Capitulo 3: Primera cita

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Eran las cinco de la tarde, había estado lloviendo toda la mañana, pero aún así Jonathan no iba a dejar plantada a Tamara. Cuando fue a recogerla ella estaba en frente de su casa, se la veía nerviosa igual que a Jonathan y cuando llevó hasta ella la saludo.
Le enseñó los mejores lugares de la ciudad; y a las seis y cuarto se sentaron en un banco a descansar.

-¿que opinas de la ciudad?-le preguntó Jonathan.

-es genial, no pensaba que sería tan bonita.-sonrió.- ¿y ahora que?- preguntó emocionada.

-ahora ¿que te parece si vamos a comer algo?-

-me parece genial, me muero de hambre.- bacilo

Jonathan se levantó de un salto y le hizo un gesto con la cabeza para que se levantara, y cuando lo hizo empezó a seguir a  Jonathan, y este hizo un  amago de coger su maní, estaba muy nervioso, y sólo la rozó ella la notó, se paro le miro y le preguntó a ver si todo iba bien, y el le dijo que si, que únicamente se había tropezado.

Cuando llegaron a la cafetería, Jonathan cogió un  mesa y se acerco a la barra a pedir y al rato el camarero trajo unos chocolates calientes y unos donuts.

-se que no es lo mas lujoso del mundo, pero es la mejor cafetería de la ciudad.- dijo Jonathan.

-Tiene toda la pinta.- rió.

Tamara probo el chocolate y le encanto, pasaron un buen rato en la cafetería y después de eso Jonathan la acompaño a casa, cuando llegaron a la puerta de casa de Tamara, Jonathan no quería despedirse pero tenia que hacerlo.

-Bueno, ya estamos aquí.- dijo Tamara.- lo he pasado genial, gracias, sonrió.

-Yo también, ¿nos vemos mañana?- pregunto un poco avergonzado.

-si.- dijo con una amplia sonrisa, antes de entrar a casa, Tamara se quedo de espaldas a Jonathan dudando, se dio la vuelta muy parido y le dio un beso en la mejilla.- gracias por todo.-

-de... de nada...- dijo muy nervioso por el beso, Tamara sonrió, le guiñó un ojo y entro en casa.

Jonathan todavía estaba en shock, pero en esos momentos era el hombre mas feliz del mundo, esa noche solo podía pensar en volver al instituto para volver a ver a Tamara, quería verla!, necesitaba verla!pero antes de verla, tendría que pasar toda la noche.  

Hasta que la muerte nos separeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora