Capítulo 17

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Narra autor

Faltaba menos de una semana para la boda de Key y la de Taemin. Se había decidido que la de Key sería un viernes y la de Taemin el sábado. Apenas era lunes y Key se estaba volviendo loco. Lo miraban sus padres ansioso y él le echaba la culpa al hecho de que se casaría el fin de semana; extrañaba demasiado a Jong, pero sabía que era lo mejor no verlo para así evitar levantar sospechas. Sólo quedaba esperar a Jonghyun y así, irse con él dejando atrás todo el infierno que había tenido por hogar durante sus 22 años.

Dentro de su habitación, había preparado una pequeña maleta. Era una de esas famosas "" pues, lo único que se llevaría era su cámara fotográfica, y porque en ella había muchas imágenes de Jonghyun, las cuales él recurría a ver cuándo se sentía solo.

El anillo que le había dado Jonghyun representaba mucho para él; no podía tenerlo en su dedo por ahora, así que se lo había colgado en el cuello con una pequeña cadenita de plata, tan delgada que podía pasar desapercibida para muchas personas y más si el anillo lo escondía debajo de su ropa.

Woohyun había asistido a su casa ayer, y formalmente le pidió su mano a su padre, colocando un anillo lleno de diamantes en su dedo. Key lo miraba y no sentía en absoluto nada; Woohyun no lo conocía nada y cada vez, eso quedaba más claro, pues, para Key un simple anillo de oro blanco sin decoración, valía más para él que el que ahora estaba en su dedo y del cual Woohyun presumía cada vez que tenía la oportunidad, diciendo los miles de dólares que le había costado.

Era inicio de semana y tenía que ir a la universidad. A la hora del receso, se sentó sobre una banca cerca de uno de los jardines de la universidad. El edificio de Jonghyun quedaba muy lejos, y verlo sería una casualidad.

Su teléfono sonó, pero frunció el ceño al ver que era el teléfono de "Yeou", claro, hasta ver de quién era el mensaje.

"no te das una idea de la tortura que han sido estos días para mí. No poder tocar tu suave piel, sentir tu aliento cerca de mí y cómo con tus manos recorres mi cuerpo. Te extraño demasiado amor. JH"

Key sonrió al ver el mensaje, sintió dinosaurios en el estómago, sí, porque lo que sentía por Jong no podía ser comparado con simples mariposas. Se apresuró y le respondió el mensaje.

"yo también te extraño demasiado amor, estoy contando cada segundo que pasa para volver a verte, para poder estar a tu lado y besarte, entregarme a ti y por fin, quedarme a dormir en la misma cama que tú. Siempre tuyo"

Después de responder el mensaje, volvió a su salón pues las clases continuaban; ya no podía esperar para ser el señor de "Kim Jonghyun", le gustaba mucho cómo sonaba eso; y con una sonrisa que todo el mundo podría jurar era por su boda con Nam Woohyun, entro a su salón, pensando en aquel chico al cual le había dado su corazón.

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Naeun caminaba por los pasillos de la universidad, estaba buscando a alguien en especial, y al verlo, sonrió llena de malicia. Se acercó a él y le preguntó:

-Hola, ¿has visto a Taemin?

Minho la miró completamente sorprendido y sobre todo a la defensiva, esa chica no le caía para nada bien.

-No, ¿por qué tendría que saberlo yo?

Preguntó Minho un poco déspota ante la pregunta de la chica.

-Perdona, es que con eso de que tú eres su mejor amigo...

Antes de que Minho pudiera decirle lo contrario, ella prosiguió:

-Bueno creo que a fin de cuentas esto también es de tu interés: Estoy esperando un hijo de Taemin.

Decía mientras colocaba una de sus manos sobre su vientre. Minho quedó en shock he intentó procesar lo que estaba diciendo ella, debía de ser una broma.

-No...puede ser.- fue lo único que salió de los labios de Minho en ese momento.

