Tan Grande como el Mar

83 7 3
                                    

Pov Lucy:

Natsu y yo nos fuimos a la playa y Wendy se quedó en otra parte no muy lejana de la playa.

Estuvimos un rato calados mientras paseabamos y mirabamos el mar azul pero no tardé en darme cuenta de que Natsu me cogia de la mano con suavidad.

En aquel momento sentía una calidez tan dulce que cerré los ojos para contener por mas tiempo esa sensación, para que pudiera recordarlo.

Me detuve en seco separandome de la mano de Natsu y mostró su preocupación hacia mí.

No puedo pensar en él de esa forma. No puedo tener el lujo de enamorarme. Mi secreto... mi propia existencia era un peligro para mi... y para él también.

Wendy y yo somos las únicas Hadas de Mar que existían en el mundo. No puedo ponernos en peligro con el mundo terrestre aunque en parte sea nuestro habitat natural.

- ¿Que te pasa Lucy? ¿Estás bien?

Me acarició el pelo y luego bajó por mi mejilla. Me estemecí. Quería alejarme... no, debía alejarme, pero... quería seguir quieta, dejandome acariciar por él. Me sentía tan bien. Me sentía a salvo. Ni siquiera en...

¡ESPERA! ESTO TENGO QUE DECIRLO EN VOZ ALTA!

- Natsu... tengo que decirte que...

- ¡Espera! - dijo casi gritando.

¿Que era eso tan impirtante que tenía que decirme?

Pov Natsu:

Vale estoy listo. Voy a decirselo. Voy a decirle que...

- Me gustas.

No obtuve respuesta y empezé a preocuparme.

- Me gustas, Lucy.

Nada. Seguía callada. ¿Eso significa... que no le gusto?

Di media vuelta sin saber muy bien que hacer, pero entonces sentí el agarre de la mano de Lucy en la mia. Cuando me di la vuelta, me vi atrapado en un fuerte abrazo.

Me puse rojo al sentir el pecho de Lucy contra el mio. Podía oir el latido de su corazón.

- Natsu...

Utilizé mi mano para levantarle tiernamente la cara. Sus ojos color chocolate se cristalizaron y yo le regalé una sonrisa.

- Natsu... tú... - se le escapó una lagrima y yo se la limpié con mi pulgar. - Quería que supieras... que nunca me he sentido a salvo por nada. Ni siquiera en el mar... desde que era pequeña... tenía miedo... de morir... de cualquiera que quisiera extiguir mi especie. Miedo de ir a cualquier lugar por el simple hecho de existir... sin saber siquiera porque he nacido... ni para qué.

- ¿Eso es lo que siente un animal... cuando sabe que está en peligro de extinción? - dije apenado.

Ella siempre a vivido con miedo. Sin nadie a su lado. Sin nadie como ella.

Esta vez fui yo quien la abrazé. Era un abrazo fuerte pero no agobiante, sino uno reconfortante. Lleno de comprensión y lástima al mismo tiempo.

- Tanto tiempo sola... ¿Sabes? - dije separandome de ella pero con nuestros rostros cerca. - No somos tan diferentes. Yo me sentía igual hace un tiempo.

Ella me miró fijamente a los ojos y me sentía tan arropado con su presencia que sentía que podía contarle cualquier cosa.

- Cuando mi padre murió... y cuando Zeref se marchó... también me sentía solo. Romeo era demasiado pequeño para cuidarse y no podía alimentarnos de no ser por los robos. No me siento orgulloso pero al menos se lo robaba a gente... que no lo merecía. - me quedé callado un momento y seguí con la historia. - Un día cuando Romeo y yo nos preparabamos para robar a unos piratas, el capitan nos descubrió, pero no nos hizo nada. Ese hombre se convirtió en mi capitán, Jellal Fernandez, nos acogió a Romeo y a mi y nunca volvimos a pasar hambre. ¿Pero sabes?

- ¿Qué? - me preguntó con interes.

- No era eso lo que me hizo sentir bien. Lo que pasó, es que me dio un hogar, una familia... (Grimore Sorciere) (¿se escribe asi?) Y jamás volví a sentirme solo.

Sus ojos mostraban impresión e incredulidad. Le sonreí tiernamente, mostrandole toda mi sinceridad.

- Y tú también puedes conseguirlo. A alguien que te de esa confianza, esa compañia...

Lucy me tapó la boca con un sólo dedo y me sonrió de la manera más dulce que había visto en mi vida.

- Ya lo he encontrado. - y entonces, nos besamos tiernamente frente al atardecer y el inmenso océano.

El Hada Del Mar (Nalu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora