♦Pure Love Restrain♦«GureShin»

Discusión

-De que asunto se trata.- respondí algo nervioso ante mi padre, si el necesita hablar conmigo ha de ser algo muy serio.- Qué ha ocurrido.

-Shinya, tu hermano Kureto me a hablado de un tema grave.- respondió Tenri con severidad, ¿Ahora que dijo Kureto?.- Shinya ¿Me puedes explicar el por qué te gusta un hombre?, eres el prometido de mi hija Mahiru, eres un Hiragi.

-Debo confesarle que Mahiru no me gusta.- hablé simulando seguridad, ¿Me separaran de mi Guren? No, eso nunca lo lograrán.- La relación con Mahiru es una simple actuación.

-¡Debes casarte con Mahiru!.- gritó bastante enfadado por mis palabras.- ¡Nunca te crié como una niña! ¡Como puedes deshonrar el apellido Hiragi!

-¡Nunca me casaré con ella!.- ahora grité bastante fastidiado ante aquellos reproches, yo sólo me casaré con Guren.- ¡Y si padre soy gay! ¿Algún problema?, ¡Y no me importa el apellido! ¿Ahora si pertenezco a esta estúpida familia?, ¡Todos son unos idiotas!

No pude evitar desahogarme, esta "familia" era una farsa, yo no pertenezco aquí, odio a esta familia por no aceptar mi preferencia, pero eso me costo caro, ahora me hallaba en el piso con una marca de un golpe en mi mejilla, ardía bastante, dolía pero no tanto como el dolor que he albergado por tantos años.

Debo alejarme de aquí, o me apartarán de mi Guren...

-¿Quién es el que te gusta?.- preguntó Tenri dedicándome una mirada de odio y asco.- ¿Podrías darme el nombre?

-Nunca...- contesté levantándome del piso, tratando de no llorar y gritar.- No soy estupido... No lograrás conocer su nombre, ¡Al diablo todo!

Me dirigí muy enfurecido a la puerta de la oficina, al abrirla me encontré con los chismosos de Seishiro y Kureto, pobre debió no haber aparecido...

-Tú, Maldito estupido.- señale a Kureto encaminandome hacia él.- ¡Estas muerto!

-Shinya calma-

No lo deje terminar puesto que ya me encontraba golpeándolo en el piso, intercambiábamos golpes y patadas, escuchaba los gritos de Mahiru, los regaños de Seishiro y los insultos de Tenri.

Kureto me las pagaría, no me podía separar de Guren, esta vez no me arruinaría la vida, no me haría sentir inferior, esta vez...te mataré. Uno, dos y tres golpes en la caja torácica y el pobre estaba inconsciente, no pude terminar debido a que Tenri dirigió su puño a mi otra mejilla, Seishiro y Mahiru me apartaron de Kureto.

-¡Tu comportamiento es inaceptable!.- reclamó Tenri bastante enojado por aquella escena.- ¡Llamen al doctor, Kureto tiene algunas costillas rotas!.- esta vez le habló a Mahiru quien ahora trataba de llamar al médico.- ¡Y tú deberás disculparte con tu hermano cuando despierte!

-El no es mi hermano, ni tú mi padre, ¡ni nadie de aquí es mi familiar!.- grité fuertemente llamando la atención de trabajadores de la familia.- Así que no le pediré disculpas.

No aguante más y me dirigí a las escaleras para encaminarme a mi habitación, no tenía ánimos de estar en esa sala, no quería hablar con Tenri y no quería terminar de matar a Kureto.

- ¿A donde vas?.- me pregunta fuertemente Seishiro mirándome con desprecio.- Padre deberá reprenderte por tus acciones.

-¡Voy a mi habitación estupido!,
¡No aguanto ver sus horribles caras mirándome!

-¡Shinya! ¡No saldrás de esta casa en cinco días!.- dios, Tenri vuelve a amenazarme con eso...

No me importó lo demás que me reprochaban y tiré fuertemente mi puerta de cuarto, de la ira comencé a llorar, estaba rojo por mi nerviosismo, mis manos temblaban por mi ansiedad, ¿Qué acabo de hacer? ¿Qué hice?, otra vez me había salido de control, pero no podía permitir que me prohibieran salir de la casa, no iba darle gusto a Mahiru de quedarse con Guren, él sólo debe apreciarme.

Despues de pensar mi situación concretamente, decidí tomar mi maleta con mis útiles escolares, un morral con bastante ropa, tarjetas débito, dinero guardado y otras cosas para sobrevivir fuera de casa, no me quedaría aquí después de la fuerte discusión.

Abrí la ventana y me tiré sigilosamente cayendo al césped, me camufle por entre los arbustos y árboles y burle a toda la seguridad logrando salir de aquella horrenda mansión.

-Por fin libre...libre para estar con Guren...

Me dirigí a la ciudad para encontrar un lugar en donde quedarme hasta conseguir una casa o apartamento, encontré un pequeño pero elegante hotel para quedarme esta semana, page toda la suma y me dirigí a la habitación

La habitación era espaciosa, el piso era de madera fina y resistente, las paredes eran de un color blanco con detalles plateados, era bonita y era iluminada por las grandes ventanas que posee.

Termine de organizar mis pertenencias y anoté lo que debía comprar para después, debía dirigirme a un cajero para retirar una gran cantidad de dinero para sobrevivir mientras conseguía trabajo.

Después de comprar alimentos y llevarlos al apartamento, me dirigí hacia la casa de Guren, quería verle aunque fuera de lejos, ahora podría vigilarlo todos los días a cualquier hora, pero por algunos días debía desaparecer y no ir a clases, de seguro Tenri me encontraría y me reprendería.

Ahora esperar a que el siguiente día llegara...