Sexo en el Convento [Sin Acabar]

2.Y llegó el tranquilo invierno

Llegó y se llevó el interés de Azi por los chicos. De vez en cuando, en alguna borrachera, anhelaba a algún chico especial que recordaba con cariño, como uno que conocía de su pueblo con el que tuvo un romance sin un solo beso de por medio, pero intenso por sí solo, y fugaz. O besaba intensamente a algunos chicos durante los efectos del líquido de la falsa felicidad momentánea. En su estado sobrio no surgían esas ganas de besar o de compartir su tiempo con un chico con el que despertar un sincero amor, y eso que algún pretendiente que le gustaba tuvo. Quizás por su inseguridad era por lo que les daba escusas y largas a todo aquel que la ofrecía pasar un buen rato, tanto en el mal sentido como en el bueno.
Ella misma se cuestionaba aquello. No era normal. Falta de autoestima, quizá.
A veces sentía algo de interés por quien seguía hablándole después de que ella pasase. Es decir, algún chico que a ella le agradaba y además como aunque le agradara ella no solía contestar por chat, a pesar de llevar una conversación amigable por el momento, él siguiera insistiendo sin tener en cuenta su dignidad. Alguien que le demostrara verdadero interés. Sin embargo, Azi no tenía límites en ignorar a muchachos y todos se acababan dando por vencidos.
¡Cosa que tampoco le disgustaba a ella!

<<¿Seré asexual...? Tal vez es que en mi infancia estaba obsesionada con el tema de chicos, gustar, novios..por influencia de la TV.
O tal vez nace ese rechazo de mi gran coraza de inseguridad con mi persona y creo que no merezco a nadie de los que me gustan. Sinceramente, tampoco me atraen demasiado, a veces sí pero sólo en ocasiones... Es que soy rara de cojones, pero para no entenderme ni yo...>>

Eran solo unas pocas de sus opiniones de autocrítica, que a veces acaban con "me gustan lo chicos, está clarísimo", o "soy un poco asexual pero es porque no me quiero y dudo que otros lo hagan" o " paso de que me hagan daño".