-Claro que lo es Minho, si no me crees, pregúntale a la servidumbre y a los padres de Tae; todos ellos me vieron salir del cuarto de Taemin hace dos semanas, después de que me hizo suya y juró que no amaba a nadie más que a mí, que era la primera vez que se había enamorado así. Bueno, espero que te haya invitado a nuestra boda el Sábado, estaremos honrados de que estés ahí, y cuando el niño nazca, esperamos tú seas el padrino. Me voy Minho, si vez a Taemin, le dices que lo busco. Adiós.

Y se fue moviendo el cabello y resonando sus zapatos por el pasillo.

Minho sentía una furia comerle las entrañas, ¿Taemin había seguido jugando con él a pesar de que sus palabras sonaban sinceras? No lo podía creer, se sentía de sobre manera utilizado, por primera vez en su jodida vida quería estar con alguien no sólo para tirárselo, realmente quería compartir su vida con Taemin como para que ahora todo esto se vaya al diablo.

Cegado completamente por la furia y por los celos, fue a ver a Taemin.

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Taemin se encontraba ordenando sus cosas, hoy no asesoraría a nadie, así que hoy saldría temprano, podría citar a Minho en su departamento y ver alguna película, pensó. Escuchó como se abría la puerta de golpe y en eso entró Minho.

-y dime Tae, ¿a cuántos aparte de a mí has metido a tu cama en este mes?

Taemin no podía creer lo que estaba escuchando.

-¿Qué mierda pasa contigo Choi?- preguntó Taemin con una cara repleta de duda.

-ahora actúa que no sabes... no, perdóname tú a mí, por no haberme dado cuenta que quise formalizar algo con una vil puta que se acuesta con todo al que considera divertido, ¿verdad?

-Minho...

Taemin sentía un nudo en su garganta ¿qué estaba pasando?

-No, ¡nada de Minho Taemin! Maldita sea la hora en la cual me acosté contigo la primera vez, jamás debí hacerlo; sólo fui un juguete más en tu selección de amantes de turno. Aquí se termina Taemin, búscate otro amante que te abra las piernas, para eso eres muy bueno.

Y Minho volvió a azotar la puerta. Taemin cayó de rodillas al piso y no pudo evitar llorar. ¿Qué demonios había pasado? Minho jamás lo había tratado así y ahora, le había gritado que era una puta; cómo si él fuera un maldito santo con pedestal.

Entonces, una afirmación en su mente, lo hizo sollozar más: Minho había estado con él sólo por diversión, y ahora que las cosas se ponían difíciles y le había pedido fugarse con él, lo había dejado sólo. Todo el tiempo sólo fue sexo, Minho jamás lo amo, y ahora que ya se lo folló varias noches, había decidido terminar con él. Taemin sentía culpa por haber creído que Minho podía sentir algo por él, incluso se arriesgó y le dijo que era "Neugdae" el nombre con el cual podía ser libre y ser él sin restricción alguna; había sido un estúpido.

Le mandó un mensaje a Key, mientras caminaba por las calles rumbo a su casa. En toda su vida, no recordaba haber llorado tanto, cómo lo estaba haciendo en este momento. Las lágrimas caían pos sus ojos, cegándolo en algunos momentos, mientras sus lentes de repente se llenaban de estas pues sus pestañas estaban llenas de las lágrimas que no podía contener.

"Yeou, al parecer sólo yo me iré contigo, pues, a fin de cuentas estoy solo, cómo siempre. Neugdae"

En menos de un minuto, su celular sonó.

"oh mi niño, lo que sea que te haya hecho ese imbécil de Choi, ya veremos la manera de cobrársela, Voy para tu casa y no acepto un no por respuesta. Yeou"

Taemin seguía llorando y de repente una sonrisa surco sus labios:

-con que así se siente que te rompan el corazón, ¿verdad?

Dijo Taemin para sí mismo, pues, era la primera vez que había amado, y también, la primera vez que le rompían el corazón.



Innocent or dangerous?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora