133.

3.9K 102 3
                                    


Se despertó entre gritos y sirenas de ambulancias, no sabía dónde estaba y le dolía demasiado la cabeza. Abrió los ojos y las luces hicieron que sus nos lloraran. Cuando ya se acopló, miro a su alrededor. Al parecer, estaba dentro de una ambulancia y sobre una camilla así que se levanto y respiró tres veces antes de salir del auto.

—¡Niall cálmate, maldita sea! —Fue lo primero que llegó a sus oídos.

Se sujetó de un objeto del cual no sabía él nombre y sus pies apenas llegaron a pisar la acera, pues su mejor amiga y su hermano llegaron a ella cual rayo, diciéndole que vuelva y se recueste.

—Me siento bien, en serio —Dijo acariciando con el pulgar la mano de Allie que se había entrelazado con la suya—... él... ¿Dónde está? —Pregunto algo temerosa.

—Dan-

Scott no pudo terminar su oración, pues una figura rubia y ojos azules la arribo sin previo aviso, abrazándola de la cintura y hundiendo su rostro en el cuello de ella.

—Es-estas bien... —Susurró mientras sorbía por la nariz.

Danielle iba a hablar pero vio a alguien salir corriendo de la iglesia, sin su saco y el cabello revuelto. El aire se le fue al instante. Tragó fuerte y se alejó lentamente de Horan que apretó la mandíbula al ver quién iba hacia ellos.

Danielle caminó lentamente hacia él, mientras el corazón se le estrujaba y sentía que iba a estallar en llanto en cualquier momento. Matthew no se controló más y se tiró a sus pies, literalmente. Lloro a sus pies, mientras susurraba cosas que Danielle no lograba entender.

—T-te lo supl-lico, escúchame, p-por favor —Dijo aún a sus pies—. Te amo, no es lo que tú c-crees...

—¡Deja de mentir, por una vez en tu vida! —Estalló, no se contuvo más—. ¡Me mentiste todos estos meses, y no puedes negarlo! —Dijo cuando Matthew se levantó, empujándolo de los hombros—. ¿En qué te falle, desgraciado? —Susurró, mientras miraba el anillo que aún estaba en su dedo corazón y jugaba con este.

—Danielle...

—Creí... creí que eras el amor de  mi vida y el padre de mis futuros hijos, gracioso, ¿no crees? Que la mujer a la que me describiste como una completa y rotunda zorra sea el que te los dé, y no yo —Tragó fuertemente—. Te creí, te creí cuando dijiste que cambiarías, que realmente te arrepentiste cuando me... me golpeaste y me gritaste cuando le había dicho "te amo" a Liam...  —Sorbió por la nariz, se quitó el anillo y le dio una última mirada a Matthew que estuvo llena de sentimientos, todos y cada uno de ellos—. Yo realmente espero que te conviertas en mejor persona y dejes de causar pena, dale esto a alguien a quien realmente ames y soporte a una persona como tú.

Le tendió el anillo en su mano, que este apretó con fuerza.

Y se fue de ahí, y él no fue detrás de ella.

Instagram - m.eDonde viven las historias. Descúbrelo ahora