un paseo.

-¿Haymitch?.

-¿Si?.

-¿Crees que alguna vez superaremos a los fantasmas del pasado?.

-Nadie puede superarlo, sólo hay que aprender a vivir con ello. Tú tienes a Peeta, será más fácil. Yo estuve toda mi vida sólo y por eso terminé así, como me vez ahora- dijo señalándose a si mismo- Katniss, eres una chica valiente- hace una pausa- valiente, testaruda, ciega...

-Ya, entendí.

-Bueno, déjame terminar. Eres todo eso, bla, bla, bla, tienes a Peeta que te protegerá, el apoyo de muchas personas, Snow se fué, muchas cosas cambiaron. Saldrás adelante.

-Eso espero.

 Seguimos caminando viendo el paisaje del Distrito 4 hasta que decidimos volver. Cuando abrimos la puerta vemos al doctor Aurelius serio. Esto no debe ser bueno.

-Debemos hablar- es lo primero que dice al vernos.

 Nos vamos el living donde empieza a hablar.

-Recayó, creo que la situación es peor de cuando vino del Capitolio.

 Se me viene el alma a los pies. Esto no puede estar pasando. Me falta el aire y las lágrimas no tardan en venir. Trato de contenerlas con éxito.

-¿Qué quieres decir?.

-Peeta tiene que ir al Capitolio para que sea tratado temporalmente hasta que se recupere.

-¡No!.

-Katniss, escucha, es hasta que esté bien.

 Subo a la habitación y lloro. Lloro hasta que ya no queda nada. Lloro hasta que me quedo dormida.

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Tiempo después...

Estoy sentada en el jardín de mi casa, viendo las flores que plantó Peeta.

 Hace unas semanas había vuelto del Distrito 4.

 En todo este tiempo no pude ver a Peeta. Sigue con sus tratamientos en el Capitolio, su avance ha sido escaso. Por no decir que no hubo avance. Siempre me dicen que tengo que ser positiva, pero a medida que pasa el tiempo, voy perdiendo las esperanzas.

 Siento que voy a volverme loca. Más de lo que estoy. De repente tengo gánas de vomitar, corro por el comedor pasando delante de la cocina donde Sae prepara el desayuno. Llego al baño y descargo lo poco que comí anoche.

 Luego de ese incidente voy a la cocina y cuando estaba por sentarme siento que pierdo las fuerza necesaria para mantenerme en pie..., pierdo el equilibrio y todo se vuelve negro.

Días más tarde del incidente en el hospital...

-Tienes que decírselo Hyamitch.

-¿Por qué siempre tengo ser yo?.

-Porque lo digo, ahora cuando despiertes irás y se lo dices. Punto.

-Parece fácil.

-Lo es sólo tú haces problemas.

-Claro, porque no esta en riesgo tu integridad física, no sabemos como reaccionará.

  Es lo único que puedo escuchar Mi cuerpo me pesa. No puedo moverme. Trato de levantarme pero lo único que logro es mover un poco el brazo y soltar un quejido.

-¡Haymitch, se está despertando!. ¡Llama a la enfermera!.- ahora puedo distinguir la voz peculiar de Effie

-Si, si, voy.

 Luego de eso siento unos pasos y unas manos que toman las mías.

-Tranquila Katniss, estás todavía en cama por la morfina, cuando venga la doctora, podrás levantarte.

 Siento que se abre la puerta.

-Tengo entendido que la paciente Everdeen se está despertando.

-Si, pero no del todo.

-Ya veo, déjenme que la examine- sus manos recorren mi cuello, muñeca y hace los demás controles rutinarios- está bien, queda que despierte y podrán hablar con ella tranquilamente.

-¿Cuándo se podrá ir?- pregunta Effie.

-Cuando despierte, ya puede salir del hospital. Aunque deberá alimentarse bien y llevar varios cuidados. El desmayo se debe al mal cuidado que lleva, y más en su condición- ¿condición?.

-Claro, nosotros nos encargaremos.

  Unos minutos después, voy abriendo los ojos lentamente y me encuentro con las caras preocupadas de Haymitch y Effie.

-¿Qué ha pasado?- logro preguntar.

-Mira Effie, la bella durmiente ha despertado- dice con su típica sonrisa.

-Me alegro que hayas despertado Katniss- dice poniendo una de sus manos en mi mejillas maternalmente- Ahora los dejaré solos para que hablen- su semblante se vuelve serio pero trata de mantener su sonrisa y se va, no antes de darme un beso en la frente.

-Chica En Llamas...

-Ve al grano, no estoy de humor para tus jueguitos.

-Estás embarazada.

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