The Maze Runner/ La única en el Claro

¿Ben?

Estaba cansada y la espalda me dolía muchísimo. Me incorporé poco a poco, con cuidado de no hacerme daño. Miré a mi alrededor y estaba en una de las cabañas en una amaca, todas las demás estaban vacías y fuera se oía un murmullo. Me giré para ver el exterior y varios chico pasaban trabajando y hablando felizmente.Me pasé la mano por la frente pensando en el recuerdo que me golpeó anoche cuando escuché el nombre de el moreno. Bufé enfadada, no me agradaba acordarme de algo así sin saber el resto de la historia...

Por la puerta entró Newt con una brillante sonrisa en su cara. Se acercó a mi y ahí fue cuando me di cuenta de que al andar cojeaba un poco. Le devolví la sonrisa y el se sentó en una amaca cerca de la mía que debía ser de Thomas.

-Por fin despiertas...- Hizo una pausa- Ayer te acercaste a Thomas y después de estar quieta sin hacer nada te desplomaste, sin mas, nos preocupaste a todos verducha.

Me quedé pensando. No recordaba haberme caído en ningún momento, solo el acercarme a él y recordar aquel momento. Los pelos se me pusieron de punta al recordarlo.

Moví la cabeza para despejarme.

-Lo siento- Dije acariciando mi brazo.-¿Después que pasó?

-Thomas te cogió antes de que pudieras tocar el suelo y te llevó en brazos hasta aquí para después cuidar de ti toooda la noche, yo le hice compañía un rato.

Me sonrojé y miré hacia otra parte. Newt y Thomas era buenos chicos y les debía a los dos las gracias.

-Muchas gracias Newt...

-No hay que darlas...¿Que te pasó?

No sabia si confiar en él y contárselo, era demasiado pronto para confiar en nadie. Negué con la cabeza y vi como Alby y Thomas hablaban cerca de los muros del laberinto.

-Yo me tengo que ir a trabajar verducha...

-Voy contigo, te ayudaré- Dije antes de que pudiera decir nada más, él sonrió y me hizo un gesto con la mano para que fuera con él.

Le empecé a seguir por el Claro, viendo como saludaba a la gente con la mirada y a veces se paraba ha hablar. Estaba en mis pensamientos cuando un tacto cálido pasó por mi espalda, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. Miré al dueño de esa mano, Thomas. Me miraba serio.

-¿Estas bien?- Dijo en un susurro cerca de mi oído.

Al escuchar su voz me vino a la mente el recuerdo, en las manos abrasando en mis hombros y en la cara de pánico de Thomas y en el grito profundo que dio. Sin darme cuenta una lágrima corrió por mi mejilla y me aparte de su tacto con un rápido movimiento. Sentía impotencia al no poder acordarme de nada salvo aquel momento.

-Ey, ¿Ten encuentras bien?- Quiso volverme a tocar pero me aparté un poco más y asentí con una sonrisa.

-Si...Es solo que...- No se me ocurría nada para decirle, pero de repente llegó Newt y me salvó por un momento.

-Ten tu me ayudaras con el huerto...-Dijo dándome una pala, la cogí y le dedique una sonrisa.- ¿Tu también quieres ayudar verducho?

Thomas asintió con una mirada seria y se puso a cavar a mi lado mientras hacia preguntas y más preguntas.

-....¿y nadie ha intentado trepar hasta arriba?

-Se intentó, la hiedra no llega hasta arriba del todo...y además..¿A donde vas una vez que estás allí?

-¿Y que hay de la caja? Si..- Esta vez hablé yo pero Newt me interrumpió.

-También lo inentamos...La caja no baja una vez que hay alguien dentro...Lo intentamos todo ¿Sabes? Todo lo que se os pueda ocurrir, la única salida es atraves del laberinto... Y ahora...¿Quieres ser útil?- Le dijo a Thomas agitando un cubo que acababa de coger....- Toma, ve a traernos mas fertilizante....-Dijo tirándoselo.