El jinete debe estar calmado y relajado en la silla, ya que cualquier estado de tension o miedo es percibido en seguida por el caballo. El uso adecuado de las manos es un factor vital en la buena equitacion. Cualquier tiron fuerte de éstas puede danar y echar a perder la sensibilidad de la boca del caballo. Unas manos ligeras pero firmes en las riendas son de suma importancia.