Vampire Secret

Capítulo 14: 2009 Parte 4

Este último comentario pareció sorprenderle bastante a Ron. Tanto que se cayó al suelo, quedándose sentado. Mi mano no la soltó en ningún momento y ya... empezábamos a sudar a pesar de que hacia frío (y que éramos vampiros).

Y,justamente, cuando Ron estaba a punto de decir algo que parecía importante... entra Cory por la puerta y pega un pequeño chillido,se lleva la mano al pecho y se posa en el recuadro de la puerta. Agotada y aturdida.

''¿Ca-Caroline...?'' Me había olvidado al completo de que Cory estaba enamorada de Ron y... vernos a los dos cogidos de la mano, seguramente, no sería algo bueno para su asustadizo corazón.

Ella se llevó las manos a la cara y empezó a llorar. Salió corriendo a toda velocidad, lo máximo que podía un vampiro. Yo me disponía a seguirla pero... Ron me lo impidió:

''No vayas – me dijo – . Sé por lo que llora, no vale la pena que tengas que disculparte.''

Me quedé helada (más de lo que ya podía estar). El me tenía agarrado el brazo, parecía mucho mayor. Teníamos 11 años, pero parecía que teníamos por lo menos 16. ¿Qué era esto?¿Cuerpo de niño y mente de hombre?

''No vayas''. Volvió a decirme.

Pero algo en mi interior me decía que debía ir, que debía consolarla.Al fin y al cabo, era mi amiga y no podía dejarla tirada por Ron...o sí.

Lo que hice fue sencillo, le dije a Ron que tenía que ir al baño pero lo que hice fue ir en busca de Cory. La encontré donde solía irse cuando estaba triste; en el desván del ala norte del colegio para mayores. Estaba ella allí, tirada en un sofá, llorando... me dio muchísima pena. Me acerqué a ella y toqué suavemente su hombro...:

''Cory...- dije a la misma vez que la tocaba – Yo...''

Pero no me dio tiempo a acabar. Ella se abalanzó sobre mí, con sus ojos rojos y sus colmillos fuera. Le empezaban a salir venas rojas por la frente y sus largas uñas las clavó en mis hombros:

''¿¡Cómo has podido!? - me chilló con una voz grave - ¡Me dijiste que no eráis nada!

Me sentí sofocada y nerviosa... tenía que transformarme en vampiresa o me mataría ahí mismo pero... nunca lo había hecho antes, no sabía como tenía que hacerlo, solo pude... quedarme quieta y esperar a que alguien viniese a rescatarme... Pero nadie apareció.

Forcejeaba con Cory, ella tiraba de mi pelo con violencia, me tiraba contra los diferentes muebles viejos que habían en el ático y me arañaba lo más fuerte que ella podía. Y... finalmente, pude quitármela de encima tirándole un gran jarrón de cerámica. Se quedó mirándome durante unos segundos, después se vio como un hilo de sangre caía por su frente, puso los ojos en blanco, y cayó al suelo; no sabía si estaba muerta o inconsciente pero... yo salí corriendo de allí.¿Cory no podía entender que éramos solo amigos?¿No podía confiar en mí? De todas formas, ella estaba en el suelo sangrando y yo salía corriendo en busca de ayuda y... huyendo de ella.

Me encontré al profesor Roxi por el pasillo de la tercera planta, se vino corriendo a mi lado cuando vio que mis ropas estaban rotas y yo estaba sangrando por muchísimos sitios y en cantidad:

''No te preocupes por mí, – dije débil – Cory está mucho peor que yo. Ve a ayudarla.''

Señalé hacia las escaleras del desván. El vaciló, pero yo insistí de que debía ir con Cory, que yo estaría bien. Pero estaba realmente débil. Cuando Roxi subió las escaleras, caí al suelo, derrotada y cansada. Empecé a escuchar un ligero zumbido, algo extraño, como seres susurrándome algo y... entonces... entendí:

''Caroline...Caroline...'' Decían aquellas voces una y otra vez. Empecé a preocuparme. ¿Qué serían aquellas voces?¿Por qué me llamaban?¿Qué querían?Resolví mis dudas antes de lo que me imaginaba...

Cerré mis ojos, derrotada por el cansancio. Y empecé a soñar pero... era un sueño extraño, parecía tan real, pero tan real...

<<Volvía a tener 5 años, y estaba jugando junto con mi hermano Maric. Había una pareja con nosotros, una pareja que antes no había visto nunca.A él se le veía la cara borrosa pero... a ella, en cambio, se la veía perfectamente.

La muchacha tenía una larga melena dorada, ojos grandes y verdes esmeralda, alta, delgada, cuerpo bien formado, una graciosa barbilla puntiaguda, una nariz pequeña , boca acorazonada, y por último, pero no menos importante, su fina piel blanca que parecía de porcelana. Se veía linda y perfecta, estaba junto a nosotros y nos llamaba por nuestro nombre a las vez que nos sonreía. ¿Quién era esa mujer? Entonces... yo grité: ''MAMÁ''.Corrí hacia ella y me tiré en sus brazos, ella me elevó por los aires a la vez que daba vueltas y vueltas por el cielo. Ella decía mi nombre. Decía Caroline con una voz dulce y suave... ella... ¿era mi auténtica madre? Entonces...>>

Desperté. Pero desperté asustada e inquieta, estaba en una cama; otra vez, en la camilla de la enfermería. Pero esta vez no estaba Ron al lado mío si no... mi madre:

''¿Qué haces aquí, mamá? - dije -.''

Ella levantó la cabeza, su pelo rojo, ahora más largo, se movía lentamente con una brisa que a saber de donde procedía.

''Me han llamado – me contestó fría – diciéndome que habías atacado a una compañera. ¿Puedes explicármelo?''

Me quedé sorprendida. Yo no la había atacado, fue ella.

''Cory fue la que se abalanzó sobre mí – contesté –. Fue ella la que me hizo estar aquí ahora, yo no le he hecho daño...''

Entonces recordé que había pegado con un jarrón a Cory... me mordí el labio y noté que mis colmillos estaban fuera. Me llevé las manos a la boca, asustada. Mi madre no me dejó de mirar fijamente en ningún momento, estaba calculando cada movimiento que yo hacía, para averiguar si mentía:

''Caroline – dijo en tono muy seco –, Cory... ha muerto, de nuevo.''